DE INDOCUMENTADO A EMPRESARIO

“Ser inmigrante fue mi mayor obstáculo para emprender”

En 2001, Roberto Orquera llegó a España desde Ecuador como un inmigrante sin documentación en busca de una vida mejor.

Roberto Orquera, de limpiabotas a empresario.
Roberto Orquera, de inmigrante sin papeles a empresario de éxito.
“Ser inmigrante fue mi mayor obstáculo para emprender”

Gracias a los conocimientos que le enseñó su padre sobre el oficio de limpiabotas y a las ganas de luchar pudo en 2008 hacerse autónomo y poco a poco evolucionar hasta crear su propia empresa en Madrid hace tres años.

Roberto Orquera puede decir que se ha hecho a sí mismo y que su empresa es fruto del esfuerzo y el trabajo diario, de la constancia y del conocimiento y la profesionalidad de sus servicios. Su empresa tiene en plantilla a diez trabajadores y se encuentra en dos de las zonas más prestigiosas de Madrid.

“Somos 100 % artesanos y además nos dedicamos a vender productos de limpieza de calzado, así como a su reparación.  Nuestro último proyecto es hacer zapatos a medida. Estamos en un mercado bastante complejo, pero lo artesano se ha perdido y estamos aquí para recuperarlo poco a poco”, comenta este emprendedor.

-¿Cómo nació Orquera?

-Vine de Ecuador, de dónde soy, en 2001. Llegué a España como llega mucha gente, sin documentación, para trabajar de lo que se pudiera, aunque mi padre me había enseñado desde los tres años el oficio y tenía conocimientos. En mi país tenemos como tradición limpiarnos los zapatos a menudo, pero me fijé en que en España no existe esa cultura por lo que, junto a mi padre me puse en la calle a limpiar zapatos.

El primer día no tuve ni un cliente, el siguiente uno solo, y así comencé, luego vas demostrando lo que sabes, vas marcando una diferencia con una técnica que aquí no utiliza nadie, el limpiado con dos cepillos, con productos internacionales de calidad.

-¿Cómo se da el salto de limpiar zapatos en la calle a montar su propia empresa?

-Empecé en la calle y es muy duro porque Madrid tiene las cuatro estaciones y el invierno es muy frío, por lo que los clientes no venían, así que comencé a ir a sus trabajos, a sus casas, a restaurantes, peluquerías… Me instalé en el local en el que estamos ahora en el Centro Comercial Jardín Serrano porque su dueño, amigo de mi padre, se jubiló. Pasamos una selección de los posibles candidatos para continuar con el local, y me tocó a mí.

-¿Cuántos trabajadores tiene  Orquera?

Somos unos diez trabajadores entre dependientes, limpiabotas, diseñadores, montadores… Creo que somos la única tienda de Madrid que se dedica a esto y que cuida tanto y tan al detalle su trabajo. Solo no hubiera podido hacer esto, me ha ayudado mucha gente.

-¿Qué presentó en la feria de MOMAD Shoes?

-Expusimos nuestros zapatos. Se trata de un proyecto que llevamos desarrollando durante un año y medio porque todo está hecho a medida y de forma artesanal. Soy muy exigente en mi trabajo y para mí es un proyecto importante presentar en MOMAD mi colección, pero también llevamos información sobre cómo cuidar el calzado.

-¿Qué materiales utiliza en los zapatos?

-Ahora mismo trabajamos con una fábrica francesa a la que pedimos la piel, lo bueno es que llega curtida, pero no son pieles que llevan guardadas tiempo. Todo tiene que ir de la mano para que sean unos zapatos cien por cien artesanos.

-¿Qué perfil tiene el cliente de Orquera?

-Son hombres con un poder adquisitivo medio alto, no tenemos ninguna edad determinada, pero es cierto que el calzado artesanal tiene un coste. Cada vez el mercado está abaratando más el coste de los productos por la competencia y eso me perjudica, porque no te vas a gastar 80 euros en una reparación para un zapato que cuesta 100.

-¿Qué obstáculos se ha encontrado?

-Ser inmigrante ha sido el principal de mis obstáculos porque me ha cerrado muchas puertas, tengo muchas inspecciones, por ejemplo. Pero hemos salido adelante con todo.

-¿Qué proyectos futuros contempla?

-Me gustaría crecer, pero creo que es un oficio en el que tienes que estar pendiente de todo y es muy complicado que muchas personas trabajen y funcionen de la misma manera. Hay proyectos de hacer franquicias en un futuro pero hay que estudiarlo todo bien, de momento lo tengo en mi cabeza. De momento, quiero crecer en el mercado nacional y no tengo previsto expandirme a nivel internacional.