Según un informe de AMBE

A pesar de la caída de las ventas de bicicletas en 2022, aumentaron los puntos de venta y el empleo

Después de dos años de récords, la industria de la bicicleta vivió en 2022 una caída interanual del 6% en su facturación. Pero el aumento del precio medio de estos vehículos de dos ruedas y la aparición de nuevos puntos de venta favorecieron el crecimiento del empleo.
Los fabricantes de bicicletas batieron su récord de empleo en 2022, aunque las ventas cayeron un 13,5%.
Los fabricantes de bicicletas batieron su récord de empleo en 2022, aunque las ventas cayeron un 13,5%.
A pesar de la caída de las ventas de bicicletas en 2022, aumentaron los puntos de venta y el empleo

Después de dos años batiendo sus propios récords de ventas, la industria de la bicicleta sufrió en España una ligera caída en 2022. Así lo mostraron los datos aportados por la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE), que en un informe elaborado junto a Cofidis indicó un descenso de la facturación del 6% durante el año pasado.  

Sin embargo, el empleo en el sector vivió el año pasado su mejor ejercicio desde que hay registros. “La industria española de la bicicleta emplea a 24.456 personas de manera directa, un 5,32% más que el año anterior”, expresaron desde AMBE. 

A pesar de la caída en las ventas de bicicletas, la facturación del sector en España en 2022 fue un 45,1% superior a 2019. Sin embargo, el año pasado no igualó los datos de ventas y facturación de 2021 en varias categorías -global de bicicletas, componentes y accesorios-, “produciéndose un descenso en la facturación del 6% respecto a 2021 y una bajada del 13,59% en el número de bicicletas vendidas”, analizaron desde la asociación. 

En el negocio de la bicicleta cada vez hay más puntos de venta y empleo 

A pesar de tratarse de un año de ajustes, el empleo y la creación de empresas alcanzó cifras de récord. Así, en 2022 operaban en España 3.111 puntos de venta, reparación y alquiler de bicicletas, un 2,74% más que el año anterior, y 401 empresas, lo que supone un incremento del 10,77% interanual

Por su parte, la producción nacional de bicicletas aumentó en 2022 un 2,8% en valor con respecto al año anterior, alcanzando los 255,8 millones de euros, “más del doble que los datos registrados en 2019”, explicaron desde AMBE. Tal y como mostraron, “son los mejores datos de producción de bicicletas por volumen de facturación de la serie histórica, según estadísticas del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.” 

Entre las causas de este crecimiento, la mayor importancia de los mercados internacionales sobre el total del sector es una de las principales. En este sentido, la exportación de bicicletas también aumentó un 76,5% en comparación con el año anterior, y triplica los datos de 2019. Por último, con respecto al segmento de la fabricación de bicicletas, el año pasado cerró con 189 fabricantes nacionales de bicicletas, componentes y accesorios, un 5% más respecto al año anterior. 

Tal y como valoró Javier López, presidente de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE), “el año 2022 no ha sido fácil para la industria de la bicicleta, pero el aumento del empleo, la creación de empresas y el comportamiento positivo de la venta de bicicletas eléctricas y urbanas refleja lo que el sector puede ofrecer a la sociedad española: una movilidad más limpia, puestos de trabajo y oportunidades empresariales.” 

Baja la demanda, pero crece el precio medio por bicicleta 

Tal y como reveló el informe de AMBE, la caída en la facturación del sector de la bicicleta se explica por la caída de la demanda. Sin embargo, este descenso se compensó en parte con un aumento del precio medio de cada venta, que superó por primera vez los 1.000 euros en España. Además, el precio medio de cada bicicleta eléctrica vendida en el país ascendió a 2.940 euros durante el año pasado. 

Para recuperar la senda del crecimiento durante este año, desde la asociación pusieron de manifiesto la necesidad de incentivar la compra de bicicletas, algo que sí ocurre en otros países del entorno. “A pesar de no contar con ayudas estatales a la compra y reparación de bicicletas, como tienen nuestros países vecinos, o los incentivos fiscales por ir en bicicleta al trabajo o adquirir flotas de bicis, el año 2022 ha tenido un comportamiento mejor de lo esperado, aunque peor que países de nuestro alrededor, como Francia o Alemania, que disfrutan de apoyo institucional para que más gente acceda a una bicicleta como forma de movilidad diaria” concluyó Jesús Freire, secretario general de AMBE.