Cuenta con más de 1.500 clientes entre Madrid y Colombia

Una plataforma de dos emprendedoras para acercar el deporte a la empresa

María y Xandra decidieron fusionar tecnología y deporte. El objetivo era doble: conseguir que el deporte llegase de forma más fácil  a los negocios y a los hogares, a la vez que combaten el intrusismo en el sector de la fisioterapia y el entrenamiento personal. Así nació Fixme una plataforma ‘sportech’.que crece un 25% cada mes y hoy emplea a 30 personas

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Una plataforma de dos emprendedoras para acercar el deporte a la empresa

Una de las míticas frases del doce veces ganador de Roland Garros, Rafa Nadal es que “las cosas no cambian por sí solas. Hay que hacerlas cambiar”. Esta premisa fue una de las que rondó durante meses por las mentes de María Luke y Xandra Exabe, dos emprendedoras de 32 y 33 años que a mediados de 2017 decidieron transformar el sector de la fisioterapia y el entrenamiento personal.

 “Mi socia, María es entrenadora personal y trabajaba como autónoma. Sufría de primera mano la precariedad y el intrusismo que se da tanto en el sector de la fisioterapia y como en el del entrenamiento personal. Todos los días llegaba a casa enfadada pensando en que había que hacer algo para dar la vuelta a la situación”. Por aquel entonces, Xandra, licenciada en ADE (Administración y Dirección de Empresas) estaba contratada por una startup tecnológica con sede en Madrid y surgió la idea “¿por qué no unir innovación, tecnología y deporte?”.

Fixme se colocaba así en la línea de salida de las ‘sportech’ (emprendimientos tecnológicos del sector deportivo) llevando por bandera los valores que comparten emprendimiento y deporte: esfuerzo, sacrificio y perseverancia. Los mismos que consiguieron que el proyecto fuera seleccionado por Google for Startups, la incubadora del gigante tecnológico. Y los mismos que las han permitido en apenas un año y medio crear 30 puestos de trabajo estables, cruzar el charco para expandir su proyecto en Colombia y conseguir que su facturación crezca a un ritmo del 25% cada mes.

Fue así como Xandra y María convirtieron Tetuan Valley en su centro de trabajo. Tutorizadas por expertos, pasaban allí “infinidad de horas” diseñando lo que hoy es una plataforma a través de la que particulares y empresas (de todo tipo) pueden reservar sus citas de fisioterapia y entrenamiento personal a golpe de click y que, a su vez, permite a los profesionales del sector –“todos licenciados o graduados y con contrato”, puntualiza Xandra- contar con un espacio en el que además de obtener clientes optimizan sus agendas con la garantía de que cobrarán el servicio aunque no se preste.

Llevar el deporte a cualquier negocio

Según un estudio del Consejo Superior de Deportes (CSD) en España hay 450 empresas – desde grandes a pequeñas y micropymes- adheridas a la declaración de Luxemburgo que aboga por promocionar la salud en el trabajo. Éstas compañías han desarrollado programas para promover la práctica de la actividad física y luchar contra el sedentarismo. Para ello, han firmado acuerdos con gimnasios o centros deportivos que ofrecen tarifas reducidas para los empleados, han incorporado un servicio de fisioterapia, imparten clases colectivas de yoga y corrección postural o favorecen la participación de los empleados en competiciones deportivas.  

Por otra parte, la práctica del deporte redunda en mayores beneficios para las empresas ya que mejora la productividad de los trabajadores y reduce el absentismo. Y es que hacer deporte, entre otras cosas, ayuda a combatir el estrés, liberar tensiones, mejorar la autoestima y la creatividad, y fomenta el trabajo en equipo.

Sin embargo, apenas un 4% de quienes practican deporte lo hacen en horario laboral y sólo un 6% en espacios habilitados para ello dentro de los centros de trabajo. Precisamente esta es una de las líneas que las emprendedoras de Fixme quiere potenciar. Además de los más de 1.500 clientes particulares con los que cuenta a día de hoy, la 'sportech' tiene convenio con 40 empresas a las que presta sus servicios. “La mayoría de ellas en Bogotá (donde operan desde hace algo más de seis meses)”, comenta Xandra. “Allí la Ley obliga a las empresas a establecer un tiempo de pausas activas y a que incorporen programas que promuevan el bienestar y la salud en el trabajo. Incluso todos los años se celebra la semana de la salud”.

El funcionamiento de Fixme B2B es sencillo. Las empresas pagan una cuota de membresía por trabajador que puede beneficiarse de los servicios tanto dentro de la empresa como fuera, en cuyo caso se le aplicará un descuento sobre la tarifa establecida. 

Tarifas que, por otra parte, son accesibles y se encuentran en la media de la oferta que ofrecen profesionales cualificados en gimnasios y centros deportivos. Además, Fixme ofrece bonos con descuento de 3, 5 o 10 sesiones que se podrán emplear tanto para servicios de fisioterapia como de entrenamiento personal. Incluso, en este último caso, la sesión puede ser compartida por hasta tres clientes, abaratando así el coste unitario. El objetivo es “devolver el control del bienestar a las personas y que el deporte y la salud llegue cada día a más gente”, concluye Xandra.  

Generadoras de empleo estable en Madrid y Bogotá

Si bien el prototipo de Fixme estuvo listo “en tres o cuatro meses”, desde ese momento quedaba mucho trabajo por hacer. El sistema prueba-error fue una constante hasta que la plataforma ha llegado a ser lo que es hoy. “Dábamos valor a los clientes pero no a los profesionales”, explica Xandra. "Poner el foco en ellos fue clave para despegar y diferenciarnos así del resto".

Entre los principales problemas con los que se encuentran los entrenadores personales y los fisioterapeutas es la cancelación de citas de última hora por parte de los clientes. Lo cual se traduce en menor facturación. Cubrir este vacío es la razón por la que los profesionales que prestan sus servicios para Fixme están sujetos a convenio y su contrato es indefinido, percibiendo una parte de su salario de forma variable en función del número de clientes a los que traten. “Los profesionales no dejan de facturar aunque les anulen la cita minutos antes”, insiste Exabe. Actualmente Fixme cuenta con un equipo de 30 personas, de los que “más de 20” son fisioterapeutas y entrenadores personales que se reparten entre Madrid y Bogotá (Colombia) y que tienen que superar un exigente proceso de selección que consta de tres fases.

¿Por qué dos ciudades a más de 8.000 kilómetros de distancia cuando lo más sencillo hubiera sido optar por un emplazamiento más cercano? La respuesta tiene nombre propio Rockstar, una de las aceleradoras más prestigiosas de Latinoamérica que contacto con ellas durante los meses que estuvieron bajo el paraguas de Google for Startups. “No nos lo creímos hasta que recibimos el tercero de los correos electrónicos. Entonces decidimos contestar”.

Además de permitir la internacionalización de Fixme, la inversión de Rockstar ha cambiado su hoja de ruta. “Latinoamérica es nuestro mercado prioritario. Esto no quita que sigamos creciendo en España pero el siguiente paso lo daremos en Ciudad de México”.

Por otra parte, y aunque en su caso están batiendo récords en la carrera de fondo del emprendimiento, la realidad es que “los impuestos y las cotizaciones son obstáculos que impiden que muchos proyectos salgan adelante”, lamenta. Y añade, “hay mucha diferencia entre España y Colombia. Aunque los costes laborales por empleado son similares, allí los impuestos y los costes de inicio de actividad son mucho más bajos, lo cual facilita mucho las cosas”.

Equipo Fixme

Crecer rápido y vender

Si durante sus inicios tuvieron que tirar de sus propios ahorros y, posteriormente, de subvenciones, de un préstamo de Enisa, y de la aportación de los inversores la realidad es que “hemos tenido gasolina para todo y ahora estamos recogiendo los frutos”. Combustible que sumado ha supuesto un total de 100.000 euros y que se multiplicará con seguridad ya que en estos momentos Fixme está cerrando su primera ronda de financiación.

En este punto, sorprende que al preguntar por cómo se rentabiliza dicha inversión Xandra conteste con seguridad pasmosa que “el fin último de una startup no es ser rentable, sino tener un proyecto innovador que aporte valor añadido, crecer rápido y después vender”. Aún así, destaca satisfecha que “lo que facturamos nos permite pagar las nóminas de todos los empleados sin necesidad de recurrir a financiación externa”.