Distintos sectores reclaman la medida

Nuevo clamor entre los autónomos para que el cese de actividad dure hasta 2021

El 30 de septiembre terminará el cese de actividad. Los autónomos de sectores especialmente perjudicados por la crisis, como hosteleros, comerciantes, taxistas o agentes comerciales, vuelven a lanzar una petición al Gobierno para que extienda la prestación, al menos, hasta diciembre, con las mismas condiciones que hubo durante el estado de alarma. 
Nuevo clamor entre los autónomos para que el cese de actividad dure hasta 2021

El verano no ha sido suficiente para recuperar la actividad de los miles de autónomos que ya se encontraban en junio en la cuerda floja. De hecho, a estas alturas, casi 300.000 no han podido subir la persiana todavía.  Ahora, de cara al otoño, el colectivo teme volver a la situación anterior pero, esta vez, con una diferencia: ya no contarían con el cese de actividad extraordinario que les ayudó a mantenerse a flote durante la peor etapa de la pandemia. 

Por ello, vuelve a repetirse el clamor entre los autónomos que ya hubo durante los últimos días de junio para que se extendiera la prestación durante el verano. Los sectores especialmente afectados por la crisis, como hosteleros, comerciantes, agentes comerciales, o taxistas piden al Gobierno que alargue la prestación hasta 2021, con requisitos que permitan el acceso a todos aquellos que la necesiten.

El 30 de junio, el cese de actividad extraordinario llegó a su fin y las asociaciones alcanzaron un acuerdo con el Gobierno para que extendiera la prestación tres meses más, hasta el 30 de septiembre. Esta vez, la prestación ya no era extraordinaria, y la rigidez de los nuevos requisitos que se establecieron ha hecho que apenas 140.000 autónomos pudieran acceder a esta medida durante los meses de julio y agosto. 

Desde el próximo 30 de septiembre, los pocos que pudieron acogerse al nuevo cese de actividad también se quedarán sin prestación que les cubra. Tanto el Gobierno como algunas comunidades autónomas han impuesto restricciones más severas para algunos sectores a raíz de los rebrotes y miles de autónomos que ya se encuentran en una situación extraordinaria podrían necesitar volver a acogerse a la prestación extraordinaria. 

Por eso, Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), pidió la semana pasada al Gobierno que reestablezca el cese de actividad, con las mismas condiciones que durante el estado de alarma. "Ante los rebrotes, las nuevas restricciones sanitarias y una caída de actividad considerable entre muchos autónomos. No hay excusa para no impulsar nuevamente un cese de actividad extraordinario que ayude a todos los autónomos que están cotizando"

De momento, el Ejecutivo no ha dado señales de ir a extender la prestación a partir del mes de octubre. Es más, a escasos 27 días de que finalice la prestación, el Gobierno ni siquiera ha puesto fecha para sentarse a negociar con las asociaciones de autónomos la posibilidad de poner en marcha una prestación que cubra al colectivo o, en su defecto, alguna otra medida que impida que miles de autónomos acaben cerrando sus negocios. 

Los hosteleros necesitarán la prestación, al menos, hasta marzo

Bares, restaurantes y discotecas se encuentran entre los sectores más afectados por la crisis del coronavirus. Son alrededor de 300.000 autónomos al frente de un negocio de hostelería que, a pesar del verano, siguen con dificultades para recuperarse. Aunque muchos de estos locales están abiertos, las restricciones que puso en marcha recientemente el Gobierno hacen cada vez más complicado que continúen con su actividad. 

Es más, desde hace unas semanas, todos los bares de ocio nocturno de España se vieron obligados a bajar la persiana sin saber cuándo podrán volver a abrirla. Por este motivo, el sector en general y algunos subsectores -como las discotecas y pubs- en particular, ven imposible que este año se recuperen los niveles de facturación previos a la crisis. Especialmente en zonas costeras, donde los bares y restaurantes vivían fundamentalmente del turismo extranjero, que este año ha estado bajo mínimos. 

El 90% del sector de la hostelería está compuesto por pymes o micropymes, regentadas muchas veces por autónomos que accedieron a la prestación por Cese de Actividad porque se les obligó a cerrar. Ahora, tanto los que están abiertos como los que han tenido que volver a cerrar van a seguir necesitando de la prestación.

Hasta marzo y con los requisitos de la extraordinaria

Es más, desde el sector exigen que vuelva el cese de actividad con las condiciones que hubo durante el estado de alarma. "Prácticamente todos los hosteleros se acogieron a la prestación extraordinaria. Sin embargo, pocos lo han podido hacer durante los meses de verano porque la caída de facturación exigida es muy alta. Los bares están perdiendo mucho dinero, pero un 75% de caída es un porcentaje muy elevado. Por eso, pedimos no sólo que se extienda más allá de septiembre el cese de actividad, sino que además se alargue hasta marzo y con los requisitos anteriores", explicó Emilio Gallego, secretario general de la Confederación Empresarial de Hostelería de España (CEHE)

Para Gallego, marzo sería el horizonte mínimo al que debería apuntar el Gobierno para la nueva prórroga, "porque no se atisba una solución a la pandemia ni a corto ni a medio plazo. Vamos a estar afectados por estas circunstancias durante muchos meses. Ojalá hubiera que cortar antes la prestación porque mejoraran las cosas y los hosteleros dejaran de necesitarla pero, lo cierto es que creemos que, al menos, hasta marzo, las actividades del sector hostelero van a necesitar de esta prestación para mantenerse a flote".  

La mayoría de beneficiarios serían pequeños negocios familiares

La decisión de extender la prestación más allá de septiembre no sólo es necesaria para los autónomos al frente de bares y restaurantes, sino también para los millones de trabajadores que dependen de estos negocios.  "El cese de actividad es vital para mantener nuestro tejido productivo. Sobretodo, en el caso de los pequeños establecimientos hosteleros, de carácter familiar, que son los que más se acogieron a la prestación y también los que más la van a seguir necesitando", comentó Emilio Gallego.

Además de que continúe la prestación más allá de septiembre, desde Hostelería de España también solicitan a los gobiernos autonómicos "que apoyen con medidas complementarias el mantenimiento de nuestra actividad que, ahora mismo, ya se encuentra en peligro, y la situación podría empeorar en otoño".  productivo vuelva a reactivarse. 

Para el secretario general de CEHE, es fundamental que el Gobierno concentre sus esfuerzos para poner en marcha ayudas a los CNAES 55 y 56 especialmente, donde están recogidos alojamientos turísticos y empresas de restauración como bares, restaurantes, discotecas o pubs. Especialmente, las ayudas deben ir dirigidas a estos últimos. El ocio nocturno va a necesitar mucho apoyo. "Por supuesto, necesitan ya de la prestación extraordinaria que se puso en marcha en marzo porque su situación en particular es exactamente la misma que durante el estado de alarma: cerrados y sin perspectivas de poder abrir", añadió Emilio Gallego.

Los taxistas piden recuperar el cese de actividad extraordinario

Durante el estado de alarma, el sector del taxi fue declarado como actividad esencial y los más de 65.000 autónomos que trabajan como taxistas pudieron seguir con su negocio en marcha, aunque con muchas limitaciones.

El decreto no impidió explícitamente a la población coger un taxi. Sin embargo, el confinamiento redujo drásticamente las carreras: los taxistas apenas pudieron hacer cuatro o cinco servicios al día a pesar de tener jornadas de hasta 12 horas de trabajo. Sin embargo, "a partir de la extensión de la prestación que se hizo en junio, la mayoría de taxistas no pudieron acceder al cese de actividad, que exige caídas del 75%. Nuestra facturación ha bajado mucho pero no tanto", explicó Miguel Ruano, presidente de la Federación Andaluza del Taxi (FAAT) y vicepresidente de la Federación Española del Taxi (FEDETAXI).

Desde luego, "en cualquier ciudad española la caída de la actividad ha sido superior al 50%. En algunos casos llegamos al 65%, pero no al 75%, por lo que muy pocos han podido acceder durante este verano a la prestación. A pesar de ello, el sector la necesita porque aún estamos desarrollando nuestra actividad en condiciones muy precarias. Más aún con las últimas medidas que se han aprobado y que han restringido la actividad de muchos sectores de los que dependemos", explicó Ruano. 

Es el caso de las restricciones al ocio nocturno. "Desde que se cerraron las discotecas, los taxistas han perdido la mayoría de sus carreras por la noche. Limitando la hostelería han limitado también al taxi. Por eso, necesitamos acceder a la prestación, con las mismas condiciones que la extraordinaria. Se tiene que extender el cese de actividad y tener en cuenta las especificidades del taxi para asegurar el acceso a los miles de autónomos que componen el sector", concluyó el presidente de FAAT. 

Los agentes comerciales piden una nueva prórroga y otras medidas 

Los agentes comerciales siguen encontrándose en una situación crítica debido a las especificidades de su sector. En su inmensa mayoría –el 80%- son autónomos. Sin embargo, su especial sistema de facturación les perjudicó y no les permitió acceder a las prestaciones que les corresponderían durante el estado de alarma, ya que no cumplían ninguna de las dos condiciones que el Gobierno pidió a los autónomos para acceder a la prestación: ni se decretó el cierre de su negocio, ni pudieron acreditar caídas superiores al 75%, porque durante estos meses todavía estaban percibiendo los pagos por comisiones de trabajos que realizaron mucho antes del estado de alarma.

Estos autónomos se encargan de promover, negociar o concretar las operaciones mercantiles en nombre y por cuenta de una o varias empresas a las que representan.  Dadas las particulares condiciones del colectivo, solicitaron al ministro de Inclusión y Seguridad Social poder acceder a las prestaciones que disfrutan el resto de los trabajadores autónomos de las que, la gran mayoría del colectivo,  ha quedado fueraSon uno de los sectores más golpeados por la crisis sanitaria del Covid-19 y ya pidieron modificaciones en  la prestación por Cese de Actividad extraordinario para poder acceder más allá del 30 de junio.

Ahora, tres meses después, siguen encontrándose en una situación similar. Por eso, el colectivo necesita "nuevas medidas decididas por parte de las administraciones ante el escenario que se abre. Entre estas medidas, debe contemplarse la prórroga de la prestación extraordinaria por cese o reducción de la actividad, así como bonificaciones a las cuotas de la Seguridad Social, hasta el 31 de diciembre", explicó Francisco Manuel Maestre Barrajón, presidente del Consejo General de Agentes Comerciales de España (CGAC).

Esta fecha fue la que pidieron desde la organización en la ronda de contactos institucionales que mantuvieron antes del verano para reclamar que las medidas de apoyo a los autónomos se prorrogaran y tuvieran en cuenta la especificidad de los Agentes Comerciales.

Debido a su sistema de facturación "por comisiones sobre los ingresos de períodos vencidos semestrales o anuales, buena parte de los integrantes de nuestro colectivo han empezado a sufrir una drástica bajada de ingresos cuando finalizó el estado de alarma o incluso mucho después", explicó Barrajón. 

Por ello y en la misma línea que en el mes de junio, desde el Consejo General solicitan una vez más ""medidas de apoyo hasta el 31 de diciembre que no dejen fuera a los profesionales de la venta. También que planteen de nuevo aplazamientos de los impuestos sin intereses y mecanismos de exención o bonificación en las cuotas de la Seguridad social", concluyó el presidente de CGAC. 

Algunos comerciantes seguirán necesitando acceder a la prestación

El comercio es una actividad compuesta por todo tipo de tiendas, desde electrodómesticos hasta alimentación o textil,  y se ha visto afectado de forma muy diferente a lo largo de esta crisis. Algunos negocios pudieron permanecer abiertos mientras otros tuvieron que bajar la persiana. En todo caso, el COVID-19 fue la puntilla para un sector que ya venía de una situación delicada, con grandes caídas en la facturación

Sin embargo, si los meses de estado de alarma ya fueron duros para el sector, "el verano ha sido catastrófico, especialmente en las zonas costeras. Miles de negocios han tenido que cerrar en islas como Ibiza o Mallorca y muchos también en los centros de grandes ciudades como Madrid o Barcelona, ya que viven también del turismo extranjero. Ya preveíamos que el 20% de los pequeños comercios iban a cerrar, y hay zonas en las que este porcentaje se ha visto muy incrementado", explicó Carlos Moreno, portavoz de la Confederación Española del Comercio (CEC). 

Para el portavoz de la CEC, "es difícil generalizar con un sector tan heterogéneo como el del comercio, porque las necesidades son muy diferentes en función de la provincia en la que se encuentre la tienda, o a la actividad concreta a la que se dedique. Lo que sí está claro es que cualquier comercio situado, por ejemplo, en un paseo marítimo va a necesitar acceder a esta prestación, al menos, hasta final de año". 

Según aseguró Moreno, "un comerciante no quiere cerrar y cobrar una subvención, ni quiere facturar menos que el año anterior. Lo que queremos es que todos nuestros clientes vuelvan a la tienda, y facturar lo máximo posible, no cobrar una prestación por bajada de ingresos o cierre del local. Pero, si se nos obliga, por uno u otro motivo, a cerrar la persiana o a aguantar con ingresos tan bajos, lo mínimo que se nos puede ofrecer es una prestación para hacer frente a los gastos". 

Sin embargo, para la CEC el cese de actividad no será suficiente para salvar un sector que ya estaba en crisis antes de decretarse el Estado de Alarma. "Los comerciantes no quieren depender de prestaciones. En un punto extremo, son necesarias porque, de lo contrario,estos autónomos se verán obligados a cerrar. Pero lo que de verdad necesitamos es un plan de reactivación al completo para el sector, que recoja las medidas que ya propusimos el 15 de marzo, y que seguimos proponiendo a día de hoy. De lo contrario, es probable que alrededor de un tercio de los comercios cierre definitivamente. Haya o no prestación por Cese de Actividad para ellos", afirmó Carlos Moreno.