Las autoescuelas reclaman al Gobierno que mantenga la ayuda al combustible para este sector

Recientes declaraciones ofrecidas por representantes del Gobierno hacen prever que se acerca el final de la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante. No obstante, dejan la puerta abierta a las ayudas específicas para el sector transporte. Ante esto, la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) aseguró que “no se puede repetir la exclusión” que sufrieron las autoescuelas respecto a las ayudas directas al transporte, pactadas en marzo de 2022 por el Ejecutivo y el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), “por el mero hecho de no pertenecer a dicho comité”. 

Si bien es cierto que durante los meses de agosto y septiembre los precios de los combustibles experimentaron una tendencia a la baja, esta realidad terminó a principios de octubre. Como consecuencia de los últimos acuerdos tomados por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), los precios volvieron a ascender de forma alarmante, superando en muchas provincias los dos euros por litro. Lo expertos vaticinan que los precios del crudo no bajarán a medio plazo y que tanto el precio de la gasolina como el precio del gasóleo continuarán subiendo durante el próximo año. 

Pese a las predicciones de los expertos en la materia, el Gobierno de España no parece estar dispuesto a mantener el descuento de 20 céntimos por litro de carburante, puesto en marcha en abril de 2022. Aunque todavía no se conoce qué va a suceder, lo acontecido en otros países de Europa hace predecir qué futuro le espera al precio del carburante en España: Alemania ha eliminado la subvención y Francia ha bajado la cuantía de forma progresiva. 

Las autoescuelas piden que se les tenga en cuenta si el Gobierno activa una ayuda al carburante

La idea de que el Gobierno no prorrogue el descuento de 20 céntimos por litro de carburante es alarmante para prácticamente toda la población española cuyo medio de transporte no sea el público. Una preocupación que aumenta en aquellas personas cuyo sustento económico depende de un vehículo, como es el caso de los transportistas, los taxistas, los repartidores o las autoescuelas, entre otros. No obstante, el Gobierno ha dejado la puerta abierta a la idea de activar ayudas específicas para el sector transporte, unas ayudas que no llegarían a todos los negocios que se mueven por carretera.

“No se puede repetir la exclusión que sufrieron las autoescuelas respecto a las ayudas directas al transporte, pactadas en marzo de este año por el Ejecutivo y la CNTC, por el mero hecho de no pertenecer a dicho comité”, denunciaron desde la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE). 

“Las autoescuelas desempeñan una función auxiliar y fundamental para el sector del transporte en la medida en que son las que forman a los aspirantes para la obtención de permisos de conducción y, además, la mayor parte de centros de certificados de aptitud profesional (CAP), necesarios para convertirse en conductor profesional, son autoescuelas”, explicó el presidente de CNAE, Enrique Lorca.

Muchas autoescuelas no pueden subir los precios

Durante los últimos meses, y según afirmaron desde la Asociación Nacional de Autoescuelas (ANAES), algunos autónomos del sector ya se han visto obligados a echar el cierre, no pudiendo superar la crisis del Covid 19 y el posterior incremento de los costes. Otra de las consecuencias directas de esta situación ha sido la subida de las tarifas de las clases de conducir, una decisión que muchos han tenido que tomar pese al riesgo que podría suponer para captar nuevos alumnos. Por no hablar de la dificultad que pueden llegar a tener las pequeñas autoescuelas para competir contra las más grandes.

Sin embargo, esta subida no es posible para todos, ya que, en caso de decidir subir los precios de las clases, esto no es algo que pueda hacerse de hoy para mañana. Las autoescuelas suscriben con sus alumnos un contrato que incluye el precio de la docencia. Este contrato, según explicaron desde CNAE, no se puede modificar aunque la factura del combustible siga aumentando. 

En este contexto, cabe destacar que, según explicaron a este diario fuentes cercanas a la Dirección General de Tráfico, estos contratos están regulados por la DGT, siendo una obligación ineludible para las autoescuelas su correcta elaboración y mantenimiento. De hecho, cuando se ejecutan inspecciones por parte de la DGT hacia estos negocios, el contrato es uno de los documentos requeridos por los inspectores durante dicho procedimiento. 

“Por motivos obvios, los combustibles representan una parte fundamental en la estructura de costes de nuestros centros. De eliminarse la ayuda de 20 céntimos por litro a las autoescuelas, se pondría en serio riesgo la enseñanza de la conducción”, explicó el presidente de CNAE, Enrique Lorca.

Hoy en día, destacó Lorca, cualquier sobrecoste añadido “puede resultar fatal para un sector que da trabajo directo a más de 35.000 familias y que es clave en lo que respecta a la vertebración territorial y la seguridad vial del país”.

En marzo se aprobaron ayudas directas para el transporte

A finales de marzo de 2022, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana anunció, tras el acuerdo con los representantes del Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC), unas ayudas directas de 450 millones de euros para el sector transporte, que se sumaban a la bonificación de 20 céntimos de euro por litro o kilo de gasolina. Unas ayudas que dejaron fuera a las autoescuelas.

El objetivo principal de la iniciativa, según explicaron desde el Gobierno, fue reducir de manera inmediata el precio del combustible para los transportistas, apoyar a las empresas del sector y garantizar la protección social de los autónomos. Esta línea de ayudas específica, incluyó cuatro medidas principales:

• Ayudas directas por un importe de 450 millones de euros para las empresas de transporte de mercancías y de pasajeros en función del tipo de vehículo. La cuantía establecida fue de 1.250 euros por camión, 950 euros por autobús, 500 euros por furgoneta y 300 euros por vehículo ligero (taxis, VTC y ambulancias).
• Ampliación del plazo de vencimiento de los créditos avalados por el ICO hasta 8-10 años, y una ampliación del período de carencia de los créditos avalados por el ICO de 6 meses.
• Una nueva línea de créditos al sector avalados por el ICO con 12 meses de carencia
• La devolución mensual del combustible profesional desde abril y la puesta en marcha de un sistema de devolución anticipada mensual con regularización anual.