Los cooperativistas de Factoo en manos del administrador concursal
La cooperativa de trabajo asociado Factoo ha presentado concurso de acreedores por una deuda con Hacienda y Seguridad Social de más de un millón de euros. Fuentes jurídicas consultadas explican que es el administrador concursal quien decidirá cómo, a quién y en qué cantidades se abonarán las facturas pendientes a los autónomos asociados, teniendo prioridad los pagos a la Administración.
Fidelis Factú, más conocida como Factoo, la cooperativa de trabajo asociado, que se anunciaba en las calles de las grandes ciudades como una alternativa para facturar sin necesidad de darse de alta en el Régimen de Autónomos, se declaró el pasado viernes en concurso voluntario de acreedores para, en palabras de fuentes internas de la cooperativa, “garantizar la viabilidad de la empresa y el pago de las facturas pendientes a los asociados”.
Sin embargo, según fuentes jurídicas consultadas por Autónomos y Emprendedor, no está tan claro cuándo cobrarán las facturas su miles de sus asociados. “Desde el momento en el que se declara el concurso de acreedores la decisión de cómo, a quién y en qué cantidades se abonan queda en manos del administrador concursal primero y del juez concursal después”. Además, la Ley concursal establece que los primeros pagos que se tendrán que realizar son los correspondientes a los llamados créditos a la masa, es decir, obligaciones contraídas con las Administraciones Públicas y pago de salarios. Precisamente es la deuda de más de un millón de euros con Hacienda y Seguridad Social la que ha motivado la entrada en concurso de acreedores de Factoo, tal y como ha reconocido la compañía. Asimismo, “las cantidades adeudadas a los asociados no pueden considerarse como salarios, ya que los asociados son autónomos”.
A lo anterior se añade otra barrera, quizá la más compleja que habrán de superar los afectados de Factoo. “Si una actividad es ilegal no es viable”, sentencian las citadas fuentes judiciales. Hace casi un año, la Inspección de Trabajo emitió un informe en el que probaban presuntas “conductas infractoras” que llevó al Ministerio de Empleo a descalificar a Fidelis Factu, por el “uso irregular” y fraudulento tanto de la figura de la cooperativa como del autónomo, que una vez abonados los 60 euros de cuota de entrada, pasaba a formar parte de un listado de socios simulados que en apenas dos años superó los 11.000 registros. Los autónomos han sido obligados a regularizar sus cuotas ya a abonar una sanción de 600 euros por cada mes que hubieran facturado sin estar dados de alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos).
Cabe destacar que, según informó el diario digital El Confidencial, a finales del mes de junio Escrivá presentó una demanda de conciliación previa una querella por prevaricación, revelación de secretos e injurias contra las dos Inspectoras de Trabajo responsables de la investigación de la cooperativa. El empresario solicitaba una indemnización de seis millones de euros “por daños y perjuicios y gastos ocasionados a los actores”.
En cuanto a la posición de los cooperativista, desde la Asociación de Afectados por las Cooperativas han manifestado a este medio que “estamos estudiando el tema con nuestros abogados y por el momento no vamos a hacer ninguna declaración”.
Culpan a la administración
Factoo achaca a la Administración haberles obligado a llegar a esta situación. Aunque, “hemos estado durante muchos meses adelantando los pagos de IVA y Seguridad Social. Se da la paradoja de que muchos de nuestros asociados trabajan para la Administración. Si ellos no cumplen nosotros no cobramos y, por tanto, no podemos ni abonar las cuotas de Seguridad Social, ni el IVA, ni pagar el importe de las facturas a nuestros asociados”, explica la empresa. En Factoo se insiste además en que “se ha intentado negociar tanto con Hacienda como con Seguridad Social. Hemos planteado un plan de plazos de pago, avales… Y se nos ha denegado”.
