Quejas porque la empresa quiere socializar sus pérdidas

Glovo recorta la tarifa que paga a sus repartidores en plena crisis del COVID-19

Glovo ha bajado a la mitad la tarifa fija que paga a sus repartidores por cada pedido. A cambio, la empresa asegura que los riders cobrarán más por kilómetro cuando hagan largos recorridos. Para las asociaciones y sindicatos, Glovo  pretende que estos trabajadores, que aún no está claro si son autónomos, asuman las pérdidas de la empresa durante la crisis del COVID-19".
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Glovo recorta la tarifa que paga a sus repartidores en plena crisis del COVID-19

El Estado de Alarma ha obligado a miles de empresas y autónomos a paralizar su actividad. Otras, sin embargo, por su consideración de "esenciales" han podido continuar en marcha con relativa normalidad. Es el caso de las plataformas de reparto como Deliveroo, Uber eats o Glovo. Ésta última ha sido protagonista en los últimos días de varias denuncias por haber reducido en pleno Estado de Alarma la tarifa fija que cobran sus repartidores, a los que considera autónomos, por cada uno de los repartos. El recorte ha sido de 2,5 a 1,25 euros en la mayoría de ciudades españolas. En algunas, como Vitoria, la reducción es, incluso, mayor.  

Al parecer, todo se debe a una reestructuración de los pagos que, según la propia compañía, ya estaba planeada desde antes que empezara la crisis por el COVID-19. Glovo paga a sus riders por varios conceptos, algunos fijos y otros variables -como el kilometraje o la espera en el restaurante-. Con el nuevo modelo que la plataforma de reparto ha implementado en unas 25 ciudades españolas, se pretende reducir la tarifa fija, es decir, lo que cobra el repartidor por cada pedido independientemente del trayecto y, a cambio, compensar dicha reducción con subidas en las tarifas variables por kilometro y bonificaciones.  

Bajada de la tarifa fija y aumento de la variable

Según denunció el sindicato 'Riders por derechos' a través de sus redes, el nuevo modelo que ha puesto en marcha la plataforma se basa en sustituir parte de las tarifas fijas por promociones, bonificaciones efímeras- a raíz del COVID-19- y un mayor precio por distancia en los pedidos que sobrepasen los 6,5 kilometros . Esto, para la asociación de ciclomensajeros, es una pérdida de derechos para los repartidores que se verán obligados a recorrer mayores distancias a cambio de los mismos ingresos o, en ocasiones, incluso menos.  

Imagen sobre la reestructuración de pagos de Glovo elaborada por el sindicato 'Riders por derechos' 

En la imagen se puede apreciar cómo el nuevo modelo prevé un mayor margen en las tarifas variables en detrimento de las fijas. Esto, para sindicatos como UGT o Free for Riders acabará pasándole factura a los repartidores, que van a trabajar con condiciones "todavía más precarias que antes. Se van a ver obligados a hacer pedidos de muchos kilómetros para poder compensar la reducción de la tarifa fija. Ésta es una más de las estrategias de Glovo para seguir recortando gastos y socializando sus pérdidas, en este caso, ocasionadas por la crisis del COVID-19" explicó Ruben Ranz, coordinador del sindicato UGT. 

Según explicó el coordinador, que ha estado presente en varios de los macrojuicios por supuestos de laboralidad encubierta contra la plataforma de repartos, "la empresa ha justificado la bajada como un simple cambio en la ecuación del pago. El problema es que esta modificación recae directamente en el trabajador, que pasará a cobrar menos de base por cada reparto y tendrá que hacer un mayor número de kilómetros para poder recuperar esa pérdida en la tarifa fija. Es una más de las decisiones unilaterales que toma la empresa, sin negociar previamente con los repartidores". 

Desde Free Riders, sindicato del sector de repartidores, comparten la postura de UGT. Para el portavoz y abogado de la asociación de ciclomensajeros, Roberto Castro, esta bajada de las tarifas es "una maniobra premeditada para ahorrar costes precarizando todavía más el trabajo de los repartidores. Si ya de por sí el rider cobraba poco por su trabajo, con esta bajada, se reducen todavía más sus ingresos y su seguridad financiera. No es casual que se haya hecho semejante reducción en pleno Estado de Alarma, cuando la mayoría de estos autónomos no tienen ningún margen de maniobra para cambiar de trabajo u organizarse para una huelga. Como siempre, los riders tendrán que aceptar las condiciones impuestas de forma unilateral por Glovo. De hecho, la unilateralidad con la que se ha llevado a cabo este cambio es un indicio más de laboralidad que nos recuerda que estos trabajadores, en realidad, no son autónomos sino asalariados".

Según Glovo, los riders no perderán ingresos

Postura muy diferente es la que ha mantenido durante los últimos días la propia plataforma de repartos. A través de un comunicado,  Glovo sostuvo que los cambios efectuados en el pago a sus riders no afectarán a los ingresos que perciben. Desde la plataforma han asegurado que, aunque se vaya a pagar menos tarifa fija por pedido, esto “no va a afectar a las ganancias por hora de los repartidores”. La compañía mantiene que la modificación tiene por objetivo “equilibrar los pagos entre pedidos de corta y larga distancia”. Según la compañía, con la nueva estructura, el resultado será que una parte del pago se reducirá mientras que la otra, la relacionada con los kilómetros, aumentará. 

De hecho, según declaró el cofundador de la compañía a la Agencia efe, "el nuevo modelo es lógico y está adaptado a las circunstancias de esta crisis. Ahora, las distancias son más largas en general, porque hay menos comercios abiertos. De esta forma, los repartidores se benefician en mayor medida por los pedidos más largos". Según Michaud, los ingresos de los repartidores no van a bajar porque lo único que se ha hecho es reducir la base fija para aumentar el resto de variables. Además, el cofundador añadió que Glovo está compensando el especial riesgo que corren sus trabajadores con un bono del 10% para agradecer su esfuerzo.

Bonificación que, para el coordinador de UGT no es suficiente. " Los pluses que ha anunciado Glovo pueden inducir a engaño. En primer lugar porque no ha especificado cómo y cuándo se abonarán estas bonificaciones. Pero, aunque fuera cierto y los repartidores pasaran a cobrar más durante esta crisis, no hay que perder de vista que estos bonos son efímeros, están vinculados a una situación pasajera. Cuando toda esta crisis acabe, el 10% de bonificación se irá, y con lo único que se quedarán los repartidores es con menos ingresos y peores condiciones de las que tenían antes de la crisis"

Si algo tienen claro las asociaciones y sindicatos representativos del sector es que el modelo es, en realidad, "una estrategia de Glovo para seguir adelante con un negocio que sólo reporta beneficios a la propia plataforma, y que recorta derechos a los trabajadores que, a pesar de ser asalariados, cotizan como autónomos y deben asumir ellos mismos los costes sociales que debería pagar la empresa de reparto". 

De momento, las nuevas tarifas ya se están aplicando en una 25 ciudades españolas. La última ha sido Madrid, dónde unos 50 repartidores se concentraron enfrente de las oficinas de Glovo para denunciar los recortes de la empresa en sus tarifas. Según el sindicato Free riders, Sevilla fue de las primeras en las que se redujo el pago de 2,5 a 1,25 euros por pedido, "aunque nos han llegado quejas de repartidores de Vitoria cuya tarifa ha bajado hasta el euro. Consideramos que la estrategia de Glovo es una encerrona. Por más que denunciemos, todo va a quedar paralizado por el Estado de Alarma. No es casual que se haya implementado justo ahora, en plena crisis por el coronavirus, cuando la justicia está paralizada y a los repartidores no les queda otra que seguir trabajando. O eso, o perder su única fuente de ingresos". 

Repartidores desprotegidos ante el virus

Los sindicatos y repartidores denuncian la situación límite que están viviendo estos trabajadores durante la crisis del COVID-19. "A pesar de ser considerados esenciales, no se les ha dado ninguna herramienta o utensilio para protegerse, más allá de guantes que les duran apenas un trayecto. Tampoco se les ha recompensado ni reconocido el trabajo que están haciendo. Al contrario, Glovo les ha dado una bonificación del 10%, para agradecer su trabajo, mientras les reducía a la mitad la tarifa fija" denunció Rubén Ranz. 

Desde la entrada en vigor del Estado de Alarma, el reparto a domicilio fue considerado un servicio esencial, y los repartidores trabajadores esenciales. Consideración que, para el sindicato Free x Riders, "es muy discutible. No queremos entrar demasiado en este tema porque si no se les considerara esenciales, estos trabajadores se quedarían sin ingresos pero, honestamente, dudamos de que éste sea un servicio esencial. Desde Glovo han justificado que sus repartos pueden ser útiles porque no sólo van de restaurantes a domicilios, sino también de farmacias a domicilios o incluso de domicilios a domicilios. Pero, lo cierto es que la gran mayoría de pedidos que llevan los repartidores son de comida rápida". 

Desde los sindicatos han interpuesto varias denuncias a la plataforma y han solicitado que se tomen medidas para proteger la salud de estos repartidores, que están en constante movimiento, a los que les es muy difícil guardar las distancias de seguridad y están especialmente expuestos al virus. 

Concretamente, desde Free Riders denunciaron ayer mismo ante la Inspección de Trabajo que "Glovo no provee a sus riders de EPIs, ni de formación específica en Protección de Riesgos Laborales durante el Estado de Alarma, y ello constituye un grave atentado contra el derecho a la seguridad y a la salud de los repartidores de plataformas digitales que se ven obligados a trabajar estos días de confinamiento en toda España".  Además, piden que Glovo rectifique y devuelva a los repartidores las tarifas anteriores que, "ya de por sí eran muy bajas" añadió el portavoz del sindicato.

La reducción de las tarifas fijas por reparto ha venido en un momento especialmente delicado para estos autónomos -reconocidos como asalariados por varios tribunales-  que se ven obligados a trabajar porque se encuentran desamparados en cualquiera de sus dos condiciones: aunque se les reconociera como asalariados, no podrían cobrar el paro porque Glovo no ha hecho ERTE, tampoco pueden acceder como autónomos al Cese de actividad extraordinario , porque no tienen pérdidas que acreditar ni la plataforma -que es la única empresa para la que trabajan- ha cesado su actividad. 

Ni paro ni prestación por Cese de Actividad

El Gobierno puso en marcha una prestación por Cese de actividad extraordinario para que los autónomos afectados por la crisis del COVID-19 pudieran recibir un 70% de su base reguladora mientras dure el Estado de Alarma. Sin embargo, para acceder a esta prestación, el autónomo debe tener un actividad que se encuentre entre las suspendidas por decreto o registrar pérdidas iguales o superiores al 75%.

El problema es que "estos autónomos ni son autónomos ni están reconocidos como trabajadores. Por supuesto, Glovo no tiene necesidad de hacer ERTE porque no cotiza por sus empleados pero es que, además, como su  actividad ha sido reconocida como esencial, tampoco ha registrado demasiadas pérdidas. Al menos, no las suficientes para que baje un 75% su volumen de trabajo" apuntó el coordinador de UGT.

Por tanto, los autónomos que trabajan para Glovo se ven en una situación muy complicada. Sumada a su habitual desprotección y precariedad "ahora, ingresan menos porque tienen algunos pedidos menos, también ingresan menos porque se les ha  reducido la tarifa fija y, por si todo esto fuera poco, no pueden dejar de trabajar y acogerse a la prestación extraordinaria porque la única empresa para la que trabajan sigue pidiéndoles un determinado volumen de trabajo".  

Para los sindicatos, el problema sigue siendo el mismo de siempre. La relación entre Glovo y sus repartidores es, supuestamente, comercial y no laboral, por tanto, "la empresa puede ahorrar costes mientras impone las condiciones que considere oportunas porque el autónomo es libre de aceptarlas o no. Sin embargo, esto no es así. Ni estos autónomos son autónomos, ni tienen libertad para decidir sus horarios, ni ponen ellos los precios de su hora de trabajo. Volvemos al problema de siempre, la impunidad de Glovo se debe a la relación que tiene con sus repartidores. Pero estamos cada vez más cerca de que se reconozca la laboralidad de los riders" explicó Rubén Ranz

Cada vez más cerca de reconocerse como asalariados

El debate de si son falsos autónomos o no los riders de Glovo está cada vez más cerca de acabar. La última sentencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), estableció que los ‘riders’ de Glovo son falsos autónomos. En la sentencia, aparte de reconocerse la relación laboral del demandando con la plataforma, el Pleno de la Sala, compuesto por 17 magistrados, unificó criterio con respecto a los riders de Glovo y les reconoció como trabajadores por cuenta ajena. 

Una decisión que, para el abogado laboralista, Alberto Ara, tiene importantes consecuencias jurídicas. "Las futuras sentencias que emitan los juzgados de Madrid, tanto las que salgan del TSJM, como las que se produzcan en primera instancia, establecerán que los riders de Glovo son falsos autónomos. Todo, porque en este último fallo, los 17 magistrados que componen la Sala han estudiado el caso y han establecido un criterio “que tiene efectos jurídicos”.

A esta sentencia, se le unen otras como la del Tribunal superior de Asturias, entre otras. Para el coordinador de UGT, todas ellas, "hacen que se vea cada vez más cerca el final". Todo acabaría con una unificación de doctrina por parte del Supremo. Aunque todavía llevará su tiempo. “Desde que se presenta el recurso de casación, hasta que el Tribunal Supremo emite jurisprudencia suelen pasar, normalmente, entre 8 y 9 meses”. De momento, la sentencia ya está a las puertas del supremo y, para ambos sindicatos, el problema está cada vez más cerca de terminar. "Tarde o temprano, los repartidores de estas plataformas cotizarán en el Régimen General, y estarán protegidos por el Estatuto del Trabajador" concluyó el coordinador de UGT.