Subcomisión para la reforma del RETA

ATA rechaza aumentar las cotizaciones y pide cuotas bajas para los que menos ingresan

La Federación que preside Lorenzo Amor defiende un modelo de tres tramos de cotización para los trabajadores cuyos ingresos están por debajo del SMI.

Subida de cotizaciones
El objetivo es incorporar más cotizantes y hacer más flexible el sistema.
ATA rechaza aumentar las cotizaciones y pide cuotas bajas para los que menos ingresan

“Adecuar las cotizaciones a los ingresos de manera obligatoria supone, a día de hoy, subir las cuotas al 75% de los autónomos y, en eso, ATA no va a estar”. Así de tajante se mostró Lorenzo Amor, presidente de la Federación de Autónomos, ante los 15 vocales de la Comisión de Empleo del Congreso de los Diputados que integran la Subcomisión para la reforma del RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos).

De llevarse adelante la propuesta -apoyada por otras asociaciones y partidos políticos-, la medida apenas tendría efecto en un millón de autónomos, eso “en el mejor de los casos”, puntualizó Amor durante su comparecencia. Según las cifras expuestas por el presidente de ATA, tres de cada cuatro autónomos declaran ingresos netos superiores a la base mínima, lo que les posibilita cambiar su base de cotización dos veces cada año –cuatro a partir de enero del año próximo con la entrada en vigor del conjunto del articulado de la Ley de Reformas Urgentes para el Trabajo Autónomo-.

La brecha se produce en aquellos autónomos cuyos rendimientos son inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI). A este respecto, la Federación de Autónomos propone un modelo de tres tramos de cotización.

  • El primero integraría a aquellos con ingresos entre el SMI y la base mínima del RETA (707,60 euros y 919,80 euros). Éstos cotizarían por los tipos mínimos del Sistema Especial para los Trabajadores Agrarios (18,75% + 3,3%). Es decir, un 22,05%, lo que traducido en cuota sería entre 156 y 203 euros al mes. Al objeto de evitar posibles fraudes, deberán presentar al inicio y en cada ejercicio, resumen anual del IVA y el modelo 347 de los dos últimos ejercicios. Asimismo, los autónomos societarios quedarán fuera.
  • El segundo tramo, para quienes cuenten con ingresos inferiores al SMI  (707,6 euros) se aplicará una tarifa “hiperreducida de 50 euros al mes” durante dos años. Ésta sería prorrogable un año más si se demuestra – a través del modelo 347 de los dos últimos ejercicios y resumen anual del IVA-  que sus ingresos han sido inferiores a dicho salario mínimo.También quedarán excluidos los autónomos societarios y titulares o arrendatarios de locales o establecimientos abiertos al público, así como quienes posean vehículos afectos a la actividad o trabajen bajo licencia administrativa.
  • Por último se propone el desarrollo de una Tarifa Joven de 30 euros para menores de 25 años que estén cursando estudios universitarios, superiores reglados o FP.

18 meses después

En la parte práctica, Amor alegó lo “difícil de conocer los ingresos de muchos autónomos”. Es el caso de los 400.000 que tributan por módulos, los 583.413 societarios o 200.295 familiares colaboradores.

Se suma el hecho de que Hacienda “no tiene conocimiento en tiempo real de los rendimientos netos de los autónomos, sino 18 meses después de cada ejercicio. Y en 18 meses cambian muchas cosas”.

Por otra parte, cabe destacar que a día de hoy los autónomos pueden elegir libremente su base de cotización entre 919,80 euros de mínima y los 3.751,20 euros de máxima y que pueden cambiarla dos veces cada ejercicio en función de los ingresos. Opciones que se ampliarán a cuatro a partir del 1de enero de 2018.

No asumir riesgos

Hasta el mes de junio (últimos datos publicados por Seguridad Social) 2.168.556 autónomos cotizan por la base mínima, esto es un 66,6% del total del colectivo (3.256.355). Otros 741.313, el 22,8%, lo hacía por una base –elegida voluntariamente- de entre la mínima y 1,5 veces ésta. El resto del colectivo lo hizo por encima.

Amor detalló que la cifra tiene mucho que ver con que “ningún autónomo sabe lo que va a pasar mañana y, por tanto, no quiere asumir riesgos hoy”. Asimismo, apuntó a la responsabilidad de fondo de la Seguridad Social, “la mayoría de los autónomos desconocen la base por la que cotizan. Les invito a ir y darse de alta como autónomo en cualquier oficina de la Tesorería de la Seguridad Social, generalmente tachan la base mínima sin preguntar por qué base quiere cotizar”.

En este sentido, además de la pedagogía a través de mecanismos tan sencillos como el envío del informe de vida laboral del autónomo con simulación de cuantías, prestaciones y pensión anual según la misma así como simulación con del cálculo si aumentasen su base en 100 euros, una de las labores a afrontar es el desarrollo de medidas que flexibilicen el sistema. Punto este en el que ATA propone un sistema de aportaciones únicas voluntarias al inicio de cada ejercicio, destopar la base de cotización para los mayores de 47 años, o que las cuotas, los salarios y las retenciones de los autónomos societarios sean asumidas por la sociedad y por tanto deducibles fiscalmente.