Estos son los tres cambios de la nueva ley de startups que más podrían afectar a los emprendedores

El Congreso de los Diputados aprobó hace tres meses de forma definitiva la Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, más conocida como Ley de Startups. Tras más de un año de negociaciones, enmiendas y votos, ya está en vigor la primera norma "orientada de manera específica a la creación de un ecosistema emprendedor innovador en Europa”, tal y como recoge el propio texto de la ley.

 Algunos de los puntos clave que destacan los expertos en fiscalidad y asesoramiento empresarial sobre esta nueva regulación son las mayores facilidades para invertir en las empresas tecnológicas de reciente creación, el apoyo para retener y atraer talentos o la reducción de la carga fiscal que deben soportar estos negocios. 

A continuación, se resumen algunos de estos cambios que más podrían afectar a los emprendedores y que están en vigor desde finales del año pasado. 

Tres cambios de la nueva ley de startups que podrían afectar a los emprendedores

• Facilita la inversión en las startups

Una de las novedades más importantes que ha incluido esta nueva ley de startups. a juicio de los expertos consultados, son las mayores facilidades que se les da a los inversores para inyectar capital en negocios tecnológicos de reciente creación. Según el texto de la ley, no se aplicará ningún tipo de impuesto sobre las primeras inversiones en startups (hasta 100 000 €).

A partir de esa cantidad, la deducción será del 50 %. Esto hace que sea más probable que los inversores elijan las startups para destinar sus fondos.  Actualmente, si bien muchos emprendedores invierten en el desarrollo de startups, otros eligen hacerlo en el mercado inmobiliario o buscan soluciones que combinan tecnología con negocios como, por ejemplo, aprender cómo minar criptomonedas. 

Con la modificación de la tributación del carried interest (así se llama a lo que cobran los inversores una vez que la startup está en marcha), la inversión en una startup es más factible y beneficiosa para ambas partes. 

• Ayuda a la retención y atracción de talentos

A partir del estallido de la crisis del coronavirus, España ha tenido dificultades para poder retener talento. La nueva Ley de Startups ha dado un empujón fundamental en este sentido, modificando las condiciones de los incentivos de las stock options. 

Se conoce como stock options al método por el cual las empresas ofrecen a sus empleados comprar acciones, a un precio más conveniente que el del mercado, como parte de su remuneración.  

En este sentido, la ley aumenta el importe exento de tributación de 12 000 euros a 50 000 euros para este tipo de acciones. Con este sistema se busca que el empleado sea efectivamente parte de la empresa y se vea directamente beneficiado por su crecimiento. 

• Reducción de la carga fiscal 

La carga impositiva ha sido desde siempre uno de los principales lastres para aquellos emprendedores que apuestan por iniciar pequeñas empresas en nuestro país. Especialmente si son de base tecnológica, ya que las barreras de entrada son mayores. 

Con la nueva ley, el impuesto de sociedades para las empresas emergentes se reduce del 23% -con la reducción ya establecida para las pymes en general-  a un 15 %. Además, la deuda tributaria se puede aplazar durante los primeros dos años de la startup. 

Por otro lado, a la vez que se reduce la carga impositiva para los inversores, también se eleva la base máxima de deducción para los emprendedores, de 60 000 euros 100 000 euros. 

Otros cambios importantes para los emprendedores incluidos en la ley de startups

Además, tras la aprobación de esta norma, el Gobierno destacó otras ventajas fiscales incluidas en la norma durante el trámite parlamentario y el paso por el Senado:

• Se contemplan mayores incentivos para el emprendimiento "en serie". Los socios fundadores de startups que se embarquen en nuevos proyectos podrán beneficiarse ilimitadamente de los beneficios de la Ley. 

• Se crea un visado especial para lo que viene llamándose "Nómadas Digitales", es decir, profesionales que trabajen para sí mismos o para empleadores de cualquier lugar del mundo en territorio nacional.
• Se potencia el emprendimiento rural, poniendo en marcha proyectos piloto en entornos rurales y alineando las iniciativas previstas en la Ley con el Territorio Rural Inteligente, un proyecto que prevé la incorporación de las nuevas tecnologías en ámbitos como la agricultura, la ganadería, el urbanismo o el medioambiente de los pueblos.
• Se flexibilizan los requisitos y se incorpora la posibilidad de retener al talento que finalice sus estudios para que busque empleo en España.