Apenas si bajaron los fallecimientos por accidente laboral entre los autónomos a pesar de las restricciones por el Covid-19
Las restricciones por la pandemia no han evitado los accidentes laborales en el colectivo de autónomos. Fallecieron 75 trabajadores por cuenta propia en 2020, a penas cinco menos que 2019, según un informe de ATA.
Las limitaciones de las actividades económicas por el estallido de la emergencia sanitaria no redujeron la siniestralidad con resultado de fallecimiento en el colectivo de los trabajadores autónomos. Murieron 75 por accidente laboral en 2020. Esta es la principal conclusión del informe que ha realizado la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), con ocasión del Día mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo este 28 de abril.
El informe revela como a pesar de una leve reducción de los accidentes de trabajo debido especialmente al cierre obligatorio de cientos de actividades económicas, la siniestralidad siguió siendo alta en 2020, muy parecida a la del ejercicio anterior. "La mortalidad ha descendido menos de lo esperable respecto 2019. Tan sólo se ha pasado de 80 accidentes mortales en 2019 a 75 accidentes mortales en 2020, a pesar de las limitaciones de actividad laboral" expone el documento.
En concreto, fallecieron en el ejercicio de su actividad en 2020: cuatro mujeres y 71 hombres trabajadores por cuenta propia. En este sentido, la Federación destaca cómo a partir de 2019, cuando se universalizaron las prestaciones y todos los autónomos estuvieron obligados a cotizar por accidente laboral, se conocen realmente las cifras de accidentes y se observa una notable diferencia con los datos de 2018 cuando era voluntario cotizar por esta medida.
Para ATA los datos muestran como "los autónomos siguen muriendo en los andamios o en el manejo de maquinaria agrícola. Lo que pone de manifiesto la falta de asesoramiento preventivo, ya que los recursos públicos que se destinan a esta materia son insuficientes e, incluso, inexistentes. Sobre todo en el ámbito de las Comunidades Autónomas” aseguró el secretario general y responsable del área de Formación y Prevención de Riesgos Laborales de ATA, José Luis Perea. También subrayó que "es necesario un mayor esfuerzo de la Administración para formar e informar a los autónomos para que se protejan antes los riesgos laborales, pues su vida es el mayor activo de su negocio, como se ha puesto de manifiesto en la actual crisis sanitaria por la Covid-19”.
Los accidente de trabajo sí disminuyeron
Pese a que el índice de mortalidad de 2020 se mantuvo muy cercano al de 2019, el informe de la Federación destaca cómo los accidentes de trabajo sí disminuyeron. Explicaron que es consecuencia principalmente de las reducciones de los accidentes de tráfico por las limitaciones de movilidad durante los meses más estrictos de confinamiento y estado de alarma.
Así, y en base a los datos recopilados por ATA, se produjeron en el año 2020 un total de 50.023 accidentes de tráfico frente a los 80.705 del 2019. Los accidentes de tráfico representan el 18,5% de los 435.342 siniestros que sufrieron los autónomos en el desempeño de su actividad.
En cuanto al grado de gravedad de los accidentes, ATA revela que en su mayoría fueron de carácter leve: se produjeron 30.398 accidentes frente a los 36.820 del 2019.
La desinformación que sufrieron los autónomos durante la emergencia sanitaria
Por último, ATA aprovechó la conmemoración del Día mundial de la Seguridad y Salud en el trabajo para denunciar el agravio comparativo que sufrió el colectivo de autónomo durante la emergencia sanitaria frente a los negocios con asalariados. Según explica la organización, los trabajadores por cuenta propia soportaron "desinformación y falta de protocolos para desarrollar sus actividades durante el inicio de la pandemia, lo que que provocó que muchos autónomos gastaran ineficazmente los pocos recursos que tenían en crear entornos seguros en sus negocios, que luego se declararon insuficientes o ineficaces" dice la Federación en el estudio.
A lo que su secretario general, José Luis Perea, añade que "es inconcebible que con la alarma social creada sobre la Covid-19, los autónomos sin trabajadores no hayan recibido más que unas guías de seguridad por sector, sin formación ni asesoramiento adicional. Es algo que hemos intentado paliar desde nuestra organización. Hemos asesorado gratuitamente a más de 100.000 autónomos sobre cómo proteger su salud, la de sus clientes y por ende sus negocios, entre otros temas”.