Ya está activa la nueva línea del ICO para los autónomos afectados por el conflicto en Ucrania

Los autónomos, que se estén viendo afectados por el incremento de costes derivado de la guerra entre Ucrania y Rusia, ya pueden solicitar un crédito ICO avalado por el Estado. El Consejo de Ministros aprobó la apertura de un primer tramo de 5.000 millones de euros de la nueva línea de avales públicos que llegará hasta los 10.000 millones de euros. La medida, a diferencia del resto de acciones implementadas por el Gobierno a raíz del conflicto bélico internacional, está disponible para todos los sectores de actividad, exceptuando el financiero.

Fue a finales de marzo, cuando el Gobierno anunció la creación de una nueva línea de crédito ICO dentro del Plan de respuesta a la guerra de Rusia en Ucrania, que también recoge otras importantes iniciativas como la financiación de 20 céntimos por litro de los combustibles; las ayudas directas para la agricultura, pesca, ganadería y transportes. Sin embargo, y a pesar de haber pasado algo más de un mes desde su anuncio, no ha sido hasta ahora que el Consejo de Ministros ha aprobado la activación del primer tramo de la línea con un importe de 5.000 millones de euros.

El Boletín Oficial del Estado (BOE) recoge esa decisión con la publicación de la Resolución de 10 de mayo de 2022 de la Secretaría de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa. Así los autónomos y pequeños negocios que tengan dificultades de liquidez pueden ya solicitar esta nueva línea de crédito avalada por el Estado. “La invasión rusa de Ucrania ha desencadenado un incremento de la incertidumbre, restricciones a los flujos comerciales con Rusia y Bielorrusia y mayores precios de materias primas energéticas y no energéticas que hacen más difícil el contexto en el que las empresas deben operar […] En algunos casos, este incremento de los costes energéticos puede poner en riesgo la cobertura de las necesidades de liquidez a corto plazo” recoge la normativa.

Los autónomos de todos los sectores pueden acceder a los créditos ICO

Una de las características de esta medida es que está abierta para los trabajadores por cuenta propia y negocios de todos los sectores de actividad, que se hayan podido ver afectados de una u otra forma por el conflicto ucraniano. Se trata de un importante novedad con respecto al resto de medidas que contempla el Plan de Respuesta a la Guerra.

Hay que recordar que la mayoría mayoría de los trabajadores por cuenta propia fueron excluidos de algunas de las principales medidas del Plan como el impulso de ayudas directas o las mejoras en los plazos de carencia de los créditos de la Línea ICO-Covid, que fue solicitada por millones de negocio durante la pandemia y que fueron reservados exclusivamente para cuatro sectores de actividad: la agricultura, ganadería, transporte y pesca. Fueron excluidos un importante número de autónomos afectados que se encuentran ahora, como denunciaron a este diario diferentes asociaciones representativas con graves problemas para afrontar la devolución del dinero solicitado durante la emergencia sanitaria.

Sin embargo, la nueva línea de avales del ICO no impone ningún tipo de restricción en cuanto a las actividades que la pueden solicitar. “Se considera que la generalidad de las empresas y autónomos del país se han visto afectadas en mayor o menor medida por los efectos económicos de la agresión rusa a Ucrania, incluidas las sanciones adoptadas. El incremento de los precios de la energía y, en general, las presiones sobre otros precios en la economía generan dificultades en todos los sectores productivos” señala la normativa.

Sólo se excluye al sector financiero y de seguros

Según establece, la línea “se configura con un ámbito subjetivo muy abierto, de forma que todas las empresas y autónomos de todos los sectores excepto el sector financiero y de seguros, que se hayan visto afectadas por los efectos económicos de la guerra en Ucrania, tales como el incremento de los precios de la energía, materias primas o electricidad, puedan beneficiarse de las facilidades de acceso a la liquidez que proporciona”.

Por lo que todos aquellos sectores que quedaron excluidos de las mejoras introducidas en los créditos ICO del Plan de Respuesta a la Guerra, entre los que destacan la hostelería, el comercio o las agencias de viaje, podrán beneficiarse de la solicitud de esta nueva línea de avales públicos.

Las características de la nueva línea de avales del ICO

En cuanto a las características económicas de la nueva línea de avales del ICO por el conflicto ucraniano, la entidad destaca que está abierta a todos los sectores y que podrá ser solicitada hasta el 1 de diciembre de 2022, siempre y cuando los trabajadores por cuenta propia no estén en situación de morosidad o en inmersos en un procedimiento concursal, tampoco pueden estar sujetos en un procedimiento sancionador por parte de la Unión Europea, ni tener en el momento de solicitud del aval ningún proceso de ejecución de avales gestionados por el ICO.

Según explican, “el aval garantizará hasta el 80% de los nuevos préstamos de operaciones solicitadas con importe máximo avalado de hasta 400.000 euros con carácter general, o 35.000 euros para empresas del sector primario, acuicultura o pesca, en una o varias operaciones de préstamo. En estos casos, el aval emitido tendrá una vigencia igual al plazo del préstamo concedido, con un plazo máximo de 10 años”. Y añaden que “para préstamos por un volumen superior, el aval podrá garantizar hasta el 80% del importe del crédito para pymes y autónomos y hasta el 70% para el resto de empresas, si bien el importe total del préstamo no podrá ser mayor del 15% del volumen de negocios anual medio total del beneficiario durante los tres últimos ejercicios, o del 50% de los costes de la energía en los doce meses anteriores a la solicitud del préstamo”.

Para todas estas operaciones, el autónomos contará con un periodo de carencia inicial del principal de 12 meses y un plazo de amortización de la operación de ocho años.

Por último, el ICO recuerda que “las Entidades Financieras deberán aplicar los mejores usos y prácticas bancarias en beneficio de sus clientes y no podrán condicionar la aprobación de los préstamos a la contratación por parte del cliente de ningún otro servicio o producto”.