Los agricultores piden al Gobierno que no les obligue a llevar el llamado "cuaderno de campo digital"

A partir del 1 de septiembre de 2023, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, exigirá que una gran parte de los profesionales del sector cumplimenten cada mes un cuaderno digital, con el que se facilite información a las administraciones.

Desde hace meses, las organizaciones de agricultores vienen pidiendo a las Comunidades Autónomas que se solicite al Ministerio el retraso de esta obligatoriedad del cuaderno de campo digital, “hasta que se sienten las bases para poder preparar al sector para este cambio”. 

“Estamos ante una PAC con más exigencias, más planteamientos medioambientales y con una serie de requisitos muy complicados a la hora de ponerlas en marcha, con mayores trámites burocráticos. Cada PAC lo que hace es complicar más lo que veníamos haciendo con la anterior, con trámites que no tienen mucho sentido”, denunció ante este diario el director de Relaciones Institucionales de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), Juan José Álvarez. 

“Los agricultores y ganaderos no están preparados”

La organización agraria recientemente presentó un estudio de la situación tecnológica del sector, en el que se concluyó que los agricultores y ganaderos “no están preparados para que se les digitalice a golpe de decreto, ya que carecen de la formación y cualificación necesaria para poder cumplir con esta nueva obligación”.

Además, señalaron, “llega en el peor momento posible, ya que no hay que olvidar que la nueva obligación representará en cualquier caso un nuevo coste importante que añadir al incremento de costes de producción registrados en los dos últimos años”. En palabras de Asaja, el cuaderno digital “podría suponer un motivo más para agravar la merma rentabilidad de las explotaciones”. 

Por este motivo, desde hace meses, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores viene solicitando a las Comunidades autónomas que se pida al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación el retraso de esta obligatoriedad, “hasta que se sienten las bases para poder preparar al sector para este cambio”.

Todo esto teniendo en cuenta que, según información del COPA-COGECA (la unión de las dos grandes organizaciones paraguas agrícolas COPA y COGECA de la Unión Europea), España parece ser el único país de la Unión Europea que ha decidido implantar el cuaderno de campo digital.

¿Qué es el cuaderno de campo digital que deberá registrar cada mes los datos de sus producciones?

Tal y como recordaron desde Asaja, a partir del 1 de septiembre de 2023, todas las explotaciones que superen las 30 hectáreas de cultivos herbáceos, las más de 10 hectáreas de cultivos leñosos, o las más de cinco hectáreas de regadío, “deberán cumplimentar los tratamientos realizados de forma mensual en un cuaderno digital que, en teoría, facilitarán las administraciones”. 

Es decir, deberán registrar cada mes los datos de cultivos y producciones en cada parcela, así como los registros de empleo de fertilizantes y fitosanitarios en cada explotación, entre otras cuestiones.

“El Gobierno español, que tiene potestad para hacerlo, retrasó el cuaderno de campo digital hasta el 1 de septiembre. A ver si ahora vamos a ser nosotros más quijotes que en cualquier otro país. Si se puede aplazar más, que se haga. Está aprobado en otros países, pero no lo han puesto en marcha”, destacó el director de Relaciones Institucionales de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores.

Por tanto, añadió, lo que debería hacer el Gobierno es “no complicar más la vida al agricultor”, algo que burocráticamente puede hacerse si se retrasa el cuaderno digital. “Si no tiene sentido prorrogarlo y aplicarlo, pues entonces que no se ponga en marcha. Esto es lo que pedimos desde Asaja”, 

Las herramientas informáticas para poner en marcha el Cuaderno Digital de Explotación (CUE) estarán disponibles de forma gratuita a partir del 1 de julio, fecha desde la cual su uso será voluntario. 

Si el agricultor no tiene acceso a medios electrónicos, el Ministerio establece que será la comunidad autónoma quien ponga a disposición una serie de servicios para cumplir con la normativa.

Contenido mínimo del cuaderno digital de explotación

El Boletín Oficial del Estado recoge el contenido mínimo que deberán incluir los agricultores y ganaderos en el cuaderno digital, estableciendo los datos que cada explotación deberá comunicar.

Así lo refleja la Orden APA/204/2023, de 28 de febrero, por la que se establece y regula el contenido mínimo del Registro autonómico de explotaciones agrícolas y del Cuaderno digital de explotación agrícola y la cronología de incorporación de fuentes de información en el Sistema de información de explotaciones agrícolas, ganaderas y de la producción agraria.

“Los profesionales deberán mantener actualizado el cuaderno e incluir cada tratamiento antes de un mes desde la fecha de aplicación. Estos datos permitirán obtener un indicador por hectárea de cultivo y no se podrá superar la cantidad de producto”, destacaron desde Asaja, quienes recordaron cuál es el contenido mínimo del cuaderno digital de explotación: 

• Datos generales del cultivo en cada parcela agrícola: se facilitará además información complementaria, como data de siembra y fecha de cosecha.
• Datos de producción a nivel de cada parcela agrícola: habrá que indicar la cosecha en Kg. / hectárea, así como el destino de la producción y de los restos vegetales. En el caso del viñedo, habrá que identificar y ubicar a la bodega receptora de la uva.
• Tratamientos fitosanitarios: es preciso indicar las actuaciones que se hacen en cada parcela, así como el posible uso de semilla tratada o de aplicaciones post-cosecha. Habrá que consignar tanto los datos de los productos utilizados como del aplicador, de la maquinaria y del asesor.
• Fertilización: se deberá indicar la fecha de aplicación, el material fertilizante empleado, así como su composición en carbono orgánico, macronutrientes y micronutrientes. Se adjuntará además el plan de abonado y se identificará el asesoramiento recibido.
• Riego: se identificará la fecha de riego, el sistema empleado y la superficie alcanzada. También el origen y cantidad del agua utilizada.
• Cosecha comercializada: se identificará el producto y la fecha en la que se realiza la venta.
• Analíticas, en caso de que se hayan hecho