Según el IEF dependiente de Hacienda

Sólo el 14% de los españoles piensan que los autónomos son defraudadores

Sólo el 14% de los españoles considera que el colectivo en general, formado por más de 3,2 millones de trabajadores, “defrauda habitualmente” a Hacienda. Este porcentaje se elevaría hasta el 36% si la lupa se concentra en los profesionales liberales.

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Sólo el 14% de los españoles piensan que los autónomos son defraudadores

¿Con IVA o sin IVA? Esta mala práctica que, en muchos casos se ha convertido en un tópico y que tanto se ha usado para descalificar a los autónomos sobre su comportamiento fiscal, resulta que no está tan extendida entre la población española según una encuesta realizada por el Instituto de Estudios Fiscales (IEF) dependiente del Ministerio de Hacienda. Sólo el 14% de los españoles considera que el colectivo en general, formado por más de 3,2 millones de trabajadores, “defrauda habitualmente” a Hacienda.

Este porcentaje se elevaría hasta el 36% si la lupa se concentra en los profesionales liberales. La ciudadanía otorga a estas actividades como más propensas a engañar al Fisco. Así se recoge en el documento de trabajo Opiniones y actitudes fiscales de los españoles 2017 elaborado por el IEF.

El estudio -que se ha realizado a partir de 3.000 encuestas-, revela que siete de cada diez individuos cree que hay algunos colectivos para los que defraudar se ha convertido en algo tan habitual como salir a correr o ir al gimnasio. No obstante, a ojos de la opinión pública, los trabajadores por cuenta propia no son los que más intentan dar esquinazo al fisco. Encabeza la lista el estamento empresarial que, para el 74% de los encuestados, suelen algún tipo de fraude, seguido a distancia por los políticos (37%). Algo que se corresponde con “el malestar general del ciudadano español hacia los responsables financieros y políticos”, según se subraya en el informe.

El Instituto de Estudios Fiscales ha instado a los interesados a practicar la autocrítica y ha preguntado a los propios analizados. El 44% de los autónomos, incluyendo a comerciantes y profesionales, considera que son los empresarios los que más defraudan y, curiosamente, el 28% reconoce que son los mismos profesionales quienes no cumplen con todas sus obligaciones con Hacienda. Aunque, para los autónomos, los colectivos que con mayor frecuencia estarían rateando al fisco, serían los agricultores  (47%) y los "inactivos" (43%), es decir, las personas que no trabajan.

La clase empresarial, por su parte, se defiende y devuelve la pelota. Sólo el 54% entona el mea culpa. Para este colectivo quienes los españoles que no trabajan (75%), los asalariados (73%), los profesionales (73%) y los agricultores (72%) serían los líderes del fraude fiscal.  

Trampear para salir adelante

Es importante conocer a cuanto asciende el fraude fiscal en España. Según la cifras del Consejo General de Economistas (CGE), los defraudadores dejan de ingresar al Estado la friolera de 26.000 millones de euros al año. Esto supone una carga de 2.000 millones de euros por cada contribuyente.   

Volviendo a la encuesta del IEF, el documento destaca que una cuarta parte de los ciudadanos encuentra un argumento en determinadas circunstancias “que obligan”  a defraudar. Y lo que es aún más llamativo un 8% de ellos consideran “normal” evadir impuestos.

Con respecto a las causas que subyacen a estas prácticas que se desarrollan al margen de la legalidad, para seis de cada diez encuestados la razón que justifica que cometan este tipo de delitos es la impunidad de la que gozan aquellos que defraudan a Hacienda (especialmente las grandes fortunas). Siendo su principal efecto el que perjudican sobremanera la recaudación y, por ende, la financiación de servicios públicos y el pago de prestaciones sociales como las pensiones. A este respecto, los expertos explican que dicha afirmación se podría atribuir “más a las grandes fortunas y empresas, ya que son las que tienen más sencillo aplicar ingeniería fiscal en sus cuentas de resultados”. Prestidigitación tributaria que, paradójicamente, está respaldada por un 7,6% de los entrevistados porque, tal y como detalla el estudio, “las grandes empresas favorecen la inversión y la creación de empleo”.

No sería el caso para el 13,9% que afirman que una de las causas que subyacen al fraude es la necesidad de “trampear un poco” para poder mantener en pie los negocios y llegar a fin de mes. Es precisamente aquí donde, en opinión de dichos expertos, se podría encuadrar el presunto fraude de los autónomos y los profesionales.  Al igual que en el caso del 24% que apunta que la excesiva carga fiscal justifica que muchos opten por incumplir con sus obligaciones tributarias.

Economía sumergida

La economía sumergida en España representa un 20% del PIB (Producto Interior Bruto). En términos de coste para el Estado esto se traduce, según Funcas (Fundación de Cajas de Ahorro) en una pérdida de recaudación de 70.000 millones de euros. Precisamente éste es el tipo de fraude que, según el 37% de los encuestados, sería el que más daño estaría causando a la sociedad en su conjunto.     

No pagar el IVA o el Impuesto de Sociedades en su totalidad al comprar un bien o contratar un servicio serían el tercer y cuarto tipo de fraude respectivamente que mayor perjuicio causaría al estado de bienestar.

Por otra parte, y en relación a cómo minorar las ventajas fiscales que las grandes empresas tienen frente a los autónomos y las pymes en el Impuesto de Sociedades, sólo el 13,5% de los ciudadanos apuesta por una subida del mismo, siendo la lucha contra el fraude y el poner fin al dumping fiscal las opciones preferidas.