Cerrar o seguir trabajando

¿Qué hacer con tu negocio en vacaciones?

Llegan las vacaciones de Semana Santa y la mayoría de los autónomos se preguntan qué deben hacer con su negocio, mantenerlo abierto o cerrarlo. La respuesta a la pregunta dependerá del tipo de cada negocio y de la organización y planificación del trabajador por cuenta propia.

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¿Qué hacer con tu negocio en vacaciones?

La llegada de cualquier tipo de periodo vacacional -Semana Santa, verano o Navidad- supone un dilema para el trabajador autónomo y es qué hacer con su negocio. Elegir entre cogerse unos días y cerrar el negocio o, por el contrario, mantenerlo abierto es una decisión que afectará directamente al correcto funcionamiento de su actividad.

Una de las primeras cosas que debe tener en cuenta un autónomo cuando se plantee coger vacaciones es tener conocimiento de que su propia figura jurídica implica que puede libremente organizar su jornada laboral como mejor prefiera, incluidas sus vacaciones. Y la segunda es que cogerse vacaciones influye directamente en su negocio, pues 'día que no se trabaja, día que no se factura'.

Ahora bien, ello no implica que los autónomos no tengan o no puedan cogerse vacaciones. Lo único a lo que les obliga esta situación es a tener conocimientos sobre su negocio, su mercado y su clientela para saber cuándo son las épocas de menor volumen de trabajo y cogerse entre esos días sus vacaciones. Para ello es imprescindible la planificación, tal y como aconsejan en un estudio publicado por la Universidad Abierta de Cataluña (OCU, por sus siglas en catalán -Universitat Oberta de Catalunya-).

Organizar las vacaciones con anterioridad conociendo cómo funciona el mercado, terminar con las tareas y pagos pendientes (tanto con los clientes como con los proveedores) para irse de vacaciones sin preocupaciones, y delegar funciones en el caso de que el autónomo cuente con algún trabajador a su cargo serán algunas de las medidas. Asimismo, desde la OCU aconsejan que antes de iniciar las vacaciones un autónomo deberían tener en cuenta estos tres aspectos:

1.- Tener un fondo de eventualidades: acumular durante todo el año un fondo para cubrir los gastos fijos durante el periodo de vacaciones o durante aquellos momentos en los que no sea posible facturar.

2.- Fijar un protocolo de actuación: poder localizar al autónomo en casos de emergencia incluso cuando éste se encuentre de vacaciones es importante. Se recomienda en primer lugar definir cuáles serían los casos de emergencia y en segundo establecer un número o un email con el que poder contactar con el autónomo.

3.- Contactar con el trabajo antes de regreso de vacaciones: antes de volver directamente al trabajo recomiendan desde la OCU contactar previamente con la actividad para poder planificar y reorganizar el volumen de trabajo antes de la vuelta. Siempre y cuando esto ocupe el menos tiempo posible de los últimos días de vacaciones.

¿Y si no me puedo coger vacaciones?

Para los autónomos que no puedan cogerse vacaciones durante fechas tan señaladas como Semana Santa, verano o Navidad, pueden siempre y cuando las características de su propio negocio o mercado lo permita seguir los siguientes consejos de los OCU para sobrevivir a periodos vacacionales sin vacaciones:

  • Limitar los horarios: reducir los horarios de trabajo es una de los primeros consejos para todos aquellos autónomos que trabajen durante vacaciones. Establecer un horario reducido que permita, por un lado, continuar con la actividad y, por otro lado, tener más tiempo libre.
  • Equilibrar el volumen de trabajo: para que la primera medida sea efectiva es importante que el autónomo sepa priorizar sus tareas.
  • Practicar actividad física: llevar una dieta equilibrar y practicar actividad física es una de prácticas más recomendables para aliviar la tensión y el estrés laboral.
  • Disfrutar del tiempo libre: aprovechar los huecos libres producidos por la reducción de los horarios para desconectar.