Los autónomos exigen al Gobierno diálogo para reformar el sistema de pensiones

Desde que compareciesen en la Comisión del Pacto de Toledo, el pasado diciembre, no se ha convocado al colectivo para debatir sobre temas tan cruciales como la subida anual de cotizaciones.
Los autónomos exigen al Gobierno diálogo para reformar el sistema de pensiones

Las pensiones han vuelto a unir a las dos asociaciones de autónomos con mayor representación a nivel nacional. ATA (Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos) y UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) han plantado cara al Gobierno y exigen que se convoque una mesa de diálogo en la que se traten temas tan cruciales para el colectivo como la reforma del sistema de pensiones.

Mediante un comunicado conjunto ambas organizaciones han expresado su malestar ante la falta de diálogo con los autónomos tanto en materia de la reforma del sistema de pensiones como en la reciente subida de cotizaciones sociales “no entendemos cuál es el motivo por el que el Ministerio no dialoga con los autónomos con temas tan sensibles”. Más aún cuando la Ley de Seguridad Social, en su disposición decimoséptima, obliga a ello “la subida de cada año, así como cualquier modificación sustancial del sistema se debatirán con carácter previo en el marco del diálogo social con las organizaciones empresariales y sindicales más representativas, así como con las organizaciones profesionales de trabajadores autónomos más representativas y se consultará al Consejo Estatal del Tabajo Autónomo”. A fecha de hoy, si bien se ha citado en sendas ocasiones tanto a patronal como a sindicatos, ni ATA ni UPTA habrían recibido la llama de Empleo al efecto.

La pasividad del Ejecutivo en su forma de actuar para con el colectivo contrasta con el discurso que desde el presidente, Mariano Rajoy, hasta el elenco de ministros de su Gabinete vienen defendiendo incluso antes de que arrancase la legislatura. De hecho la propia ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, en una entrevista concedida a AyE afirmaba que “los representantes de los trabajadores autónomos están en todas las mesas de diálogo social sobre los asuntos que les afectan directamente. Y son consultadas en relación con las políticas de empleo y Seguridad Social con asiduidad […] no vamos a prescindir de su colaboración”. Ante esta aseveración cabe destacar que, en la comparecencia de la ministra de Empleo el pasado viernes en el Congreso de los Diputados bajo el marco del Pacto de Toledo, no se hizo mención alguna al Régimen de Autónomos, ni por parte de Báñez ni por la de los diputados de los distintos grupos.

Déficit de 7.000 millones

 

Definir un marco de actuaciones consensuadas con el Gobierno que mejoren la protección social del colectivo es una de las demandas históricas del colectivo. Además poner en marcha determinadas políticas tendría una vertiente macroeconómica: acabar con el déficit. De los más de 9.700 millones de euros de agujero en el sistema 7.000 de ellos, o lo que es lo mismo, cerca del 75% del déficit total de la Seguridad Social, corresponderían al RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos).

A este respecto y, amén de la necesaria subida de cotizaciones, sobre la que hay consenso en el fondo no así en las formas (ATA defiende incrementos del 3% anual para todas las bases y UPTA aboga por duplicar éstas a los autónomos con ingresos superiores a 60.000 euros anuales y cotizan por la mínima) el colectivo baraja otras medidas. La organización que preside Lorenzo Amor, planteó en el Congreso una batería de medidas para con las que el sistema ingresaría 7.200 millones de euros adicionales. Entre ellas que los autónomos puedan deducirse la cuota de en el Impuesto de Sociedades, con la que se ingresarían más de 1.500 millones de euros; el destope de la base máxima de cotización para los autónomos mayores de 47 años, que aportaría otros 1.100 millones de euros al sistema; o incorporar una cuota reducida para aquellos trabajadores del Régimen General que trabajen ocasionalmente por cuenta propia con ello la Seguridad Social se embolsaría 900 millones de mínimo cada año.

Lío con las cotizaciones

 

Tampoco se ha consultado al colectivo acerca de la subida de las bases de cotización para el ejercicio de 2017. A este respecto la orden de cotización congela la subida de las bases mínimas para el colectivo a la espera de presupuestos. No así las de las máximas ni las de los societarios y de aquellos que durante el pasado ejercicio contaban con 10 o más empleados a su cargo. Las primeras se incrementan en la misma proporción que las del Régimen General, esto es, un 3%. Las segundas salen peor paradas.

El 8% de subida de salario mínimo interprofesional (SMI) arrastra al colectivo de autónomos que funcionan bajo una fórmula jurídica o son empleadores de más de una decena de trabajadores. Una carga más en la mochila que, en palabras de Lorenzo Amor “será una subida de costes y dañará la creación de empleo”. La decisión tampoco se consultó y desde ATA ya han trasladado su malestar y piden que la actualización se desvincule del SMI.

Estas tres cuestiones no serán las únicas a debatir y consensuar en la mesa que reclama el colectivo. Cotización a tiempo parcial, formación y reforma de la Ley del Estatuto del Trabajador Autónomo (LETA) serán otros temas a afrontar en unos encuentros para los que hay buenas palabras y ante los que faltan los hechos.