Todo ordenado y bien atado.

Cinco consejos para que los autónomos liberen de cargas a sus futuros herederos

El Día de todos los Santos es un buen momento para que todos, y también los autónomos, reflexionen sobre qué va a pasar cuando falten. Es importante que nuestros herederos se encuentren con las cosas ordenadas y bien atadas.
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Día de todos los Santos
Cinco consejos para que los autónomos liberen de cargas a sus futuros herederos

Alrededor de 150.000 personas mueren cada día en todo el mundo. De hecho, lo único cierto y de lo que podemos estar todos completamente seguros es de que, un día u otro, falleceremos. La muerte es algo que no se puede evitar. Sin embargo, a veces los problemas no son para el que se va sino para los que se quedan, para los familiares y herederos. Los autónomos que tienen bienes particulares y también un negocios -a veces compartido con socios- deberían evitar, en la medida de lo posible, que sus allegados tengan problemas cuando toca marcharse..

Si hay alguno que aún no lo sabe, morirse cuesta dinero. Y no es poco. El precio medio de un entierro en España asciende a 3.739 euros (sin contar con la sepultura) y el de una incineración, a 3.617 euros, según advierte en un reciente informe la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Y esto en el caso de tener un funeral 'básico', sin ningún tipo de lujo.  Si se opta por complementar los servicios con otros extras, la cuantía puede dispararse hasta los 10.000 euros, según un estudio de MAPFRE.

En el Día de todos los Santos, recordamos a aquellos familiares y amigos que ya no están con nosotros. Pero también, es un buen momento para pensar en cómo queremos dejar las cosas cuando ya no estemos. Un hecho que evitará que las personas que nos han acompañado a lo largo de nuestra vida, tengan que lidiar con trámites,  gestiones burocráticas y precios muy altos en un momento de tanto dolor.  Lógicamente, estos consejos van dirigidos a cualquier persona, pero especialmente a los autónomos que, además, están al frente de un negocio que habría que heredar, traspasar o liquidar, con todo lo que ello supone a nivel de papeleo, y lidiando en algunas ocasiones con socios, proveedores y clientes. 

Cinco recomendaciones para no dejar cargas a familiares al fallecer

  • 1. Tratar la muerte como algo que va a pasar 

A diferencia de lo que ocurre en muchos lugares del mundo, en España -y en general en occidente-, de entre todos los temas tabúes, la muerte es uno de los que más evitamos hablar. Preferimos obviar el asunto hasta que no tenemos más remedio que hacer frente a la realidad. Sin embargo, naturalizar este tema es el primer paso para empezar a organizar el momento ineludible del fallecimiento y, por extensión, solucionar la vida todo lo posible a los familiares y allegados  

Recuerda: tú también vas a morir, y todos vamos a morir. Es un proceso que forma parte de la vida. Por ello, cuanto antes empecemos a normalizarlo, antes podremos encajar la muerte de un ser querido cuando esto suceda y antes podemos tomar cartas en el asunto para que el momento resulte más llevadero, a nivel económico, administrativo y, por supuesto, emocional. 

De hecho, poder organizarlo todo con tiempo, te permitirá morir como tú sólo has decidido. Además, le facilitarás los trámites a los tuyos. Por eso, comenta con tus familiares y amigos cómo quieres que sea todo. Dónde quieres reposar o cómo quieres que sea tu funeral son dos de las cuestiones a tratar que tendrás que ser capaz de hacer frente con toda la naturalidad posible.

  • 2. Contratar un seguro de decesos 

Éste, posiblemente, sea uno de los consejos más sencillos y baratos de llevar a cabo para los autónomos y que, sin embargo, puede marcar la diferencia para sus familiares en un momento tan duro como es el fallecimiento de un ser querido. Contratar un seguro de decesos evitaría que tus familiares tengan que hacerse cargo de los costes relacionados con tu fallecimiento y les facilitarías mucho las cosas. Actualmente, es el segundo seguro más contratado después del seguro del automóvil.

Según un estudio realizado por UNESPA (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras), el año 2020 se cerró con una cifra de 22 millones de españoles que cuentan con una póliza de decesos. Lo que supone un 46,6% de la población española. 

Este porcentaje ha ido creciendo en los últimos años motivado por los elevados costes que hay que hacer frente ante una defunción. Además de las circunstancias económicas de las familias y la necesidad de contar con una mayor tranquilidad al saber que la persona asegurada tendrá unas coberturas que evitará gastos a sus familiares.

Un seguro de decesos no sólo cubrirá todos los gastos relacionados con el sepelio. Hay muchas más ventajas por las que deberías de contratarlo. Entre sus servicios, estarán incluido el tanatorio, el féretro, la incineración o el entierro, entre otros. Sin embargo, tus familiares también podrán contar con ayuda psicológica cuando no estés. Pero no sólo eso, también ahorrarán tiempo y dinero al no tener que hacer frente a todos los trámites y gestiones. Así, se centrarán en lo que realmente importa ese día. 

Para que puedas elegir el mejor seguro de fallecimiento para ti, lo ideal es utilizar un comparador de seguro de decesos y tan solo con  rellenar su formulario, encontrarás las mejores opciones adaptadas a tu perfil y podrás conocer de primera mano los precios de las aseguradoras que ofrecen este tipo de seguros. En la mayoría de los casos, las cuotas son muy reducidas.

  • 3 . Haz testamento 

El testamento es el único documento legal en el que se manifiesta el destino de nuestros bienes y patrimonio cuando no estemos. No hacerlo, puede traer diversos problemas y quebraderos de cabeza a tus familiares. Si esto es importante para cualquier persona, todavía más para los autónomos, ya que hay un negocio de por medio que hay que saber quién se quedará o quién se encargará de vender o traspasar. Además, tampoco hay que perder de vista la posibilidad de tener socios, en cuyo caso la cosa todavía se complica más para estas gestiones, con el añadido de que puede haber una cuenta conjunta de empresa de la que pasaría a hacerse cargo el socio.

En caso de que no haya testamento, será la ley la que designe a los herederos.  Para ello se tendrá en cuenta un orden de parentesco en el que primero están los hijos y posteriormente los cónyuges o pareja de hecho si tuvieses. El testamento se puede hacer en cualquiera notaría. Es un proceso muy sencillo que no requiere de altos costes -suelen rondar los 50 euros-. Además, evitarás conflictos y más gastos entre tus familiares. 

  • 4. Ten siempre todos tus documentos importantes ordenados y en un lugar concreto 

Cuando sufrimos la pérdida de un familiar o un amigo, entramos en un momento de shock. Unido a eso, llega el momento de tener que hacer frente a trámites, revisar los seguros de vida, las escrituras de la casa, del local, del negocio, las últimas voluntades. Es decir, todos los documentos personales de la persona fallecida. 

Para facilitarle la tarea de búsqueda de todos esos documentos a tus familiares, es importante que comiences a recopilar toda la información esencial. Puedes optar por guardarla en carpetas, cajas fuertes o de forma virtual. A poder ser, todo en un mismo lugar. Esta labor permitiría a tus familiares ahorrar sobre todo tiempo en medio de una situación tan dolorosa como es el fallecimiento de un ser querido.

Asegúrate de incluir todos los contratos, las pólizas de seguros de vida o decesos, las escrituras públicas, los papeles de la empresa, los planes de pensiones, la copia del testamento y, por supuesto, las claves de los ordenadores donde puede haber documentación importantes como de las cuentas bancarias,  tanto las personales como del negocio. Cuando uno fallece ya no es posible decirle a nadie el PIN de la tarjeta de crédito. Por lo que no olvides comentarle a quién consideres de confianza cómo acceder a todos estos datos para que no tenga problemas en encontrarlos una vez que no estés. Además, deja especificado todos aquellos detalles que pienses que son relevantes e importantes.  

  • 5. Identidad digital 

Cuando morimos, dejamos un sinfín de datos de forma virtual a través de internet. Nuestros perfiles en redes sociales, o las cuentas en diferentes páginas webs. Según un estudio realizado por la Universidad de Oxford, Facebook contará en 2070 con más usuarios fallecidos que vivos. 

Para evitar que esto suceda, es importante que dejes instrucciones sobre qué hacer con tus redes sociales cuando fallezcas. Además, viendo la importancia del asunto, muchas compañías de seguros de decesos ya incluyen entre sus coberturas el borrado de la vida digital para evitar que sigamos teniendo presencia en la red.

Pero no sólo eso, es importante que los autónomos dejen las claves de acceso a la nube, donde cada vez es más habitual que se encuentren los datos más importante de la empresa, como pueden ser los balances y otras informaciones relevantes.