El comercio minorista creció un 3,6% en septiembre

Los pequeños comerciantes se preparan con resignación para el Black Friday

Las buenas cifras para el comercio minorista llegan en mal momento. Ahora, los comerciantes se preparan con resignación para el Black Friday, una campaña sin rentabilidad para muchos.

 

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Los pequeños comerciantes se preparan con resignación para el Black Friday

La compra de material al inicio de la temporada escolar y la llegada del frío le ha venido bien al sector del comercio. En especial, a lo minoristas, que registraron en septiembre un crecimiento del 3,6% respecto al mismo mes del año anterior. En concreto, los negocios con un solo local tuvieron un aumento interanual del 2,3%, frente al crecimiento de pequeñas cadenas (un 6,5% más); grandes cadenas y superficies (un 5,1 y un 3% respectivamente), según los últimos datos recogidos por la Confederación Española del Comercio (CEC). 

Sin embargo, desde la CEC añadieron que los datos no llegan en buen momento. El 40% de los pequeños comerciantes se preparan "con resignación" para unirse a los descuentos del Black Friday, campaña a la que muchos entran obligados y de la que, "en pocos casos sacan rentabilidad" aseguró la CEC en su comunicado.

Según explicaron desde la Confederación, la campaña del 'viernes negro' provoca una división entre los pequeños y medianos comerciantes. Ésta, se ha convertido en los últimos cinco años en una fecha marcada en el calendario de muchos clientes, y ha conseguido "trastocar, no sólo las campañas de Navidad y Rebajas -las más importantes del año para las ventas de cualquier comercio tradicional- , sino también la dinámica de consumo durante todo el año".

Los pequeños y medianos comerciantes afrontan "resignados una ‘maratón’ de descuentos impuesta por Internet y otros formatos comerciales, que comienza con el Black Friday y sigue con el CyberMonday, enlazando con una ya debilitada campaña de Navidad y Reyes y, culminando, con unas rebajas de invierno, ya lejanas a los resultados de hace unos años" denunciaron desde la Confederación.

Durante el año pasado, aproximadamente el 40% de los pequeños y medianos comerciantes se unieron "de una forma u otra al Black Friday", realizando algún tipo de descuento o promoción en sus negocios. Una cifra que se espera que sea similar este año.

Se unen a los descuentos para no quedarse 'descolgados'

Sin embargo, y a pesar de que serán varios los autónomos del sector que se animen a hacer los descuentos, la mayoría lo hará por obligación, por "no quedarse ‘descolgado’ frente a otros formatos". El presidente de la CEC, Pedro Campo, explicó que, a muchos, “no les queda más remedio. Se han dado cuenta de que, en caso contrario, pierden ventas de la campaña de Navidad”.

El Black Friday ha trasladado el gasto que los consumidores reservaban para los regalos navideños y las rebajas, adelantando en muchos casos sus compras a los descuentos del mes de noviembre. La presión en los márgenes que impone esta dinámica de descuentos permanentes es insostenible para el pequeño comercio, denunciaron desde la Confederación. E insistieron en que "este tipo de campañas, basadas exclusivamente en la reducción de precios, tienen cada vez menos sentido".

Por ello, aconsejaron, -a sabiendas de que "es imposible establecer estrategias comunes, ya que cada sector y gama de productos tiene un margen de beneficio y un entorno competitivo muy diferente-, a aquellos comerciantes que quieran unirse al Black Friday, que lo hagan con descuentos moderados, que no destrocen sus márgenes, y que se centren en poner en valor los beneficios del comercio de proximidad".