Ideas para emprender

Los servicios a domicilio están en auge en los pequeños municipios

La dispersión de algunos pequeños núcleos de población en España ha sido visto en muchas ocasiones como un problema demográfico, social y económico. Sin embargo, esos pueblos diminutos, que a veces no llegan ni al centenar de habitantes, se han convertido en una oportunidad de negocio para algunos emprendedores que han detectado una serie de actividades muy demandadas por su escasez. Peluqueros, podólogos, pescaderos, fisioterapeutas...Los que han puesto en marcha algún negocio en alguna de estas poblaciones, así como instituciones y ayuntamientos, coinciden en que lo más adecuado es ofrecerse a domicilio. Los servicios puerta a puerta son los que más éxito tienen en la actualidad, dado que la mayoría de los pueblos pequeños cuentan con una población muy envejecida que tiene dificultades para desplazarse.

Allepuz (Teruel)
Imagen de Allepuz (Teruel)
Los servicios a domicilio están en auge en los pequeños municipios

Zonas muy amplias del territorio español están sufriendo una despoblación progresiva que deja localidades enteras por debajo del centenar de habitantes. Hay comunidades autónomas, como Castilla y León o Aragón, en donde abundan los municipios que han sufrido y sufren grandes éxodos. La consecuencia es que la población que queda es cada vez de mayor edad. Estas dos comunidades autónomas no son las únicas en las que se produce esta situación pero los datos ahí están: el Instituto Nacional de Estadística (INE) prevé que, entre los años 2000 y 2019, Castilla y León habrá perdido 93.000 habitantes, mientras que en Aragón el 75% de los municipios cuentan ya con menos de 500 residentes.

Junto a los vecinos, se han ido también los negocios. Pero hay lugareños que siguen ahí y que, lógicamente, tienen muchas necesidades sin cubrir. El autónomo que se decida a emprender en cualquiera de estas dos comunidades, en su ámbito rural, sabe que cuenta con clientes asegurados. Eso sí, debe plantearse un cambio de mentalidad en cuanto a la forma de ejercer la actividad. Y éste no es otro que olvidarse del negocio estático en un local y estar dispuesto a moverse en un radio de acción de varios kilómetros.

El tipo de negocios que son necesarios en estas comarcas son los que cubren necesidades básicas: tiendas de comestibles, panaderías, carnicerías, pescaderías…Pero también peluquerías y servicios de estética; actividades relacionadas con la salud humana (fisioterapeutas, podólogos) o animal (veterinarios), mecánicos, servicios técnicos de reparación… Lo que todos tienen en común es que, en muchas ocasiones, no se necesita un establecimiento físico para abrir el negocio. Basta con disponer de un vehículo con el que acudir a los domicilios a llevar los productos o prestar los servicios, ya que los consumidores son personas mayores y tienen más problemas para desplazarse. 

El consejo principal para quien se lance a un negocio rural es que no se limite a servir una sola población. Lo más frecuente es que se establezca un lugar de operaciones, que puede ser un establecimiento físico pero también la casa particular del propio autónomo, y que con un vehículo se recorra la comarca para atender a varios pueblos.

Reparto, mensajería…

A nuevas necesidades, nuevos servicios. Hay zonas, por ejemplo en la provincia de Soria, donde ya funcionan rutas de reparto privadas que se encargan de llevar periódicamente la compra habitual de alimentos a vecinos de edad avanzada y aislados, previos acuerdos con establecimientos de venta. En otras áreas de acceso complicado, como las montañas de León, este invierno pasado quedaron aislados por la nieve y las bajas temperaturas gran cantidad de pueblos pequeños. El mayor problema que se planteó fue que muchos vecinos necesitaban sus medicamentos habituales y no podían acceder a ellos, con lo que en algunos casos se tuvo que encargar de llevar las medicinas, pueblo por pueblo y casa por casa, la Guardia Civil. Este es otro servicio que puede instaurarse y, para no ser sólo estacional, puede ampliar el radio de acción y los productos que se llevan puerta por puerta, aunque los medicamentos nunca van a faltar. La mensajería propiamente dicha es otro servicio muy demandado. La mayoría de las poblaciones pequeñas, y las de menos de 100 habitantes las primeras, se están quedando sin servicio de correos y sin carteros. De hecho, ya se ven en pequeñas cabeceras de comarca establecimientos de mensajería privados que surten a varias localidades de los alrededores y no precisamente de las grandes marcas conocidas.

Locales multiservicios

Una iniciativa que surgió hace 16 años en Teruel y que está logrando sus frutos es la de los locales multiservicios. El proyecto, llamado MultiServicio Rural, se debe a la Cámara de Comercio de Teruel y consiste en que los ayuntamientos de municipios muy pequeños se adhieran al mismo con el fin de promover la apertura de un negocio variado en el pueblo. El ayuntamiento pone a disposición de los interesados un local de propiedad municipal y saca a concurso la explotación del negocio que se va a instalar allí. Se trata de montar locales multiservicios en los que haya lo más básico: una tienda de alimentación y otros productos, un bar y hasta restaurante y alojamiento. También pueden tener servicios añadidos, según las necesidades de la vecindad, como wifi, información turística de la zona o los medicamentos que deja, para que sean recogidos, el farmacéutico que realiza la ruta de la comarca. El comerciante tiene la libertad de realizar las actividades que considere convenientes para atraer gente al negocio, como jornadas gastronómicas o encuentros de motoristas.

Son 69 municipios los que se han adherido a este proyecto hasta la fecha, casi el 30% del total de los que consta la provincia de Teruel. Cada ayuntamiento decide si exige o no a los autónomos interesados el empadronamiento en la localidad. La iniciativa ha despertado el interés en las otras dos provincias de la comunidad autónoma aragonesa.