Importancia de la experiencia personal y de la marca

¿En qué se fijan los bancos para financiar un proyecto de franquicia?

Los bancos realizan una serie de recomendaciones a los autónomos que quieran financiación para un proyecto de franquicia. Aquí te los contamos.

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¿En qué se fijan los bancos para financiar un proyecto de franquicia?

Los emprendedores se animan cada vez más a trabajar por cuenta propia bajo una enseña. La franquicia les proporciona la independencia de trabajar como autónomos, a la vez que tienen el respaldo de una compañía que les guía y ayuda. Según datos del último informe de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), a cierre de 2018 había 77.397 locales de franquicias funcionando en España. De éstos, 20.644 pertenecían a la propia marca y los 56.753 restantes a franquiciados autónomos.

En total, el número de locales de franquicias funcionando en España aumentó un 4% en comparación con 2017; un incremento producido en gran medida por la apertura de locales de franquiciados (un 5,3%, frente a un incremento del 0,2% de las inauguraciones de locales propios de la enseña). Para poner en marcha una franquicia en España es necesario realizar una inversión inicial. Éstas varían en función de la enseña -marca de la franquicia- escogida, y en el mercado se pueden encontrar algunas que piden un capital inicial de 5.000 euros, y otras para las que es necesario un desembolso de hasta 500.0000 euros.

El director de análisis de riesgos del Banco Santander, Jesús Álvarez, explicó durante la ‘I Jornada sobre franquicias: Oportunidades en el mundo de las franquicias’ celebrada por la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE) , las claves para obtener financiación. La primera y más importante, es que “a la hora de avalar el proyecto de un franquiciado, nosotros nos fijamos mucho en él, en su propia experiencia”.

Recomendaciones para pedir financiación

Este experto señaló que conocía casos en los que la solvencia de una persona no era muy alta pero que, al final, terminaron financiando su proyecto de franquiciado por la trayectoria demostrada. “Tenemos en cuenta si ha estado relacionado con la actividad, si ha trabajado con anterioridad en negocios del sector e, incluso, si ha sido empleado de la propia franquicia. Ésto puede ser muy valioso” afirmó.

Otro de los aspectos en los que se fijan los bancos es de quién es el modelo de negocio, es decir, cuál es la enseña con la que el franquiciado quiere abrir su negocio. “Somos un poco más reticentes a avalar proyectos que pertenecen a marcas nuevas, porque no tenemos opción a valorar la consistencia de la red y verificar que el resto de sus locales están funcionando” señaló Álvarez.

Para este experto, emprender bajo la franquicia elimina riesgos tanto para el emprendedor, como para la propia entidad bancaria, “pues, a veces, ofrecemos financiación bajo circunstancias que en otro contexto no se ofrecerían, por la seguridad que aporta la franquicia”. De hecho, apuntó que la tasa de morosidad que tienen en préstamos concedidos a proyectos de franquicia “es menor”, que la concedida a cualquier otro tipo de negocio.

También el director de análisis de riesgos del Banco Santander, aconsejó a los emprendedores que estuviesen interesados en la franquicia como segunda oportunidad, es decir, los que vuelven a emprender tras haber fracasado, que hubiesen cerrado bien su negocio anterior y, sobre todo, no tuviesen deudas con sus antiguos bancos. “Nosotros -las entidades financieras- nos fijamos en cómo fue su relación con los otros bancos, si tuvieron algún problema o deuda con ellos”.

La franquicia como segunda oportunidad

Reemprender en la franquicia es una opción por la que están apostando los autónomos que tuvieron que cerrar. Así lo explicó Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), durante su discurso en la Jornada: “la franquicia es una inversión de futuro y para muchos autónomos se está convirtiendo en una verdadera segunda oportunidad”.

Por su parte, Fermín Albadalejo, presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE) y como vicepresidente de ATA, señaló que la fórmula de la franquicia se había convertido “en un modelo de negocio que había cogido impulso entre los jóvenes emprendedores, por su garantías y seguridad”. Y precisamente, es la seguridad que ofrece formar parte de una marca que funciona  “lo que les hace dar el empujón final”.