¿Animado a emprender en Francia? Macron ayudará más a los autónomos

El programa económico de Emmanuel Macron, quien el próximo domingo tomará posesión de la Presidencia de Francia, contiene varios guiños a los emprendedores y los autónomos.
¿Animado a emprender en Francia? Macron ayudará más a los autónomos

Una de sus medidas estrella es la reducción fiscal para empresas y hogares, cuantificada en 20.000 millones de euros. No hay mucha concreción pero sí una promesa firme: rebajar el tipo del Impuesto de Sociedades del 33,3% vigente (situado en la parte alta de la lista de tipos en la Unión Europea) al 25%. En España, el tipo general es del 25% y para los emprendedores, del 15%.

La segunda gran promesa, en realidad una de las más novedosas del programa si no la que más, es la de extender el derecho al desempleo a los emprendedores, a los autónomos, a los agricultores y a los profesionales liberales. Cualquier trabajador podrá cobrar en Francia el subsidio de desempleo, que se universaliza. Ahora bien, también se endurecen sus controles. Todo el que reciba la prestación deberá asistir obligatoriamente a cursos de formación y, asimismo, aceptar las propuestas de trabajo que le lleguen. En España, los autónomos tienen derecho a una prestación por cese de actividad, si se ha cotizado para ello, y que suele ser escasa.

Además, Macron ha pensado en reformar el sistema de cotizaciones y “universalizarlo” igualmente. De esta forma, todas las cotizaciones de todos los afiliados al sistema otorgarán los mismos derechos, independeniente de cuál sea el tipo de trabajador. En nuestro país, existen varios regímenes de cotización a la Seguridad Social.

Por fin, el nuevo presidente ha prometido relanzar un sector muy potente en el país, pero actualmente en declive, como es la agricultura. El campo francés recibirá 5.000 millones de euros en los próximos cinco años.

Ser autónomo en Francia

 

Una gran ventaja de los autónomos en Francia es que durante el primer año de actividad no se cotiza o se paga una mínima tasa. Es a partir del segundo año cuando se empieza a pagar. Y se empieza fuerte, pues hay que hacer frente a: cotización social general (CSG-CRDS), enfermedad, maternidad, ayudas familiares, formación profesional, invalidez y fallecimiento y jubilación básica. Hasta tres organismos diferentes reciben estas cotizaciones (la equivalente a la Seguridad Social, una mutua y el dedicado a gestionar la jubilación). La contrapartida es que el autónomo francés está altamente protegido ante cualquier contingencia.

Las cotizaciones pueden abonarse al mes o al trimestre y la cuota varía en función de la cotización.

Para pequeñas empresas o autónomos artesanales, comerciales o liberales, los trámites iniciales son bastante sencillos.

Los autoentrepreneur

 

Una figura existente en Francia es la del autoentrepreneur, que no coincide exactamente con la del emprendedor español. Está pensada para aquellos trabajadores que deciden poner en marcha un negocio de modo complementario, aunque trabajen por cuenta ajena o estén en el paro. Sólo se tiene esta consideración si no se superan los 32.100 euros anuales en actividades de prestación de servicios domésticos, bricolaje, mantenimiento y profesionales liberales no colegiadas y los 80.000 euros en actividades comerciales.

Este colectivo está exento de cobrar el IVA en las facturas, aunque sí lo debe abonar como cualquier ciudadano al comprar el equipamiento necesario para su actividad. Como tampoco está obligado a hacer la declaración de la renta por su actividad, no podrá deducirse ni gastos ni el IVA, ni siquiera el abonado en el equipamiento.