Los comerciantes de Teruel gritan "vida o muerte" contra la España vaciada

Los pequeños comerciantes de Teruel han puesto en marcha una campaña un tanto peculiar. En ella, sorteaban entre sus clientes un funeral gratis o un premio en metálico de 2.000 euros. La iniciativa ha sido bautizada como ‘Teruel a vida o muerte’. El objetivo era denunciar los problemas de la España Vaciada a los que se enfrentan 23 provincias, entre ellas Teruel.

Esta llamativa campaña de sensibilización ha sido “nuestra particular forma de sumarnos y dar visibilidad al paro de cinco minutos celebrado el pasado 4 de octubre en Teruel” explicó Rodolfo Pangua, gerente del Centro Comercial Abierto de Teruel (CCA), una agrupación de 125 negocios del Centro Histórico de la ciudad. Ese día, el comercio, la hostelería y los centros profesionales de la provincia aragonesa pararon para denunciar la desaparición acelerada de la población rural y la delicada situación por la que está pasando el sector del comercio. Además, piden “infraestructuras que fomenten el turismo y medidas que fijen población en nuestro territorio” explicaron fuentes de la asociación a través de un comunicado.

Con la puesta en marcha de ‘Teruel, a vida o muerte,  la agrupación de pequeños comercios de la provincia quería, por un lado, hacer referencia a la ‘muerte’ de muchas zonas rurales de la 'España vaciada' y, por otro, a la 'vida' de la gente y los comercios que aún resisten en los pueblos. El Gerente de CCA señaló que “somos conscientes de que hablar de muerte es una estrategia arriesgada en marketing, pero el objetivo no era aumentar las ventas sino denunciar la situación".

Por este motivo, la iniciativa ha durado a penas un mes: del 2 al 13 de octubre. Durante este periodo, los interesados en participar tenían que realizar una compra en alguno de los establecimientos miembros de la Asociación de Comerciantes, Profesionales y Hosteleros del Centro Histórico de la ciudad, utilizando la Tarjeta SOYDETERUEL o enviando la foto del tique por WhatsApp para confirmar la participación.

El ganador del sorteo tendría que elegir entre vida -dos cheques regalo, uno de ellos valorado en 2.000 euros para el ganador y otro para los padres del bebé que hubiera nacida el día 18 de diciembre, Día de Santa Esperanza-, o muerte -el pago de los gastos de un funeral, valorado en 3.000 euros, entre los que se incluyen el ataúd, las esquela, los elementos florales o los trámites administrativos-.

Al finalizar la campaña, fue el propio gerente de la asociación quien se hizo cargo de ponerse en contacto con el ganador del concurso. Cuando se le preguntó al afortunado, un turolense de 73 años, sobre la opción con la que se quedaba respondió, sin dudarlo: "vida, siempre vida".

Ha habido más iniciativas

Los pequeños comerciantes de Teruel llevan varios años luchando juntos y poniendo en marcha campañas para devolverle la vida al centro de la ciudad. El gerente de la agrupación recordó que una de las primeras iniciativas que hicieron y que llamó bastante la atención fue la de ‘Besos por Navidad’: “La realizamos en la campaña de Navidad de 2011, cuando estábamos en plenas crisis. Funcionó muy bien por que las compras en esa época del año se basan en las emociones”.

Según explicó el gerente, la campaña -que incluso salió publicada en la BBC- consistía en darles cheques regalos o vales descuentos a los clientes cuando se besasen entre ellos, o al propio comerciante. En otra, que también pusieron en marcha en Navidad, “instalamos máquinas de vending que funcionaban a la inversa, la gente introducía objetos para reciclar y obtenían un premio -euros verdes- que podían gastar en cualquier comercio de proximidad”. 

Aunque el gerente de CCA no pudo concretar en qué medida están repercutiendo las campañas en los pequeños negocios, “porque tenemos un sistema de economía colaborativa en las ventas, sí creemos que están teniendo un impacto muy positivo”. Las tarjetas SOYDETERUEL, que usan los habitantes para obtener descuentos en comercios de proximidad tuvieron gran éxito. Ya cuentan con ella 24.470 personas, “teniendo Teruel alrededor de 35.000 habitantes”.

Reconversión y un marco regulatorio justo

Por más que los comerciantes de la zona hagan iniciativas, no se podrá evitar el cierre de negocios si no se actúa "en la reconversión y en la puesta en marcha de un marco regulatorio justo. Parte de la culpa la tenemos nosotros -los comercios- , que no nos hemos adaptado a las demandas del consumidor. Por eso, es el momento de realizar una reconversión tecnológica” explicó Rodolfo Pangua.

Y para poder llevar a cabo dicha reconversión, es fundamental la “creación de un maco regulatorio justo. Porque nosotros, que cumplimos con todas nuestras obligaciones en España, no estamos compitiendo en igualdad de condiciones con aquellos que lo hacen en otros países, como Luxemburgo” concluyó el gerente de CCA.