Los negocios no ingresarán lo suficiente

¿Qué pasará con las prestaciones y ERTE de los autónomos que vuelven a abrir?

El Gobierno ya ha planificado cómo sera la escalada hacia la normalidad de los autónomos en sectores como la hostelería o el comercio. Algunos podrán abrir en las próximas semanas. Sin embargo, temen perder el Cese de Actividad Extraordinario o los ERTEs sin obtener los ingresos suficientes para vivir.

 

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¿Qué pasará con las prestaciones y ERTE de los autónomos que vuelven a abrir?

El Gobierno anunció este martes un plan para la vuelta a la "nueva normalidad", en el que los negocios podrán ir abriendo sus puertas de nuevo, aunque con muchas restricciones. El programa para la desescalada consta de cuatro fases, que irá superando cada provincia o isla española en función de la evolución de la pandemia en su territorio.    

Pareció durante la comparecencia del presidente del Gobierno tras el Consejo de Ministros que el anuncio de la próxima apertura para algunas actividades suspendidas como la hostelería o el comercio, sería un respiro para estos sectores. Lo que se estaba anunciando, tras casi dos meses de Estado de Alarma, es que los negocios iban a poder retomar poco a poco la normalidad.   

Sin embargo, tanto las actividades que estaban suspendidas como las que no, están preocupadas por cómo sobrevivirán a las restricciones durante esta desescalada que podría alargarse varios meses. Por más que el nuevo programa les permita abrir, sus ingresos van a seguir siendo muy reducidos.

Según las estimaciones recogidas en el nuevo plan, los negocios de hostelería y comercio que estaban suspendidos por el Real Decreto de Estado de Alarma podrían volver a funcionar con limitaciones de aforo. En principio, lo que estaría barajando el Gobierno es que, a partir del 11 de mayo, las provincias que se vean capacitadas por la evolución favorable de la pandemia pasaran a la fase 1, en la que se permitiría la apertura del pequeño comercio, excepto en el caso de aquellos que se encuentren localizados en centros comerciales. También se prevé la apertura de terrazas de bares, cafeterías o restaurantes, pero con un aforo restringido al 30%. 

Estas limitaciones podrían hacer que los autónomos que llevan meses soportando perdidas por la paralización de su actividad, vuelvan a su negocio para soportar incluso más pérdidas. Muchos de ellos, en vez de encontrarse aliviados por poder volver a abrir su negocio, están preocupados por que no saben qué sucederá con sus prestaciones y otras medidas, como el ERTE, que les permitían ahorrar costes mientras no obtuvieran beneficios. El problema es que se teme que con la finalización del Estado de Alarma, también se ponga fin a las medidas que les ayudaban a subsistir.

Aunque se les dejara abrir en los próximos días, las restricciones de aforo serían tales que los ingresos no darían para cubrir ni una parte de los gastos."Ahora mismo, tal y como está planteada la desescalada, a los hosteleros no les saldrá rentable reabrir su negocio. Supuestamente, en la fase 1, podrán seguir con los repartos a domicilio y abrir un 30% de su terraza. La cuestión es que no todos los hosteleros tienen terraza y, los que la tienen, no van a poder soportar los gastos fijos y los costes de personal con un aforo tan limitado. Es completamente inviable" explicó Juan José Blardony, Director General de la asociación Hostelería de Madrid.

Según datos de esta misma organización, los costes fijos suponen un 20% del total de gastos de los hosteleros, y los de personal entre un 30% y un 40%. Esto significa que estos autónomos, en principio, podrán abrir en las próximas semanas pero sin poder atender dentro del establecimiento, con sólo un tercio de su terraza disponible-si la tienen- y teniendo que hacer frente al 60% de sus gastos habituales.

La incertidumbre hará que muchos no abran

A unas dos semanas de que algunas provincias entren en la primera fase que dejará a abrir a algunas actividades antes suspendidas, el Gobierno todavía no ha especificado las medidas de seguridad concretas que deberán implementar los negocios, ni si las prestaciones seguirán disponibles para ellos aunque vuelvan a subir la persiana. Por tanto, y a cambio de unos ingresos muy bajos, se podrían quedar sin prestación o sin posibilidad de acceso a medidas como los ERTEs por causa de fuerza mayor. 

En este sentido, el portavoz de la Confederación Española del Comercio (CEC), Carlos Moreno, aseguró que serán muchos los autónomos que opten por no abrir. "En muchos comercios las restricciones serán tales que dejará de salir rentable abrir la persiana. Ciertas actividades tendrán que ir con cita previa, y no sale a cuenta abrir para que un cliente compre un producto  Además, tampoco se sabe si podrán conservar el ERTE o la prestación por cese de actividad extraordinario". 

En realidad, si no lo saben es porque, hasta ahora, no hay una norma que lo especifique. "De momento, el plan de desescalada prevé algunas restricciones y algunas fechas, pero no actualiza en nada las diferentes medidas que estaban en marcha. Por lo tanto, a día de hoy, y a escasos 12 días de que arranque la fase 1, los autónomos todavía no saben qué deberán hacer con sus trabajadores; si podrán seguir con su actividad manteniendo el ERTE; si perderán la prestación por cese al abrir; y qué nuevas medidas tendrán que introducir en sus negocios. La inseguridad es tal que, de momento, la mayoría de autónomos de sectores como la hostelería no se van a arriesgar a abrir sus negocios" explicó Carlos Piñero, Director Jurídico de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). 

¿Habrá prestaciones y ERTEs cuando acabe el Estado de Alarma?

La mayoría de asociaciones y organizaciones representativas de autónomos y empresarios ya han reaccionado al nuevo plan del Gobierno. Se muestran "optimistas pero con moderación". Si bien es una buena noticia que las actividades puedan ir retomando sus ingresos, éstos no serán suficientes para que los autónomos sobrevivan si se eliminan las prestaciones. 

"De momento, lo único que se sabe sobre la prestación por Cese de Actividad extraordinario es que durará hasta el último día del mes que acabe el Estado de Alarma, es decir, hasta el 30 de mayo. Y todavía peor: del ERTE por causa de fuerza mayor, sólo es seguro que durará hasta que acabe dicha causa de fuerza mayor, la cuestión es ¿Cuándo será eso? ¿Cuando acabe el Estado de Alarma? Sea como sea tienen que concretarlo cuanto antes y ayudar a los autónomos?" explicó Carlos Piñero

Según el director del Área Jurídica de ATA, la interpretación que se puede hacer del cese es que durará hasta final del mes de mayo, abra o no la actividad. En todo caso, "no es suficiente. El 30 de mayo la demanda va a ser muy débil todavía y las restricciones muy duras. Si la ley no se modifica, los autónomos podrían quedarse sin prestación y tener que volver a pagar su cuota con unos ingresos muy bajos". 

Si así fuera, si de verdad finalizara la prestación por cese de actividad cuando acabara el mes de mayo, los autónomos sólo tendrían -en el mejor de los casos- unos 19 días para  ingresar lo suficiente como para volver a poner en marcha la actividad sin contar con ninguna prestación y haciendo frente de nuevo a todos los gastos. 19 días en los que los hosteleros, por ejemplo, sólo podrán ingresar con lo correspondiente al 30% de su terraza y lo que ingresen en envíos a domicilio. 

Y aún preocupa más a las asociaciones lo que sucederá con los ERTES. "Estos expedientes por causa de fuerza mayor tienen varias condiciones que van a ponérselo muy difícil a los autónomos. Por un lado, no sabemos hasta cuándo durarán. Si se acabaran con el Estado de Alarma, los negocios tendrían que hacer frente a todos sus costes laborales y a sus gastos fijos a cambio de unos ingresos  demasiado bajos. Tan bajos que, lo más seguro, es que los que abran de aquí a un mes, vayan a abrir a pérdidas. También nos preocupan estos ERTEs porque, si ampliamos el horizonte temporal, el problema no va a ser sólo este mes, sino todo el año. ¿Cómo va a soportar un hostelero las cotizaciones y nóminas de hasta cinco o seis empleados, con el aforo tan limitado, con sus clientes con tantos problemas económicos y con la inseguridad sanitaria que habrá todavía entre los consumidores" explicó el Director de Hostelería Madrid. 

Los autónomos se sienten inseguros. No saben qué va a suceder con ellos, con sus empleados, con sus ingresos y con sus prestaciones. "No saben nada porque nada de esto está definido". Además, y aunque conservaran la prestación, la rentabilidad en estas primeras fases de desescalada será tan reducida que a la mayoría no les merecerá la pena reabrir.  Eso, en el caso de que puedan planteárselo porque, por ejemplo, "en Madrid de 19.000 negocios de hostelería que hay, tan sólo 5.000 tienen terraza. Así que, aunque quisieran tampoco podrían abrir durante la fase 1 de la desescalada" explicó el presidente de la asociación de hosteleros madrileños. 

¿Y qué pasará después del 30 de mayo? 

A día de hoy, y según el director del Área Jurídica de ATA, a partir del 30 de mayo, si no se modifica la ley, los autónomos dejarán de tener derecho a la prestación por Cese de Actividad Extraordinario y tendrán que volver a hacer frente a sus cuotas de la Seguridad Social. "Esperamos que se modifique, que haya durante un tiempo una prestación que acompañe a los autónomos en sus reaperturas, porque arrancar no va a ser fácil y menos todavía con la situación económica que hay ahora: sin turismo exterior y con una demanda interna muy debilitada". 

Desde los diferentes sectores esperan que no se deje a un lado a los autónomos, que se conserve la prestación para que puedan seguir percibiendo ingresos porque "está claro que, con las restricciones que hay, la mayoría van a pasar semanas e incluso meses sin ningún tipo de rentabilidad" explicaron desde Hostelería Madrid. 

La asociación de hosteleros de la capital está elaborando un comunicado para solicitar al Gobierno varias medidas de apoyo al sector en esta desescalada hacia la "nueva normalidad". Entre ellas, estaría flexibilizar todas las medidas para que no se acaben cuando termine el Estado de Alarma -o en el mismo mes-, y especialmente los ERTEs. Desde la organización están negociando con el Gobierno la posibilidad de que los autónomos y pequeños empresarios del sector puedan ir recuperando a sus trabajadores del ERTE de forma progresiva y no de golpe. 

Es lo mismo que solicitan desde otras organizaciones como la Confederación de Organizaciones Empresariales (CEOE) o ATA. Para que los autónomos y empresarios no se vean de un día para otro con la obligación de afrontar las cotizaciones sociales y nóminas de uno o varios empleados, sin tener prácticamente ingresos, se está proponiendo que también haya una desescalada en  las medidas. Que, poco a poco y conforme se recupere la actividad, se vaya retrociendo en estas medidas y prestaciones extraordinarias, pero de forma progresiva. "No puede ser que se elimine todo el apoyo mientras el consumo y la economía están bajo mínimos. Así, será imposible que se recuperen los negocios" concluyeron desde la asociación de hosteleros madrileños.