Según expertos

Algunas ideas que te pueden ayudar si vas a emprender en 2019

Los emprendedores son optimistas de cara a 2019. Incluso, más del 40% prevén aumentar su plantilla el próximo año. Sin embargo, es bueno considerar algunas recomendaciones que proponen los expertos. 

Imagen Igeneris
Algunas ideas que te pueden ayudar si vas a emprender en 2019

Según los datos aportados por la escuela de negocios Level UP, más del 40% de los pequeños negocios -entre los que se incluyen los de los emprendedores tienen previsto aumentar su plantilla en 2019. Además, las empresas más jóvenes son las que mayor crecimiento tendrán el próximo año. Como dice la escuela de negocios Level Up, “si quieres conseguir tu sueño, hazlo ahora, ya que nunca es el momento perfecto. Hay que moverse, lanzarse, aventurarse y fijarse unos objetivos claros y soñadores”. Asimismo, la “pasión” por lo que se hace será decisiva ya que hará más fácil la aventura de emprender.

Pero para conseguirlo, la consultora Igeneris, insiste en el primer mandamiento del emprendedor: diseñar un modelo de negocio que ponga en el centro a nuestros clientes y nos permita adaptarnos a sus nuevas necesidades.También asegura que hay que tener muy presente una serie claves que mejoren la competitividad de nuestro proyecto.

1. El problema es obsesionarse con la solución

Lo primero es detectar el problema ya que si se desconoce se plantearán soluciones que no tendrán validez alguna y acabarán en la papelera de reciclaje. El resultado: malgastar tiempo y recursos. “Partimos de la base de que el cliente tiene que estar en el centro y que toda solución que ideemos tiene que resolver su necesidad. Pero, ¿qué pasa si en la práctica, nuestra solución no funciona? No es una decisión fácil. La clave es que recordemos que lo importante no es nuestra solución, sino el problema”, explican los expertos de Igeneris.

Desde Level Up añaden que una de las claves esta en “detectar la oportunidad y escuchar lo que los clientes opinan para ser capaz de reaccionar ante los posibles problemas. Es posible que la idea inicial a priori parezca muy buena, pero si la gente no quiere consumir ese producto o servicio es recomendable hacer cambios con rapidez para ofrecer lo que realmente busca el usuario”. Y añaden que el éxito “no viene determinado por lo buen o mal profesional que uno sea, sino en saber hacer trabajo del empresario, esto es aprender a manejar el negocio”.

2. El usuario no eres tú

A la hora de diseñar un proyecto el ego puede jugar una mala pasada. Hay que dejar de lado nuestras preferencias ya que no tienen por qué corresponderse con las de nuestros usuarios. De hecho, pueden ser radicalmente distintas y dar al traste con todo el trabajo realizado. “Nos puede parecer obvio que lo más conveniente para un determinado target es recibir un servicio a domicilio, pero quizás este posible cliente no está preparado para recibir a extraños en su casa o, simplemente, percibe más seguridad en un centro especializado, aunque suponga desplazarse”. Ante esta situación, desde la consultora indican que se debe “ofrecer siempre la mejor solución para el cliente final, no la que nosotros elegiríamos en su situación”.

3. Nada es perfecto

La mejor manera de conseguir la perfección es sistema prueba/error. “Esto no significa lanzar productos o servicios malos. Simplemente, no esperaremos a que el producto esté completamente terminado para pedir a los clientes que nos den su feedback. Cuanto antes lancemos, antes aplicaremos los cambios necesarios y antes aprenderemos”, explican en Igeneris.

4. Aprender jugando con la tecnología

Lo queramos o no estamos en la época de la digitalización y la tecnología. El lema es adaptarse o morir.  Es fundamental grabarnos a fuego que las nuevas generaciones -milenials y centenials- nacieron con un dispositivo móvil bajo el brazo. Así que, “apuesta por la proactividad a la hora de diseñar modelos de negocio en torno a estos juguetitos”, afirman desde la consultora Igeneris.

5. ¿Somos nuestros propios enemigos?

Innovación. Es uno de los términos decisivos para los emprendedores del 2019. “hay que perder el miedo a innovar y equivocarse. Cuando la empresa pone obstáculos a la innovación, se está preparando inevitablemente para quedarse estancada”. Las grandes plataformas digitales no son “el enemigo”.

6. Una carrera de fondo en la que no importa salir el primero

Desde Level UP insisten en que toda empresa requiere su tiempo y en que la inmediatez solo trae “decepciones” Es por ello por lo que aderezar nuestro proyecto con paciencia y el tesón serán los mejores aliados para llegar al objetivo final del plan de negocio, cuya visión debe ser clara y a largo plazo.

Por otra parte, en Igeneris destacan que muchas veces se desechan las ideas de negocio porque ya existen. Sin embargo, esto no invalida nuestro proyecto. Todo lo contrario. El hecho de que alguien se nos haya adelantado nos permite mejorarlo y hacerlo más competitivo. “No importa si no eres el primero, lo que importa es que seas el mejor. Tatúatelo si hace falta este 2019”, apostillan los expertos.

En este punto desde la escuela de negocios catalana añaden que hay que “ aprovechar el conocimiento de otras personas o incluso de referentes y proyectos en los que nos podamos inspirar puede resultar útil para el negocio”. Asimismo, señalan la necesidad de  “eliminar y dejar de refugiarse en las excusas. Solo sirven para anclarse en creencias falsas que no le permiten a uno avanzar”.

7. Ofrecer alternativas más sostenibles: servitización

Atención la servitización de la oferta. O lo que es lo mismo, “frenar el consumo compulsivo de productos, ofreciendo una experiencia completa, de forma que el cliente accede a los productos de manera completamente diferente”. O lo que es lo mismo, ofrecer una experiencia al cliente más que un simple producto o un servicio. Eso promueve, muchas veces, un consumo más sostenible para la empresa, el consumidor y, por supuesto, para el planeta.

8. Aprender a decir NO a los clientes

Siempre y cuando sea necesario. Hay que desmitificar la creencia de que el cliente siempre tiene la razón. Aunque “de un poco de vértigo, decir que no pone en valor nuestro trabajo y nos permite ofrecer soluciones que de verdad sean factibles. Eso sí, afina el tacto para decirlo de la mejor manera posible”.

9. La suerte es una mínima parte

Estar preparado, conocer bien el proyecto y, por tanto, sus puntos débiles y fuertes, es la lanzadera hacia el éxito. La suerte es circunstancial y apenas protagoniza una mínima parte del mismo. “Confía un poquito menos en la suerte y más en tu capacidad de dar respuesta a las necesidades reales de tu cliente. Te rentará más, seguro”.

10. El diseño es importante, dale su lugar

Aprender bien cómo se diseña un modelo de negocio es una asignatura pendiente en España, pero hay que ser conscientes de que éstos son el futuro y de ellos depende el éxito de nuestro proyecto. “El diseño de un plan de negocio es mucho más que hacer cosas bonitas, es una habilidad indispensable en cualquier profesional”, concluyen desde Igeneris.