El 67% cree que los impagos crecerán en 2023

El 82% de los negocios afirman que sus clientes les solicitan alargar los plazos de pago de las facturas

Según el último informe de Intrum, más de ocho de cada diez negocios españoles ha recibido peticiones de sus clientes para alargar los plazos de pago durante los primeros meses de 2023. Se trata de un crecimiento del 6% interanual.

El 82% de los negocios ha recibido peticiones de sus clientes para alargar los plazos de pago en 2023.
El 82% de los negocios ha recibido peticiones de sus clientes para alargar los plazos de pago en 2023.
El 82% de los negocios afirman que sus clientes les solicitan alargar los plazos de pago de las facturas

Las empresas españolas afrontarán la segunda mitad del año con varios retos por delante. Entre ellos, el de los impagos. Así lo reflejó el último Informe Europeo de Pagos elaborado por el proveedor de servicios de gestión de crédito Intrum, que constata cómo el 82% de los negocios españoles ha recibido peticiones de sus clientes para alargar sus plazos de pago durante los primeros meses de 2023. Es una cifra mayor que el año pasado y los expertos apuntan a que responde a las dificultades que están padeciendo.

Tal y como muestra este estudio anual, el 82% de las empresas de España ha recibido por parte de sus clientes la petición de aceptar plazos de pago más largos, seis puntos porcentuales por encima de la cifra registrada en 2022, cuando la proporción se situaba en el 76%.

Como principales causas de este problema, desde Intrum enumeraron, “el aumento de los tipos de interés y las dificultades para trasladar a los precios de venta el alza de los costes de producción, lo que está provocando que los negocios sufran por sí mismos las consecuencias del retraso en el abono de facturas de sus propios clientes.”

Casi siete de cada diez negocios creen que los impagos aumentarán durante este año

Además, el estudio mostró cómo las perspectivas de los autónomos y negocios españoles alrededor de los impagos son cada vez más pesimistas. Así, el 67% de las organizaciones españolas cree que el riesgo de impagos de sus deudores crecerá en los próximos doce meses, mientras que en 2022 este porcentaje ascendió al 57%, diez puntos menos.

Esta percepción es, además, muy superior a la media europea, fijada en el 60%. De hecho, de los 29 mercados analizados por la firma de servicios gestión de créditos y activos, España es el segundo país, después de Estonia (73%), con el mayor número de empresas que tienen este temor, por encima de otras regiones como Italia (66%), Reino Unido (61%), Francia (59%), Portugal (58%) o Alemania (56%).

Tal y como explicaron desde Intrum, los datos de su estudio ponen de manifiesto “la necesidad de una mayor eficiencia en los procesos de recepción y reclamación de pagos en las compañías. De esta manera, los negocios no sólo lograrían ser más positivas en cuanto a la previsión de retrasos en el abono de facturas, sino también en la obtención de resultados financieros”, afirmaron.

El retraso en los cobros le costó a autónomos y pymes más de 2.900 millones de euros en el primer trimestre

Los datos del informe de Intrum coinciden con los presentados en otros recientes estudios, como el de Informa DyB, donde se explica que, durante el primer trimestre de 2023, los retrasos producidos en el pago de las facturas supusieron un coste directo para el conjunto del tejido empresarial español, especialmente a los autónomos y pymes, de 2.974 millones de euros.

Según este mismo estudio, el plazo de pago de las empresas y administraciones a sus proveedores, la mayoría de ellos autónomos y pequeños negocios, subió a 95,49 días de media en el primer trimestre de 2023. Esto supone un aumento de casi 0,5 días respecto al mismo periodo de 2022.

De hecho, según distintos informes, seis de cada diez negocios españoles han sufrido en algún momento el impacto negativo de la morosidad en su cuenta de resultados. Y una buena parte de todas estas empresas que se han visto afectadas por los retrasos en el pago de las facturas ven amenazada la continuidad de su actividad por este mismo motivo.