El 90% de los autónomos con tarifa plana en Madrid sigue en activo

La tarifa plana para autónomos de la Comunidad de Madrid, puesta en marcha hace dos años, ha beneficiado a cerca de 18.000 trabajadores por cuenta propia en la región, según los datos de la Consejería de Hacienda y Empleo. Esta iniciativa, que permite un abono único de 50 euros mensuales en concepto de cotización a la Seguridad Social durante los primeros 24 meses de actividad, fue ampliada en la prórroga de la Estrategia Madrid por el Empleo, consensuada con los interlocutores sociales. De esta forma, la Comunidad de Madrid ofrece 12 meses más que la medida inicial del Ministerio de Trabajo. 

Frente a las afirmaciones de que la tarifa plana no estaba dando resultados porque sólo el 15% de los autónomos que la habían disfrutado permanecía en su negocio transcurrido dos años, la Comunidad de Madrid ha explicado que el 69 % de los autónomos beneficiarios de esta medida mantiene su actividad dos años después de haberse dado de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Así lo exponen los datos que hacen referencia a los autónomos que se acogieron a esta línea en 2016 y que se dieron de alta en el RETA hace por lo menos dos años.     

Además, el 87 % sigue dado de alta como afiliado a la Seguridad Social. Es decir, prácticamente 9 de cada diez autónomos que se acogieron a la tarifa plana se encuentran hoy trabajando como autónomo. 

Así lo ha expuesto hoy el viceconsejero de Hacienda y Empleo, Miguel Ángel García Martín, durante la presentación de la ‘Radiografía del Trabajo Autónomo en la Comunidad de Madrid’ en su edición de 2018. “Estos datos reflejan que la tarifa plana de la Comunidad funciona, y es una herramienta de gran utilidad para los autónomos de nuestra región”, ha señalado.  

En el acto se ha presentado la evolución del trabajo autónomo en la región, que alcanzó en junio pasado su récord histórico, con 398.292 trabajadores por cuenta propia, lo que supone superar en casi 8.000 autónomos los niveles previos a la crisis (mayo de 2008). Los autónomos madrileños representan el 12,7 % del total de afiliados a la Seguridad Social en la región madrileña.  

Hasta el mes de julio, la Comunidad de Madrid es la segunda autonomía que ha registrado un mayor crecimiento del número de autónomos en el último año, con un incremento del 2,91 % interanual, solo por detrás de Canarias. Ello implica una subida 2,5 veces superior a la tasa de crecimiento del conjunto nacional para este período, fijada en el 1,15 %.  

Las mujeres autónomas han crecido un 21% desde 2009 

Del total de autónomos, el 35,1 % son mujeres. En este momento hay 139.146 afiliadas al RETA. Esta cifra supone un incremento del 21 % respecto a 2009 o, lo que es lo mismo, un incremento de 7,2 puntos porcentuales en el período. En el último decenio, la Comunidad de Madrid cuenta así con 24.258 autónomas más. En el mismo período, el número de hombres autónomos se ha incrementado un 1,8 %, es decir, 4.705 trabajadores más. 

El perfil del autónomo madrileño es el de un hombre de entre 40 y 54 años, que lleva más de tres años ejerciendo su actividad y que cotiza a la Seguridad Social por la base mínima en el sector servicios. El 60 % de los trabajadores por cuenta propia en la Comunidad de Madrid tiene una antigüedad superior a los tres años, y el 86 % cotiza en el sector servicios. De la misma forma, el 87,3 % cotiza por la base mínima.  

110.000 asalariados contratados por autónomos 

Del conjunto de autónomos en la Comunidad de Madrid, hay en la actualidad  46.223 que emplean a otras personas, fruto de un incremento del 2,06 % de este segmento en el último año. El informe estima que los autónomos madrileños personas físicas tienen a unos 110.000 trabajadores contratados. La cifra conlleva que, en conjunto, hay más de medio millón (505.616) de puestos de trabajo vinculados al trabajo autónomo.   

18 millones en ayudas

La prórroga de la Estrategia Madrid por el Empleo aprobada por el Gobierno madrileño contiene 14 medidas específicas para los autónomos, dotadas con un presupuesto de 17,55 millones de euros para el ejercicio de 2018.  

Estas ayudas, que acompañan al autónomo durante todo el ciclo vital, se sustentan en tres ejes: medidas para quienes quieren emprender; medidas para quienes han emprendido y quieren hacer crecer su proyecto; y medidas para dar cobertura en momentos de dificultad que requieren una segunda oportunidad.  

Para los costes iniciales de constitución, los autónomos cuentan con una ayuda de hasta 4.500 euros. En 2016 y 2017 se han beneficiado de esta medida 1.500 emprendedores. Además existen ayudas para el alquiler de locales en la Comunidad para que puedan instalarse los nuevos negocios, con rentas reducidas y plazo de carencia en los pagos. 

Junto a ello, destacan también las ayudas a la financiación como créditos para emprendedores puestos en marcha a través de distintos convenios firmados con Avalmadrid. García Martín ha estimado que esta iniciativa permitirá financiar operaciones por un total de 92 millones de euros, de los que pueden beneficiarse hasta 3.000 emprendedores. 

Para ayudar a los autónomos que han agotado la prestación por cese de actividad y buscan una segunda oportunidad, la Comunidad ha desplegado el programa Re-Emprende, con ayudas que pueden alcanzar los 5.100 euros por autónomos durante 18 meses. El programa SOS Empresa, por su parte, es un servicio gratuito de asesoramiento, prevención, recuperación y segunda oportunidad para trabajadores autónomos en dificultades.  

Hasta 10.000 euros para contratar

La Estrategia Madrid por el Empleo incluye ayudas para que los autónomos contraten a trabajadores, que pueden alcanzar los 10.000 euros por puesto de trabajo, después de que la prórroga del programa para este ejercicio haya incluido un complemento adicional de 2.000 euros para cada contrato que realice un autónomo cuando contrate a su primer empleado.  

Estas ayudas van desde la bonificación de 4.000 euros por contrato indefinido inicial, hasta las ayudas para colectivos que necesitan una alta protección, dotadas con 7.500 euros por contratos, como por ejemplo parados de larga duración, desempleado durante más de un año de más de 45 años de edad, víctimas de violencia de género, víctimas de terrorismo y personas en riesgo de exclusión social, entre otros colectivos. Cantidades a las que habría que sumar los referidos 2.000 euros cuando el autónomo contrate a su primer empleado.