Los autónomos cobran hoy un 30% más de pensión que hace diez años

En los últimos diez años, la prestación media de los trabajadores por cuenta propia ha crecido casi un 30%. Según un informe de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) -en base a los datos de la Seguridad Social- la prestación media de los autónomos es de 686 euros a 31 de julio de 2019. Esto quiere decir que, a día de hoy, los autónomos cobran 157,24 euros más de media que en el mismo mes de 2009. Supone un 29,7% de incremento en diez años en las pensiones de los autónomos, frente a un aumento de tan solo 21,24% en la media de las pensiones de los asalariados.

A pesar de ello, los autónomos cobran un 37% menos que los asalariados (686 euros frente a 1.091,52 respectivamente). Aunque sigue siendo notoria, la brecha entre trabajadores por cuenta propia y ajena va reduciéndose  poco a poco. La diferencia en 2009 entre la pensión media de los autónomos y la del régimen general era de un 41,2% (528,76 euros frente a 900,32 euros respectivamente).

En cuanto a  la pensión media de jubilación que recibieron en julio los  jubilados del RETA ésta fue de 761,68 euros. Supone un 30,6% más que en 2009. A día de hoy, los afiliados al RETA reciben 178,49 euros más cuando se jubilan que en 2009. También se ha reducido en este periodo la brecha entre regímenes. “Aunque sigue siendo un 40% más baja la jubilación media de un autónomo, frente a la de un jubilado del régimen general, hay que destacar que esta brecha va poco a poco disminuyendo. Los autónomos siguen cotizando un 40% menos que los asalariados y, por tanto siguen recibiendo una pensión menor" aseguró Lorenzo Amor, presidente de ATA.

Los autónomos pensionistas han aumentado un 7,7%

Mientras que en el Régimen General hay un 41% más de pensionistas que en 2009 ( lo que supone un incremento de más de dos millones de personas), el número de pensionistas autónomos se ha incrementado sólo un 7,7%. ATA explicó que, en 2008, se incorporaron al RETA los pensionistas del Régimen Agrario por cuenta propia, y que no fue hasta 2012 cuando se incorporaron los pensionistas del Régimen Agrario por cuenta ajena al Régimen General. Esta diferencia explica en gran medida los datos de este periodo.

“Las pensiones de los autónomos han ido creciendo a un ritmo medio de un 3% cada año en la última década. Esto ha sido posible gracias al esfuerzo que han realizado los autónomos societarios con sus contribuciones cuya base mínima se ha incrementado en la misma proporción. También es gracias a la disminución del total de autónomos, tanto persona física como societarios, que han preferido dejar de cotizar en la última década por la base mínima y pasar a hacerlo por una base algo superior”,analizó el presidente de la Federación. A lo que añadió que “sin duda, los nuevos pensionistas autónomos mejoran cada vez más su prestación y esto es gracias al esfuerzo contributivo de los últimos años”.

Asimismo, el presidente de ATA afirmó que, ahora, "la vida laboral del autónomo es mucho más larga que la de los trabajadores por cuenta ajena. Muchas veces, un autónomo continúa trabajando más allá de los 65 ". Y para que ésto siga ocurriendo, explicó que son necesarias las "medidas en favor del relevo generacional y de la jubilación activa. Tenemos que asegurarnos de que si un autónomo quiere seguir cuidando de su negocio, pueda hacerlo sin miedo a perder la pensión que se ha ganado”.

El año pasado, la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social cambió los criterios para poder compatibilizar el cobro del 100% de la pensión con el ejercicio de una actividad. A partir de ese momento, el jubilado activo tiene que contratar como mínimo a un trabajador por cuenta ajena para acceder al total de la pensión. Aunque -añadió Lorenzo Amor-:“Hemos pedido que se vuelva al criterio anterior para poder facilitar lo máximo posible la viabilidad y sostenimiento de muchos negocios”. Por otro lado, desde ATA se ha reclamado también que “los autónomos con derecho a pensión y que tengan deudas con Seguridad Social puedan cobrar el 50% de la pensión resultante y el resto vaya a amortizar la deuda. Esto sí es política social. De no hacerlo, ni la Seguridad Social cobra, ni el autónomo tiene acceso a su pensión ni, por supuesto, podrá afrontar la deuda”.