Fechas clave

En noviembre los autónomos tendrán que devolver los impuestos y las cuotas aplazadas por el coronavirus

En noviembre vencerá el plazo para abonar tanto los impuestos como las cuotas aplazadas a raíz del COVID-19. Hacienda y Seguridad Social cargarán a finales mes las deudas pendientes por aplazamientos y moratorias. 
impuestos-pluriactividad-autonomos
En noviembre los autónomos tendrán que devolver los impuestos y las cuotas aplazadas por el coronavirus

En el mes de noviembre, los autónomos tendrán que abonar los impuestos y cotizaciones que aplazaron a raíz de la pandemia. En los primeros meses de crisis sanitaria, el Ejecutivo puso en marcha varias ayudas para paliar el impacto del virus en el colectivo. Entre ellas, la posibilidad de aplazar algunas obligaciones con Hacienda y Seguridad Social, como son las autoliquidaciones del primer trimestre fiscal o el pago de la cuota de los meses de mayo, junio y julio.

Ambas medidas sirvieron para dotar de liquidez en los momentos más críticos a los trabajadores por cuenta propia.  Sin embargo, y aunque muchos todavía están lejos de recuperarse, estas ayudas han finalizado y los autónomos tienen que empezar a hacer frente a sus obligaciones aplazadas.

Por un lado, los trabajadores por cuenta propia que aplazaron los pagos que tuvieran pendientes entre enero y marzo de autoliquidaciones como el IVA o el IRPF fraccionado -que se tenían que haber pagado en mayo- tenían sólo hasta el pasado 20 de septiembre para devolver la deuda sin intereses. Ahora, pasado este plazo, tendrán hasta el 20 de noviembre para hacer frente a su deuda, esta vez con intereses de demora.

En segunda lugar, los autónomos que se acogieron a la moratoria de seis meses de las cuotas a la Seguridad Social empezaron en agosto a pagar de nuevo sus cotizaciones y, a partir de noviembre, a su cuota habitual se empezarán a añadir las cuotas aplazadas durante los meses de pandemia. 

Hasta el 20 de noviembre para devolver los impuestos sin sanción 

El Gobierno dio la posibilidad en mayo de realizar un aplazamiento de las declaraciones del primer trimestre y pagar estos impuestos, en vez de ese mes, seis meses después, es decir, el 20 de noviembre. Según las últimas cifras que hizo públicas la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, esta medida habría beneficiado a 638.652 autónomos y pymes. 

Estos autónomos pudieron aplazar los pagos que tuvieran pendientes entre enero y marzo con las retenciones e ingresos a cuenta de los modelos de retenciones trimestrales a trabajadores o empresarios (111); de arrendamiento o subarrendamiento de inmuebles (115). También los Pagos fraccionados del IRPF (modelo 130 y 131), los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades (modelo 202) y la declaración trimestral de IVA (modelo 303). 

A diferencia de los aplazamientos habituales, éstos tenían la peculiaridad de que se concedieron automáticamente con un plazo de seis meses,  los cuatro primeros sin intereses. Así pues, hasta el pasado 20 de septiembre los autónomos tenían la posibilidad de devolver la deuda de sus declaraciones del primer trimestre, como IVA o Impuesto de Sociedades, por vez primera, sin tener que pagar ningún tipo de recargo. 

Si no solicitaron la carta de pago y cancelaron sus impuestos pendientes de forma parcial o total antes de que pasasen los cuatro primeros meses, el próximo 20 de noviembre  la Agencia Tributaria cargará en su cuenta el importe total de la deuda aplazada. Según explicaron desde la Administración, "el interés de demora es del 3,75% y gira sobre los días que pasan entre el fin del periodo voluntario (20 de mayo) y el momento del vencimiento, dependiendo de cuándo pague, si en el quinto o sexto mes". 

También en noviembre se cobrarán las cuotas aplazadas

La moratoria de seis meses en el pago de la cuota de autónomos a la Seguridad Social fue una de la medidas que se implementaron durante el confinamiento y que terminó en agosto. Este aplazamiento de las cotizaciones sólo estaba disponible para los trabajadores por cuenta propia en los meses de mayo, junio y julio.

Por lo que, a final de agosto, empezaron a pagar su cuota a la Seguridad Social con normalidad. Pero, además de eso, deben tener en cuenta que, a partir de noviembre, a su cuota habitual se sumará la devolución de las cotizaciones aplazadas 

Así, los que solicitaron la moratoria en mayo la tendrán que pagar en noviembre; los que lo hicieron en junio en diciembre y los de julio en enero. Aunque parezca que todavía hay mucho tiempo, es aconsejable que el autónomo vaya reservando ese dinero, ya que si solicitó la medida en mayo, junio y julio va a tener que hacer frente a un pago de casi 2.000 euros en tres meses.

Por ejemplo, un autónomo que cotice por la base mínima y que solicitase esta medida para el mes de mayo, deberá abonar en el mes de noviembre: 573,5 euros directamente. Si lo solicitó en los tres meses que podía, la cuantía a pagar asciende a 1.710,5 euros.