Día mundial de la mujer emprendedora

El 77% de los nuevos afiliados al RETA en los últimos dos años fueron mujeres

La brecha de género entre emprendedores españoles, se va estrechando poco a poco. Aunque aún queda mucho por hacer, -sólo un 35,7% de los autónomos son mujeres-, el emprendimiento femenino ha subido dos puntos y medio en sólo una década. Varias de estas emprendedoras cuentan a Autónomos y Emprendedores su experiencia en primera persona.
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El 77% de los nuevos afiliados al RETA en los últimos dos años fueron mujeres

La diarquía que imperaba en el Gobierno de la griega Esparta dotaba a la mujer de un papel protagonista en la sociedad. Se les consideraba iguales al hombre tanto en la educación, en la formación para la guerra, como a nivel jurídico. También en la antigua Roma se les permitía participar en las empresas. Algo que constató el historiador francés Gaston Boissier, “durante la República tardía,  las mujeres aparecen mucho más involucradas en los negocios.. Ellas dirigen sus villas; invierten sus fondos; prestan y piden prestado”.

Pero esta situación de igualdad no perduró mucho tiempo y durante siglos ha ido empeorando. No fue hasta el siglo XIX  cuando las mujeres se revelaron contra la existencia de un “techo de cristal” y se plantearon la necesidad de romperlo. Uno de los hitos, entre otros muchos, ha sido el fenómeno del emprendimiento femenino que en el S.XX empezó a ocupar espacios destacados en foros, medios de comunicación y estadísticas. Ya en este siglo, concretamente en 2014, se decidió celebrar el Día mundial de la mujer emprendedora. Una fecha importante para todas aquellas que un día decidieron volver a ser dueñas de sus propias iniciativas y de su tiempo. Un 18 de noviembre para recordar los datos que muestran que se ha hecho mucho, pero que también queda un largo trayecto. 

“El factor educacional y la falta de referentes son dos de los principales causantes de la brecha en el emprendimiento entre hombres y mujeres”,explicó a este medio Rocío Álvarez – Ossorio, directora de EAE Emprende, la plataforma de impulso del emprendimiento de EAE Business School. “Nos han educado en roles distintos y los referentes de mujeres que optaban por montar su propio negocio han sido escasos. Afortunadamente, esto va a menos”.

Los datos sobre la evolución del número de autónomas en la última década, hablan por sí solos. En 2009, el número de mujeres que cotizaban al RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) era de poco más de un millón, y su peso sobre el total del colectivo era del 33,3%. A día de hoy, ya son 1.158.352 las cotizantes y representan un 35,7% sobre los 3,25 millones de trabajadores por cuenta propia. Es más, entre 2017 y 2019 el 76,8% de los autónomos que se sumaron al RETA fueron mujeres. Y no sólo eso, el 40% de las jóvenes quieren ser emprendedoras

Una de ellas es Mercedes Pescador. Tras pasar más de 10 años trabajando para multinacionales en “jornadas maratonianas”, con el inicio de siglo decidió dar un vuelco a su vida. “Tenía un hijo de apenas dos años y otro de seis, y era la mejor manera de desarrollar una carrera profesional con plena autonomía. Emprendí por libertad, por independencia y también por poder, porque desde el mundo de la empresa la mujer puede conseguir una cierta autoridad”-que se limita en otros ámbitos-.

Tres motivaciones que fueron la semilla de 'Media Luna comunicación', una agencia de comunicación, que se ha convertido en referente de sectores tan complejos como el farmacéutico o químico y que trabaja para distintas organizaciones e instituciones públicas, entre ellas, la Comisión Europea, para la que ha organizado el acto del Día internacional de la mujer durante los dos últimos años.

Su experiencia como emprendedora no se queda aquí. En 2007 decidió aventurarse en otro proyecto y fundó la editorial 'Lo que no existe', que ha dado visibilidad a decenas de autores noveles, cuyas publicaciones tienen como seña de identidad el compromiso social de las empresas. “Nunca me he arrepentido”, aseguró.  

Otro ejemplo es el de Lola Palacio, ingeniera y  fundadora de 'Concepto Industrial'. Palacio decidió emprender hace siete años y revolucionar el mundo del interiorismo de oficinas. Grandes multinacionales españolas y latinoamericanas han comprado sus pizarras de vidrio magnético, rotulable, proyectable, interactivo y retroiluminable que, además, se pueden emplear para separar espacios. “Antes, la situación laboral era mucho más rígida que ahora. Pero, lo más importante, es que llevaba el emprendimiento en el ADN”. Algo que “independientemente de ser hombre o mujer, se tiene que tener. Si no,es difícil de aguantar el camino”.

Digitalización y sostenibilidad

La economía digital ha servido para superar la brecha del emprendimiento entre hombres y mujeres. Es el caso de Beatriz Revilla, CEO de Mundospanish, plataforma que, desde 2012, conecta negocios de españoles alrededor del mundo y que ahora, ha puesto en marcha Spanish Ads, una herramienta que permite a cualquier marca conectar o vender sus productos directamente entre los españoles que viven en el extranjero a través de campañas de publicidad.

Esta emprendedora explicó que, aunque “es cierto que el ecosistema  emprendedor sigue muy masculinizado -y es una lástima-, he tenido dos factores a mi favor: el mundo digital, asexual y democrático; y la mentalidad abierta y global de nuestra comunidad. La mayoría de nuestros clientes son empresarias y empresarios que han roto barreras, cruzado fronteras y descubierto nuevas culturas”.

Para Revilla, en este sector en concreto "No hay machismo, incluso diría que en ocasiones es un punto a favor porque, como españoles, son conscientes de las dificultades de emprender en nuestro país y valoran especialmente que el proyecto tenga un fuerte componente femenino, tanto por mí como por nuestro equipo”.

Pese a que los tiempos han cambiado, “sigue habiendo una brecha enorme e incomprensible. Las mujeres somos más trabajadoras, eficaces y  responsables a la hora de desarrollar un negocio", apuntó Mercedes Pescador. 

Tesis que corroboran diversos estudios que demuestran que los negocios puestos en marcha por mujeres son mucho más sostenibles en el tiempo y rentables que los de los hombres. Según el último Mapa del Emprendimiento elaborado por Spain Startup-South Summit, los proyectos femeninos fracasan un 28% menos que los de los hombres. Seguramente, porque somos "mucho más constantes y conservadoras", coincidieron tanto la fundadora de Concepto Industrial como la directora de EAE Emprende.

Este hecho se refleja incluso a la hora de obtener financiación. “Los inversores (incluido el sector bancario) apuestan en mayor medida por los proyectos liderados por mujeres porque son más prudentes a la hora de reflejar la proyección de la empresa. Miran más al largo plazo. Aportan más seguridad”, explicó Álvarez – Ossorio. A este respecto, destacó también el avance del papel de la mujer como bussiness angel. “Aunque todavía estamos lejos de los hombres, cabe destacar que ya hay un 9% de mujeres que apuestan por invertir en nuevos negocios”.

Por otra parte, cuando la mujer decide dar el paso de montar su propio negocio suele haber cumplido los 30 años. Es a partir de esta edad cuando se concentra el mayor número de autónomas, un 92% del total, según los datos de Seguridad Social. Y, en concreto, es en la franja de entre 31 y 35 años donde tienen un mayor peso con respecto al total de hombres, un 39,1%.

Dificultad para conciliar

Con todo lo anterior, ¿por qué ellas siguen siendo muchas menos? La conciliación es uno de los factores que mueve a muchas mujeres a emprender. Pero cuidado, “que esto no les engañe. Es muy complejo” afirmó la directora de EAE Emprende. “El estrés de emprender y compatibilizar el negocio con la vida familiar es muy grande, especialmente cuando los niños son pequeños”.

Opinión que también corroboró la fundadora de 'Concepto Industrial': “La apuesta por emprender tiene un coste, el de la vida personal y familiar. Tener tu propia empresa y sacarla adelante supone, para la mayoría, renunciar a la maternidad y, cuando el proyecto ya está consolidado y tienes un equipo en el que puedes delegar con total confianza -lo cual no es fácil- puede que sea tarde para ser madre”.

Más allá de la conciliación, la fundadora de 'Mundospanish' consideró que hay “dos principales retos para reducir la brecha en el emprendimiento: uno estructural y otro educativo. El primero pasaría por una profunda transformación profesional y social de nuestro país en el régimen de autónomos, medidas reales de conciliación y una renovación de la organización empresarial, muy vinculada al ‘absentismo doméstico’. Y, en segundo lugar, un cambio en la mentalidad femenina, para eliminar tabúes y clichés propios. Por supuesto, esto pasaría por acabar con la excesiva sectorialización del emprendimiento, hay muy pocas mujeres en sectores ‘no femeninos’, fuera de la moda, el hábitat, los niños o la estética”.  

En la misma línea Álvarez-Ossorio, añadió que “la mujer debe reflexionar sobre su propia humildad. En muchas ocasiones, somos nosotras mismas quienes no damos visibilidad a nuestro papel como emprendedoras o inversoras”.

Por último, y si bien todas están de acuerdo en que la importancia del papel de la mujer en el ámbito del emprendimiento y la empresa ha de ser cada vez mayor, en lo que también coinciden es que la clave está en “la diversidad", en apostar  por equipos multidisciplinares, compuestos por hombres y mujeres que, a fin de cuentas es lo que enriquece un proyecto empresarial.