Más de un 30% se lo está planteando

Si la economía no mejora en otoño muchos autónomos tendrán que despedir

Los autónomos con empleados a su cargo se muestran preocupados por la situación actual. Según el último barómetro de ATA,  si la economía no mejora de aquí a unos meses, serían más del 30% los que tendrían que despedir trabajadores..
Si la economía no mejora en otoño muchos autónomos tendrán que despedir

Los autónomos llevan más de cuatro meses soportando la peor parte de la crisis económica a raíz del COVID-19. Nada más decretarse el estado de alarma, los trabajadores por cuenta propia y pequeños empresarios tuvieron que tomar decisiones a contrarreloj, ya que para muchos una semana soportando todos los gastos de su negocio sin ningún tipo de ingresos podría haber supuesto el cierre definitivo. 

Los ERTE, el cese de actividad extraordinario u otras medidas implementadas por el Gobierno fueron un parche para cientos de miles de autónomos que o bien tuvieron que cerrar su negocio o bien tuvieron que aguantar con la actividad bajo mínimos. Ahora, después de haberse levantado el estado de alarma, los expertos ya empiezan a hacer sus previsiones y alertan que, en todo caso, el comienzo de la recuperación no llegará hasta 2021.

En el mejor de los escenarios, en el primer trimestre del año que viene, se empezarían a ver algunos brotes verdes. No obstante, muchos autónomos quizás no puedan aguantar tanto tiempo. Según el último barómetro de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), muchos autónomos ya han tenido que despedir a alguno de sus trabajadores y, posiblemente, otros tantos tengan que hacerlo si la economía no empieza a remontar en otoño.

Cerca de medio millón de autónomos españoles tienen empleados a su cargo. La parte más importante de los gastos de estos negocios son los salarios y las cotizaciones de sus empleados. Por eso, el ERTE fue una herramienta muy útil para algunos. ATA destaca que el 53,2% de estos trabajadores por cuenta propia con empleados a su cargo se acogieron a un expediente por el 100% de su plantilla. 

Sin embargo, hay un 18,3% que ya ha tenido que despedir a alguno de sus trabajadores para poder seguir con su actividad en marcha. Si la situación no mejorara después de verano, las previsiones apuntan a que podrían ser muchos más.

Casi uno de cada tres autónomos no podría mantener su plantilla

La situación es especialmente delicada para el 70% de los autónomos encuestados por ATA que aseguran haber visto reducida, incluso muy reducida, su facturación. Por este motivo, si la economía no remonta en unos meses, es probable que muchos de los que tienen empleados a su cargo no puedan seguir asumiendo parte de estos costes laborales. 

Mientras que un 51,3%  de los encuestados en el barómetro de ATA afirman que mantendrán su plantilla en los próximos meses, nada menos que un 30,3%  asegura que dentro de sus previsiones estaría reducir la plantilla. Frente a ellos, sólo un 1,7% tiene previsto contratar. Si esto lo extrapolamos a los 500.000 autónomos que tienen empleados a su cargo, estaríamos hablando de 150.000 negocios que se plantearían algún despido este año En total hay 900.000 trabajadores asalariados a cargo de autónomos.

El número de despidos dependerá también de los ERTE

El Gobierno alcanzó un acuerdo con los agentes sociales para que los ERTE, que mantuvieron a flote a más de medio millón de empresas durante la crisis, se alarguen hasta el 30 de septiembre. Aunque quizás esta fecha no sea la definitiva. El Ejecutivo ya baraja una nueva prórroga de esta medida que le venían pidiendo desde distintos organizaciones de empresarios y autónomos y que podría ser clave para evitar despidos por parte del colectivo. 

Así lo aclaró la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en una entrevista concedida al periódico británico 'Financial Times', en la que aseguró que es probable que los ERTE se extiendan hasta finales de este año o incluso hasta 2021 para los sectores más afectados por la crisis del COVID-19, como son el turismo, la aviación, el ocio o la cultura. 

Se prolongarían si fuera necesario

La titular de Trabajo reconoció que, probablemente, muchas actividades relacionadas con estos sectores no se habrán recuperado para este año y necesitarán todavía de esta medida que permite al empleador dejar de pagar parte de las nóminas y cotizaciones a la Seguridad Social de sus trabajadores.  

La ministra volvió a incidir en el mismo asunto el pasado jueves durante  la presentación de la 'Memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España 2019' del Consejo Económico y Social (CES). En su intervención aseguró esta vez que "no hay que tener miedo" a prolongar estos mecanismos más allá de septiembre y durante el tiempo que sea "necesario", ya que "no tendría sentido dejar caer" los ERTEs, visto el "enorme esfuerzo" que se ha llevado a cabo para ponerlos en marcha.

"Lo digo con prudencia, en caso de que esta herramienta sea necesaria. Quiero dar un mensaje de tranquilidad". Para Díaz, es una cuestión de"sentido común" que los ERTE se extiendan para algunos sectores muy afectados. Entre ellos citó a los negocios de la cultura que, para la ministra, están pasando por muy malos momentos. 

La mayoría de autónomos no aguantaría un segundo confinamiento

Sin embargo, no son los únicos. La economía española depende casi por completo del turismo y, de momento, el flujo de turistas extranjeros y nacionales está siendo mucho menor de lo que sería en cualquier otro verano. Y su comportamiento puede ser peor si continúan los rebrotes del virus.  Por eso, cada vez se hace más intensa la preocupación por el mantenimiento de las actividades después de agosto. La situación actual y los nuevos rebrotes han sembrado dudas en muchos autónomos que aseguran que, si se pusieran de nuevo en marcha las restricciones de movilidad, tendrían que cerrar definitivamente su negocio (el 17%)

Por otro lado, un 38,2% de los autónomos encuestados advierte que, en caso de un segundo confinamiento, se vería obligado a reducir su plantilla para poder así continuar con el negocio. Tan sólo el 11,2% ha respondido que podría seguir desarrollando su actividad sin que le afectaran dichas restricciones.

“Los autónomos se muestran muy preocupados ante la posibilidad de un nuevo confinamiento. Podría ser la puntilla para ese 70% de trabajadores que advierte que no lo soportará”, advirtió Lorenzo Amor, presidente de ATA. “El impacto que causaría en el consumo y en la actividad sería prácticamente irrecuperable”, añadió.