También subirán los carburantes

Los autónomos se preparan para pagar aún más por la luz en 2018

En estas fechas es frecuente repasar aquellos productos y servicios con subidas previstas para el ejercicio inminente. En el caso de 2018, un alza va a destacar por encima de todas: la de los precios de la electricidad.

bombilla 2018
Los autónomos se preparan para pagar aún más por la luz en 2018

Todas las previsiones apuntan a que la energía eléctrica será más cara el año que viene respecto de 2017, ejercicio que ya va a cerrar con un incremento del 10% en relación con el año anterior para los consumidores medios, entre los que se encuentran, lógicamente, los autónomos y las pymes.

El ministro de Energía, Álvaro Nadal, destacó recientemente el convencimiento del Gobierno de que “el recibo de la luz bajará en 2018”. Asimismo, se ha hecho público que, por cuarto año consecutivo, el Ejecutivo congelará la parte regulada de la factura de la luz.

Pero eso no será suficiente, como ya se ha demostrado en 2017. Informes de los mercados de futuros auguran incluso que el año próximo “los precios (de la electricidad) serán los más caros desde 2009”.

Varios factores se van a conjugar para este alza del recibo de la luz, según los expertos: por un lado, la meteorología, que tanto interviene en la fijación de precios, con la escasez de lluvias como gran hándicap que está provocando una producción hidráulica escasa y, por otro lado, el incremento también muy previsible del crudo, el gas y el carbón.

Barril de petróleo

El barril de petróleo Brent, el utilizado en Europa, ronda en estos momentos los 64 dólares. En los últimos meses se han producido subidas paulatinas que han alejado los precios del barril de los que tenía a mediados de año y que han propiciado combustibles más baratos.

El anuncio de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de recortes en la producción de crudo en 2018 va a encarecer éste en los próximos meses. La firma de análisis Goldman Sachs prevé que el crudo aumente su precio un 9% en el ejercicio que está a punto de comenzar. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) y la firma Standard & Poor’s coinciden también en vaticinar una subida del petróleo.

La consecuencia inmediata, si se cumplen estos vaticinios, es el alza de los precios de los combustibles y de todo tipo de hidrocarburos. A continuación, lo más frecuente es sufrir alzas en las tarifas del transporte público. Los profesionales del transporte de mercancías serán los más afectados y, también, todos aquellos que utilizan su vehículo para su actividad.

Butano y peajes

Otra fuente de energía que va a cerrar el año con una fuerte subida de precio es el butano. Este 2017 ha visto cómo se ha incrementado hasta un 17,7% en total el precio de la bombona hasta el mes de noviembre. Como nada hace pensar en un cambio de tendencia, lo previsible para 2018 es que la bombona vuelva a subir su precio de media.

Lo que sí está ya confirmado es el aumento de un 1,91% en las tarifas de los peajes de las autopistas. El rescate de las que habían quebrado, el incremento del tráfico que utiliza estas vías y, sobre todo, el crecimiento de la inflación han motivado este alza.