Se destruyeron hasta 170.000 puestos de trabajo

El Banco de España confirma que la subida del SMI perjudicó especialmente al empleo en los pequeños negocios

El Banco de España confirmó en un informe que la subida a 900 euros del SMI en 2019 perjudicó especialmente el empleo que generan los pequeños negocios de entre cinco y diez trabajadores.

El Banco de España confirma que la subida del SMI perjudicó especialmente al empleo en los pequeños negocios

Mientras que en la mesa de diálogo social el Gobierno, sindicatos y patronal negocian una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), el Banco de España alerta en un informe sobre las pérdidas que originó la subida de este parámetro en el 2019. En el documento el organismo regulador constata cómo el incremento de hasta un 22% del salario base no sólo provocó despidos, sino impidió la realización de nuevos contratos de trabajo. En total, el BdE estima que se pudieron llegar a perder un total de 170.000 empleos ese año. Una situación que afectó principalmente a los negocios de menos de cinco y diez trabajadores.

Para llegar a esas conclusiones en el informe 'Los efectos del salario mínimo interprofesional en el empleo: nueva evidencia para España’, el organismo regulador utilizó los microdatos proporcionados por la Muestra Continua de Vidas Laborales procedentes de la Seguridad Social, para comparar el número de personas que cobraban en 2018 una cuantía inferior al SMI, con las que percibían este salario en 2019. También tiene en cuenta la posible pérdida de nuevos contratos que se produjo en 2019 por el nuevo SMI. Con todos estos datos, el Banco de España constató el perjuicio que supuso para el mercado laboral el mayor incremento sufrido hasta el momento en el SMI: “del análisis se desprende que, tras el incremento del SMI en dicho año, hubo un menor crecimiento del empleo del colectivo con menores salarios” resume el BdE.

De esta forma, el Banco de España estima que el incremento del SMI supuso en 2019 la pérdida de entre un 6% y 11% del empleo neto. Aunque el BdE no ofrece una cifra exacta sobre el número de puestos de trabajo -según el análisis que han realizado diferentes expertos en base al número de trabajadores que había a diciembre de 2018-, se podría cuantificar la pérdida entre unos 90.000 y 170.000 empleos. Se trata de una incidencia de pérdidas de empleos que se produjo sobre todo entre los pequeños negocios, que no pudieron asumir el incremento.

Los negocios más pequeños son los más afectados por el aumento de SMI

Todas estas conclusiones se alcanzan a través del análisis del comportamiento de la subida del SMI hasta los 900 euros en los sectores más afectados. Entre ellos, se encuentran los autónomos y pequeños negocios. “Las mayores incidencias del incremento del SMI aprobado para 2019 se encuentran entre los jóvenes, temporales, de estudios bajos, en establecimientos pequeños” recoge el informe.

Así, los negocios de hasta cinco trabajadores son los que más sufrieron la aprobación de este salario base, con una incidencia del 33,8%. “Es interesante notar que la incidencia del SMI-19 es mayor en los que tienen hasta 5 trabajadores, del 34%, y se reduce paulatinamente con su tamaño” destaca el Banco de España en el estudio. A estos negocios le siguen las actividades con hasta diez trabajadores, con una incidencia del 10,9%. Luego los negocios de entre 11 y 50 trabajadores con una afectación del 8,4% trabajadores y en las de hasta 100 trabajadores del 7,1%.

Por sectores, sobre sale especialmente la agricultura con el 59,2% de afectación, seguida de la industria (3,4%), la construcción (2,7%) y los servicios de mercado con 9,3%.

Los autónomos soportarían este año dos costes añadidos si se vuelve a subir el SMI

El objetivo del Gobierno para este año es volver a incrementar el SM. La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, fue recientemente preguntada sobre ello y aunque fue ambigua en cuanto a la fecha, sí que recordó que se cumpliría este 2021. Es un hecho que afectará directamente a los trabajadores por cuenta propia quienes, si se produce el acuerdo, deberían hacer frente antes de que acabe el año a la subida de su cuota a la Seguridad Social. Y también, si son empleadores, deberán asumir el aumento de los costes salariales derivado del incremento del SMI.

La cuota de los autónomos quedó ligada a principios del año al SMI en el Real Decreto-ley 2/2021, de 26 de enero. Según esta la norma, la subida del SMI influirá en el incremento de las bases de cotización mínimas y en los tipos de cotización de los trabajadores por cuenta propia. En concreto, se establece en la disposición transitoria cuarta que, "mientras no se lleve a cabo la subida del salario mínimo interprofesional para el año 2021 no será de aplicación" la subida de los tipos por cese de actividad y contingencias profesionales de 0,3% que recoge el Real Decreto-ley 28/2018, de 28 de diciembre. Esto iba a a suponer un incremento de entre tres y 12 euros más al mes la cuota de autónomos.

Además. la revisión y actualización del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) también afectaría a los autónomos empleadores. Es decir, tendrían que asumir, aparte del aumento de la cuota, la subida de los costes salariales por tener trabajadores a su cargo. Aunque por el momento no se conoce cuál será la hoja de ruta de la Comisión Asesora del Ministerio de Trabajo y Economía Social sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), los expertos ya están advirtiendo de los perjuicios que la subida del SMI podría suponer para los autónomos.

Así, por ejemplo, el abogado laboralista del despacho AGM abogados, Luis San José, explicaba a Autónomos y Emprendedores hace unos meses que con una simple subida del SMI de 50 euros mensuales, los autónomos podrían llegar a pagar hasta 1.050 euros al año más por empleado.: "teniendo en cuenta que el pago de cotizaciones suele suponer, de media, un 33% de la nómina de los empleados, cualquier incremento afectará y mucho a los autónomos que se vean obligados a actualizar este suelo salarial" explicó San José. 

Menos empleo y menos contrataciones por el incremento del SMI

Para el Banco de España, la subida del SMI supuso una “caída del empleo en España que se debe, sobre todo, al hecho de que el menor crecimiento de contratos con salarios por debajo del nuevo SMI no ha sido compensado totalmente por una subida similar de contratos en referencias algo superiores al nuevo SMI”. Algo, que puede deberse a varias razones.

La primera, según el BdE, a la caída en la creación de puestos de trabajo: “el empleo pasó, según los registros de afiliados, de mostrar un crecimiento interanual del 3,1% en diciembre de 2018 al 1,8% de diciembre de 2019. Otros indicadores de empleo mostraron también una moderación en su ritmo de avance, aunque algo inferior a la observada en los registros de afiliados. En particular, en el caso de la Encuesta de Población Activa (EPA), el empleo se desaceleró desde un crecimiento del 3% a finales de 2018 hasta el 2,1% del cuarto trimestre de 2019. En cuanto a la Contabilidad Nacional Trimestral (CNTR), el empleo total creció un 2,1% en el último trimestre de 2019, 6 décimas por debajo del avance registrado un año antes” expone el informe sobre los diferentes indicadores nacionales que bajaron tras las obligación de un salario de 1.050 euros anuales en 2019.

Además, añaden que esta correlación negativa entre la evolución del empleo y la aprobación del SMI también se observa por CCAA y provincias: “utilizando la información disponible sobre la evolución de la afiliación por provincias y ramas, se encuentra de nuevo que la correlación negativa entre incidencia del SMI y evolución de la afiliación en 2019 es estadísticamente significativa.

Y segundo, la caída de los contratos inferiores al SMI a raíz del nuevo importe: "a partir de 1 de enero de 2019 se observa una caída brusca de los contratos con bases de cotización inferiores o iguales a 1.050 euros”.

Por último, desde el Banco de España señala que la evolución de ambos factores “no es perfecta porque el grupo de comparación también se podría ver afectado indirectamente por el cambio en el SMI, por ejemplo, por la vía del cese de actividad de empresas o el reajuste de las escalas salariales de las plantillas. Sin embargo, se esperaría que la relevancia a corto plazo de estos posibles efectos fuese menor”.