Hay discrepancias soterradas

¿Quién está detrás de la larga huelga de los taxis en Madrid?

La huelga indefinida de los taxistas en Madrid entra en su segunda semana. Cinco son las asociaciones convocantes, y no todas están de acuerdo con los métodos utilizados por las otras. Están unidas pero no tanto ¿De quiénes se trata?

¿Quién está detrás de la larga huelga de los taxis en Madrid?

Tras una semana larga de huelga indefinida del taxi en Madrid el sector parece más unido que nunca. De cara a la opinión pública no hay fisuras, sino una unidad de acción entre los convocantes. Hasta ahora, ni un solo taxista ha tirado la toalla y anuncian que seguirán los paros a pesar del cansancio después de jornadas de movilizaciones y de las pérdidas económicas que están sufriendo por no trabajar.

Sin embargo, no hay una sola asociación representativa del taxi madrileño. Hay cinco. La proliferación de licencias de VTC, la falta de regulación de los vehículos que las utilizan -casi todos de las plataformas Uber y Cabify- y la actitud de las diversas administraciones públicas que se van pasando la pelota unas a otras porque son de distinto color político (Gobierno central del PSOE, Comunidad de Madrid del PP y Ayuntamiento de la capital de Ahora Madrid) son los tres grandes puntos que unen a los taxistas en estas movilizaciones ya que, en el fondo, vienen a representar el temor compartido por todo un sector.

Pero bajo la superficie hay discrepancias. Lo que tarden en salir a la luz, no se puede predecir. Violencia verbal de los líderes y politización de las protestas y las declaraciones están minando un proyecto que empezó muy sólidamente.

Asociaciones convocantes

Las asociaciones convocantes de la huelga en Madrid son cinco. Son las que se describen a continuación, en orden de antigüedad:

  • Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPTM). Nació en 1977, el mismo año que se pudieron constituir asociaciones en virtud de la Ley de regulación el derecho de asociación sindical que puso fin a la prohibición de las mismas en el franquismo. Su actividad dio lugar a que los taxistas madrileños consiguieran dos días libres a la semana o que exista un área metropolitana alrededor de la capital para ampliar los servicios a los clientes. Se definen como “una organización independiente, democrática y sin ánimo de lucro” en la que están agrupados 5.000 profesionales del taxi. A sus vehículos se les puede contratar a través de la popular Tele Taxi. Su presidente es Julio Sanz, quien lo es asimismo de la Confederación de Taxistas Autónomos de España (CTAE), creada en 2016, y que agrupa a 20.000 profesionales del taxi.
  • Asociación Gremial del Auto Taxi de Madrid (AGATM). Es la segunda más antigua pues se creó como tal en 1979, aunque sus orígenes hay que buscarlos décadas antes pues fue una transformación de una agrupación provincial ya existente. Hoy por hoy es la más numerosa y representa a 10.000 taxistas de toda la Comunidad de Madrid. Su presidente, Miguel Ángel Leal, lo es también de la Federación Española del Taxi (Fedetaxi), constituida en 2012 por asociaciones provinciales y autonómicas de toda España, y que representa a 40.000 profesionales.
  • Asociación Madrileña del Taxi. Se creó en el año 2005, año en que la Comunidad de Madrid aprobó el Reglamento del Servicio de Transporte Público Urbano en Automóviles de Turismo para regular a los vehículos con licencias municipales (los ayuntamientos son la Administración pública encargada de otorgar las licencias). Los fundadores de esta asociación tenían la idea de luchar por una regulación más moderna que la que emanaba del Reglamento de 1979 y así lo hicieron constar al constituirse. Sus socios no se sentían representados por las otras ya existentes. Actualmente, son unos 1.500 socios.
  • Élite Taxi Madrid. Esta asociación es mucho más reciente que las mencionadas. El origen está en Barcelona donde Élite Taxi es la mayoritaria en el sector. Se constituyó por el rechazo a las plataformas de VTC aunque, actualmente, en la lucha contra éstas afirman que quieren superar la reivindicación de que se cumpla la proporción legal de una licencia de VTC por cada 30 de taxi y exigir más limitaciones a Uber y Cabify, por ejemplo, la precontratación con horas de antelación a sus vehículos. De hecho, son los artífices de la norma del Gobierno catalán sobre la obligatoriedad de precontratar un vehículo de Uber y Cabify con una hora de antelación. Se caracterizan por su alta politización, ya que además de defender los intereses de los taxistas organizan muchos actos para que éstos estén al tanto de cuestiones de la actualidad nacional e internacional y a los que suelen acudir políticos de Podemos en exclusiva.
  • Plataforma Caracol. Es la más moderna de todas las asociaciones porque nació en 2017. Su nombre se debe a que el primer acto que organizaron en protesta por la proliferación de licencias VTC en Madrid, sus asociados “iban a paso de caracol” como medida de presión. Tanto los líderes de esta Plataforma como los de Élite son los que están ejerciendo, junto a Julio Sanz de la Federación Profesional, de portavoces de la huelga indefinida. De hecho, el líder de Élite Taxi Barcelona, Tito Álvarez, ha viajado a Madrid y lidera protestas de sus colegas madrileños con gran atención mediática. 

Las fisuras

Entre las cinco, hay dos discrepancias principales que por el momento permanece soterradas públicamente. No todas las asociaciones de taxistas están a favor de la politización del conflicto. Lo ilustra el hecho de que los portavoces de la huelga, ninguno de la asociación mayoritaria, llevan toda la semana atacando a una de las dos administraciones con competencias sobre regulación de los vehículos con conductor: la Comunidad de Madrid gobernada por el popular Ángel Garrido. Si bien es ésta ahora la encargada en la materia debido al Real Decreto-Ley del pasado septiembre, por el cual las competencias pasaban del Gobierno central a las autonomías, hay un tercer actor al que al menos tres de las asociaciones convocantes nunca mencionan: el Ayuntamiento presidido por Manuela Carmena. Los ayuntamientos han sido siempre los competentes en cuanto a las condiciones en la que los taxistas ejercen su trabajo en los municipios y en cuanto a las inspecciones y control de éste y del resto de vehículos de transporte de viajeros. Solo cuando el pasado viernes 25 Garrido y Carmena anunciaron juntos que iban a presentar una propuesta a los representantes de los taxistas, se unieron todas las voces para rechazarla. Pero el grueso de los ataques sigue dejando en un segundo plano al Ayuntamiento de la capital como Administración implicada.

La segunda gran discrepancia es el uso de la violencia o de la presión desmedida. Si bien es cierto que ninguna asociación está incitando a que se cometan actos violentos, no todos los convocantes ven con buenos ojos el lenguaje que algunos líderes están empleando para animar a los huelguistas por incendiario. Una de las convocantes AGATM quiso convertir el pasado domingo la concentración en el recinto ferial de Ifema, donde se celebraba Fitur, en un acto reivindicativo festivo al que acudieran las familias de los huelguistas para contrarrestar la mala imagen que algunos de éstos están ofreciendo.