La crisis ha golpeado con menos dureza a los profesionales más tecnológicos
La pandemia no ha afectado a todos los negocios por igual. De hecho, algunos autónomos podrían salir incluso reforzados de esta crisis. Son trabajadores por cuenta propia de varios sectores pero todos ellos se mueven en el mundo de las nuevas tecnologías. Sobre todo los freelancers especializados en digitalización.
Si bien la emergencia sanitaria ha sido un golpe para la mayoría de los negocios de nuestro país, hay algunos que saldrán reforzados de esta crisis. Son autónomos de diferentes sectores pero especializados en la digitalización y las nuevas tecnologías. Tanto es así, que el 63% de estos ‘freelance’, consideran que esta situación podría suponer una oportunidad para ellos, al incrementar el número de proyectos en sus sectores tanto a corto como a largo plazo, por la necesidad de digitalizarse de los negocios para los que trabajan.
Un estudio llevado a cabo por la plataforma Malt junto a la de Boston Consulting Group reveló cómo los efectos económicos causados por la pandemia han sido desiguales en función de cada sector, pero especialmente de cada actividad. “Se ha comprobado como aquellos relacionados con el mundo online y las nuevas tecnologías han sido los menos afectados por los estragos económicos del Covid-19”, apuntaron desde la web Malt.
Los expertos en tecnología han incrementado hasta un 50% su trabajo
Según este estudio, los ‘freelance’, trabajadores independientes, sin personal a cargo y cualificados en el sector digital con un alto nivel de especialización, han sido los que mejor parados han salido de la crisis de estos meses. Además, los que no tenían una relación tan estrecha con las nuevas tecnologías, han tenido que dar un giro hacia la digitalización. Las propuestas de proyectos y nuevas empresas en estos campos han superado ya niveles anteriores a la crisis, con incrementos del 40% y del 50%.
Según el informe de estas plataformas el tejido de expertos en digitalización en España que se dedican de alguna manera -a veces a tiempo parcial- a estas actividades se conforma por más de 750.000 profesionales . El colectivo supone una fuerza laboral en auge que ha crecido un 40% en la última década en nuestro país. El 97% de estos profesionales, cuya edad media es de 40 años, sabe lo que es trabajar como asalariado para una empresa. Sin embargo, el estudio asegura que una amplia mayoría - el 73% del total- no está dispuesta a volver a ese modelo de trabajo, y apuesta por ser trabajador por cuenta propia.
Tanto los expertos en habilidades tecnológicas como los desarrolladores de metodologías de trabajo en el sector tecnológico (fundamentalmente plataformas de gestión de pedidos, clientes o cobros) son los que parecen haber sufrido un menor impacto tras la pandemia. Tan sólo el 42% señala haberse visto afectado.
“En un contexto como el actual, una planificación de talento que incorpore profesionales freelance permitirá a las empresas adaptarse a los entornos corporativos. Este tipo de profesionales digitales aportan gran valor a las organizaciones”, explicó Pablo Claver, responsable del equipo de Boston Consulting Group.
Algunos freelance sí se han visto afectados por la crisis
No obstante, a pesar de su optimismo, la crisis también ha impactado en los autónomos dedicados a las nuevas tecnologías. De hecho, el 63% de los consultados afirmó que, durante la emergencia, ha visto cancelado al menos uno de los proyectos en los que estaba trabajando. Además, uno de cada cuatro de estos profesionales aseguró también haber perdido al menos el 50% de sus ingresos por el Covid-19.
Es cierto que los trabajadores independientes han experimentado una desaceleración de su actividad en los últimos meses. Pero, "justo antes del fin del confinamiento, comenzamos a observar cómo retomaban sus proyectos. Las organizaciones se están dando cuenta de que, ahora más que nunca, necesitan las habilidades y destrezas de los expertos freelance”, explicó Vincent Huguet, CEO y cofundador de Malt.
Al otro lado de la balanza, los profesionales más relacionados con disciplinas creativas como la comunicación y diseño u organización de eventos, han sido los sectores que más han sufrido los estragos económicos de la crisis sanitaria. El diseño ha experimentado una caída del 77% en su facturación, mientras que el ámbito de la comunicación se sitúa con un descenso del 73%.
