El PP exige ‘un sustituto’ para bonificar la maternidad de las autónomas

La enmienda que ha presentado el PP a la Ley de Medidas Urgentes afecta también a paternidad, adopción y acogimiento. Los populares piden, además, que se supriman las ayudas por reincorporación a la actividad.
El PP exige ‘un sustituto’ para bonificar la maternidad de las autónomas

Falta de congruencia y conocimiento. Esa es la opinión que, en líneas generales, han vertido los autónomos tras la lectura de las dos enmiendas relativas a la conciliación de la vida familiar y laboral del colectivo, y que el Partido Popular presentaba el pasado día 7 a la Ley de Medidas Urgentes propuesta por Ciudadanos.

En el título III del texto del 15 de noviembre, la formación de Albert Rivera, se explicita, que la bonificación del 100% de la cuota de cotización a los trabajadores por cuenta propia en periodo de baja por maternidad, paternidad, adopción u acogimiento se aplique “sean o no suistituidos”.

Pues bien, tras haberse demorado el inicio de la tramitación en casi un mes (consecuencia de las tres prórrogas al periodo de enmiendas solicitadas también por PSOE), el PP propone que para que esta ayuda sea de aplicación “se debe mantener el requisito de sustitución del trabajador”. Cortapisa a la que hay que añadir la oposición frontal a la iniciativa de Ciudadanos de que a las madres que se reincorporen a su actividad tras el correspondiente periodo de baja se les bonifique, igualmente, el 100% de la cuota durante los doce meses siguientes.

Si bien en el primero de los casos no justifican la exigencia de sustituto, en el segundo, la causa mortis sería la discriminación positiva que supondría la medida para las trabajadoras del RETA frente a las del Régimen General. “Lo que se hace en esta proposición de Ley es reponer únicamente para las trabajadoras por cuenta propia un incentivo que las trabajadoras por cuenta ajena van a seguir sin disfrutar”, recoge el documento de 63 páginas. Es decir, o hay café para todas o se continúa sin sobremesa.

Cabe recordar que esta bonificación se derogó, para ambos regímenes, en 2012 con la entrada en vigor de la Reforma Laboral. A este respecto, el Ejecutivo de Mariano Rajoy consideró que, puesto que no está permitido despedir durante los periodos de baja por maternidad y la reincorporación es obligada por derecho, no tenía sentido incentivar cumplimiento de la Ley. En el caso de los autónomos que retoman la actividad tampoco, aludiéndose a que en ese momento se recupera el volumen habitual de ingresos.

A este respecto, en declaraciones a AyE, fuentes de Ciudadanos afirman “lucharemos porque se lleve adelante ambas medidas”. Y tienden la mano a Gobierno y Partido Popular “estamos abiertos a que la medida se amplíe, ¡ójala! Vamos a apoyar todo lo que tenga que ver con mejorar la conciliación e incentivar la maternidad tanto de las autónomas como de las trabajadoras del Régimen General”.

Falta de conocimiento

 

“Una vez más se demuestra que algunos políticos no conocen la realidad de los autónomos y la falta de diálogo con nuestro colectivo”, se lamenta Lorenzo Amor, presidente de ATA (Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores de Autónomos). Y es que “se olvidan de que hay actividades que no permiten tener sustituto”. Es el caso de farmaceúticos, abogados, fisioterapeutas, etc… Profesiones todas éstas que requieren de titulación, certificados o formación específica para las que no es sencillo encontrar personas que cubran el puesto por periodos de 16 semanas en el caso de las mujeres y cuatro en el de los hombres.

Por otra parte, están los costes laborales. La bonificación se calcula sobre la base de cotización obligatoria, es decir, 893,10 euros, siendo el ahorro de unos 260 euros mensuales. Si bien el monto de cotización del sustituto sujeto a contrato de interinidad está bonificado también en su 100%, solamente con el pago del salario el autónomo tendría que asumir un sobrecoste, aproximado, de 400 euros -calculado sobre el SMI-. A ello se añade el riesgo de que “se lleven a tu cliente”, apostillan desde ATA, lo que hace que muchos trabajadores del colectivo se lo piensen dos veces antes de dar el paso de ser sustituídos.

Coste pírrico

 

El argumento de la supuesta carga que generarían ambas medidas para las arcas de la Seguridad Social no es compartido por los autónomos. Eduardo Abad Sabaris, secretario general de UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) argumenta que “con las tasas de natalidad actuales el coste es pírrico”. En este sentido considera que “no obedece a la lógica no llevar a efecto medidas de tan poco calado económico. Son un recurso vital para el colectivo”. Cosa distina sería que la decisión tuviese que ver con el hecho de que algunas comunidades autónomas cuenten con programas de incentivos en esta materia “entonces tendría cierto sentido por el hecho de evitar duplicidades”.

Las autónomas tienen la baja por maternidad cubierta desde hace años, medida que se completó, en 2012, con el permiso de paternidad de quince días y que en enero de este año se amplió hasta las cuatro semanas. En el conjunto de ambos regímenes, el pasado ejercicio se gestionaron cerca de 523.000 bajas por maternidad y paternidad, que se repartieron en un 52% las madres y en un 48% los padres. Esto supuso un coste para el sistema de 1.767,3 millones de euros.

De cara a este año y según las cifras que constan en la prórroga de Presupuestos Generales, la Seguridad Social destinará cerca de 124,97 millones de euros al pago de prestaciones por maternidad (106,83 millones de euros), paternidad (17,4 millones de euros), riesgo de embarazo y lactancia (0,75 millones de euros).