El empleo crece en España, excepto entre los trabajadores por cuenta propia

El salario mínimo en España ha crecido un 65% y ya es como el de Estados Unidos

Según el IV Anuario del Mercado de Trabajo presentado por The Adecco Group Institute, en España, el salario mínimo alcanzó los 1.167 euros en 2022. Es un nivel similar al de Estados Unidos, pese a que el PIB per cápita del país norteamericano multiplica por 2,5 al español.
El salario mínimo en España se situó en 2022 en 1.167 euros, creciendo un 65% desde 2016
El salario mínimo en España se situó en 2022 en 1.167 euros, creciendo un 65% desde 2016
El salario mínimo en España ha crecido un 65% y ya es como el de Estados Unidos

Por cuarto año consecutivo, The Adecco Group Institute, el centro de estudios y divulgación del Grupo Adecco, ha analizado el contexto laboral, económico y social en España a raíz de los profundos cambios que han sucedido en los últimos años.

Para ello ha presentado el IV Anuario del Mercado de Trabajo, una recopilación de los aspectos más destacados del pasado año 2022 en materia de empleo, economía, evolución de la Seguridad Social, salarios, educación y formación, negociación colectiva y conflictividad laboral, población, salud y prevención de riesgos laborales. Una guía que, según explicaron, "aporta una visión panorámica de las diversas variables relacionadas con el empleo y los Recursos Humanos".

“En términos generales, la creación de empleo se mantiene en niveles aceptables dado el difícil contexto económico general. Sin embargo, es un aumento del empleo que no alcanza para evitar la aparición de problemas en colectivos concretos, como los autónomos, que sufren un retroceso, o quienes buscan su primer empleo, que aumentan”, destacó el director del Adecco Group Institute, Javier Blasco.

Según los datos extraídos del informe, en España, el salario mínimo se situó en 2022 en 1.167 euros, habiendo subido un 65% desde 2016. En las primeras semanas de 2023 se aprobó un nuevo incremento, ahora del 8%, que volvió a acelerar el crecimiento de esta variable.

Si lo comparamos con otros países, es un nivel similar al de Estados Unidos, pese a que el PIB per cápita del país norteamericano multiplica por 2,5 al español. En Europa hay una gran diversidad de situaciones. Desde ocho países que no tienen un salario mínimo legal (Dinamarca, Italia, Austria, Finlandia, Suecia, Noruega, Islandia y Suiza), hasta otros seis en donde el mismo supera los 1.700 euros mensuales.

Tras el fuerte aumento del trienio 2016-2019 (37,4%), el salario mínimo interprofesional había moderado su ritmo de incremento hasta una media anual de un 3,6% entre 2019 y 2022.

"Cuando se corrige el salario nominal (es decir, el salario ordinario mensual expresado en euros) de las variaciones del IPC, se obtiene el salario real. El salario real permite conocer las variaciones en el poder de compra del salario nominal", explica el informe.

El salario ha perdido poder adquisitivo en ocho de los últimos doce años

El estallido inflacionario carcomió el 4% del poder de compra del salario en 2022. En ocho de los últimos 12 años, el salario perdió poder adquisitivo. Así, en 2022, la cantidad de mercancías y servicios que se pudieron comprar con el salario medio fue equivalente a la que se podía comprar en 1996.

En mayor o menor medida, todos los países más grandes de la UE vieron caer el poder de compra de sus respectivos salarios medios en 2022. Por caso, en Francia y Polonia la caída fue inferior al 2%, mientras que en Italia y Holanda superó el 5%.

En cambio, los datos acumulados de los últimos diez años arrojan resultados dispares, que van desde una ganancia del 15,2% en Polonia hasta una pérdida de un 7,3% en Holanda.

Analizando el salario medio de los diferentes sectores españoles, por segundo año consecutivo, el salario medio de los Servicios fue el que más aumentó. De esa forma, se alargó a cinco la serie de años consecutivos en que se reduce la diferencia entre el salario medio industrial (el más elevado) y el mismo de los Servicios. En 2017 el primero era un 19,9% superior al segundo; en 2022, esa ventaja se redujo a un 14%.