Subcomisión para la reforma del RETA

ATA propone que los autónomos cobren tres meses de paro por año cotizado

El Congreso ha iniciado hoy la rueda de comparecencias de la Subcomisión para la Reforma del RETA, marco bajo el que se debatirá también la exención de la cuota para quienes tengan ingresos inferiores al SMI.

lorenzo amor pacto de toledo
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, durante su comparecencia.
ATA propone que los autónomos cobren tres meses de paro por año cotizado

Lo urgente ya está en marcha. Ahora empieza el camino hacia lo trascendental. A las 16:00 horas comenzó en la sala Lázaro Dou del Congreso de los Diputados la primera comparecencia de la Subcomisión para la Reforma del RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). El cónclave, integrado por un letrado y los 15 vocales de la Comisión de Empleo y Seguridad Social de los distintos partidos políticos, ha tomado nota de las propuestas de los primeros espadas de las asociaciones de autónomos, de cara a mejorar la protección social de un colectivo conformado por más de 3,2 millones de trabajadores.

Los avances propuestos por la Federación Nacional de Asociaciones de Autónomos (ATA) pasan por la equiparación del cese de actividad de los afiliados al RETA con los del Régimen General. “La prestación por cese de actividad está demasiado encorsetada, la normativa que establece la fórmula para su cobro es muy rígida, con reglas sobreprotectoras. Quizá porque el legislador pensó injustamente que los autónomos somos defraudadores por naturaleza”, ha criticado Lorenzo Amor, presidente de ATA.

Con el objetivo de hacer más atractivo el “paro de los autónomos”, y por ende aumentar el número de cotizantes por este concepto, Amor ha inisitdo en la necesidad de equiparar sus condiciones a las de los asalariados. Si bien cotizar o no por cese de actividad seguiría siendo una decisión voluntaria, quienes decidiesen contribuir al sistema percibirían tres meses de prestación por cada año cotizado durante un máximo de un año. Cabe recordar que el Régimen General determina cuatro meses por año cotizado y dos años de prestación como tope.

Pese a que anualmente las Mutuas -entidades encargadas de la gestión-  ingresan en torno a 130 millones de euros por esta prestación apenas destinan 15 euros de cada 100 a pagar el “paro”. Concretamente, en 2016 de las 3.717 solicitudes resueltas el 56,52% (1.616) obtuvieron un 'no' como respuesta. Cifra a la que hay que añadir las más 221 que no llegaron a tramitarse y las más de 300 pendientes de acuerdo. Asimismo, según los datos de Ejecución Presupuestaria de Seguridad Social, los ingresos de este apartado caen a un ritmo del 4,54% interanual hasta el mes de agosto.

Plan PREPARA

La Ley dice que parte del dinero que se recauda por cese de actividad ha de destinarse a realizar cursos o actividades para el reciclaje y reemprendimiento de los autónomos. Concretamente el 0,1% de los apenas 20 euros al mes que supone la cotización por paro (2,20% de la base elegida). Sin embargo, tal y como ha explicado el presidente de ATA, “nadie sabe darnos la razón de dónde han ido a parar los más de siete millones de euros que debían haberse destinado a formación ocupacional de los autónomos y que salen de esta cotización”.

En esta línea, la propuesta pasa por diseñar un Plan Prepara para los autónomos que hayan agotado la prestación por cese de actividad y diseñar itinerarios de reinserción que otorguen al colectivo una verdadera segunda oportunidad. Aspecto este último que se completaría con una rebaja fiscal consistente en establecer quitas en las deudas de Hacienda y Seguridad Social a quienes se hayan visto obligados a echar el cierre. “Se les tendría que permitir pagar el principal y eximirles del pago de los intereses”, ha puntualizado.

Más por menos

Que haya más cotizantes en el sistema pero con un sistema de cotizaciones más justo. Este es el objetivo de las cuatro propuestas de la Federación que preside Lorenzo Amor.

La primera de ellas consiste en un sistema de aportaciones voluntarias anuales al inicio de cada ejercicio. Dicha cantidad pasaría a elevar la base de cotización entre abril de ese mismo año y abril del siguiente, sin que el autónomo tuviese que pagar más de cuota mensual. El beneficio sería doble, primero para el autónomo que vería una mejora en las coberturas (pensiones, invalidez, etc…) y segundo a efectos de recaudación del sistema. Según ATA, unos 350.000 autónomos se acogerían cada año a este sistema.

Por otra parte, ATA propone un modelo de tres tramos de cotizaciones para los autónomos con ingresos inferiores a los 1.000 euros al mes. Así, con excepción de los societarios, para los que sus ingresos se encuentren entre el SMI y la base mínima del RETA (707,60 euros y 919,80 euros) se le aplicará sobre la base mínima los tipos del SETA (18,75% + 3,3%). Es decir, un 22,05%, lo que traducido en cuota sería entre 156 y 203 euros al mes

Para aquellos cuyos ingresos sean inferiores al SMI (707,6 euros) se aplicará una tarifa hiperreducida de 50 euros durante dos años prorrogables otros dos si demuestra tras el primer periodo el autónomo que sus ingresos han sido inferiores al SMI mediante presentación del modelo 347 de los dos últimos ejercicios y resumen anual del IVA. Al objeto de evitar posibles fraudes, la medida no se aplicará a los autónomos societarios, titulares o arrendatarios de locales o establecimientos abiertos al público, quienes tengan vehículos afectos a la actividad y quiénes trabajen bajo licencia administrativa.

Por último, se establecerá una Tarifa Joven de 30 euros para los estudiantes universitarios o de Formación Profesional menores de 25 años.

Ajustar las cotizaciones de los autónomos cuyas ‘nóminas’ son inferiores al SMI (Salario Mínimo Interprofesional) será casi con toda probabilidad algo que salga adelante por unanimidad una vez finalicen los trabajos de la subcomisión.  El secretario general de UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos), Eduardo Abad Sabaris, también ha defendido una cotización mínima “no superior a la establecida para los beneficiarios de la Tarifa Plana” para este colectivo.

Asimismo, Abad ha insistido en el aumento de las bases para los que están en el lado opuesto. Así, los trabajadores por cuenta propia cuyas rentas superasen los 70.000 euros brutos anuales pasarían a cotizar por una base mínima de 1.839,64 euros al año. En el caso de quienes no lleguen a los 40.000 se tomaría la actual base de cotización (919,80 euros) como referencia.

Recaudar 3.500 millones de euros

Mejorar los ingresos del sistema es otro de los retos que habrá de afrontarse en la subcomisión. A este respecto, desde ATA consideran que la Seguridad Social podría ingresar 3.500 millones de euros adicionales cada año de diseñarse un régimen asimilado dentro del RETA para los 382.000 autónomos administradores con control único de la sociedad. En este caso, sería la propia sociedad quien asumiese el pago de las cuotas, sueldo y retenciones, computándose como costes salariales, sujetos por tanto a desgravación. Con ello “seguramente mejorarían sus bases de cotización”.

Dicha medida aportaría un montante de 2.000 millones de euros. Los 1.500 restantes provendrían del destope de las bases máximas de cotización a partir de los 47 años -con lo que la recaudación mejoraría en 1.100 millones de euros-, el cómputo de la pensión en función de lo cotizado durante toda la vida laboral y la rebaja del límite de 35 a 25 años para poder compatibilizar trabajo y pensión.

Integrar a más personas para solventar el déficit del sistema sin perjudicar la recaudación ha sido también una de las premisas defendidas por el secretario general de UPTA. “La reforma ha de ser transitoria, prudente, eficiente y equilibrada. Basada en el objetivo del déficit cero, teniendo en cuenta que éste está relacionado con el número de contribuyentes y su capacidad real de renta, por lo que además del análisis se requiere abordar un conjunto de medidas que promocionen el emprendimiento, aseguren el relevo generacional y mejoren las condiciones de vida y renta de los autónomos españoles”, ha afirmado.

Esto conllevaría avanzar en un sistema de cotizaciones reales, revisar los conceptos de cotización voluntaria o hacer obligatoria la cotizar por Formación Profesional tal y como ya se hace en el Régimen General.

Indemnizaciones para los TRADE

Regularizar la situación del colectivo de muchos autónomos económicamente dependientes (TRADE) está también sobre la mesa de la Subcomisión. “La mejor forma de combatir el falso autónomo es dar seguridad jurídica a los TRADE”, ha afirmado Amor. Para ello, ATA propone que sea el autónomo y no la empresa quien registre el contrato en la Seguridad Social y que las indemnizaciones a las que tienen derecho en caso de ERE estén exentas de tributación (actualmente han de pagar a Hacienda hasta el 30%, ya que se considera como renta profesional).

Cabe destacar que de los 300.000 TRADE que hay reconocidos por la EPA, sólo 10.000 están inscritos como tal en Seguridad Social.

Habitualidad

Encima de la mesa quedan también temas como definir la habitualidad y la parcialidad. Desde ATA proponen que si bien tengan la obligatoriedad de darse de alta en el RETA, no se considere “autónomos habituales” a quienes tengan ingresos de menos de la mitad del SMI y puedan demostrar que no han realizado una actividad de forma continuada durante dos meses o discontinuada durante cuatro en un periodo de 12 meses. Quedarían excluidos quienes pertenezcan a un colegio profesional, tengan en propiedad o arrendado un despacho o local abierto al público, un vehículo afecto a la actividad o quienes trabajen bajo licencia administrativa.

Por su parte, UPTA coincide en la necesidad de aclarar un “concepto jurídico indeterminado” y propone también el umbral del salario mínimo como indicador de si la actividad se ejerce con carácter habitual o no.