CC.AA y ayuntamientos aumentan sus plazos de pago a proveedores
La morosidad hacia autónomos y pequeños negocios no sólo no se reduce, sino que, en algunos casos, se incrementa. Las administraciones locales y regionales han aumentado sus plazos de pago.
Cobrar pasados los 30 días se ha convertido en algo habitual para los autónomos. La morosidad sigue estando muy presente en las tres administraciones públicas que incumplen los periodos legales de pago. El último informe de morosidad, realizado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), que compara las medias de periodos de pago del primer semestre de 2019, con las obtenidas a cierre de agosto de este mismo año. muestra como dos de las tres administraciones han aumentado los plazos en los que abonan las facturas a sus proveedores.
La administración regional o autonómica incrementó en cinco días el tiempo que tarda en pagar, de 35 a 42 días, lo que supone un 14,3% más de espera, y la administración local -para la que trabajan la mayoría de los autónomos- "incrementó sus periodos en un 20%", de una media de 65 días en el primer semestre, pasó a 78 días en el mes de agosto. O, lo que es lo mismo, sus plazos han pasado de nueve a once semanas.
La Administración central ha sido la única que ha reducido sus periodos medios. Según indica el informe, "hizo un esfuerzo para bajar esos plazos" y redujo en un 10,8% su demora. De 37 días en el primer semestre, a 33 en el mes de agosto.
El informe no sólo muestra las diferencias entre administraciones, también destaca como algunas Comunidades Autónomas pagan cada vez más tarde a sus proveedores. Murcia y Cantabria, se erigen como las peores pagadoras.
Murcia y Cantabria, las que más tardan en pagar a sus proveedores
El informe de Morosidad de ATA también estudia, en el mismo periodo de tiempo -primer semestre de 2019 frente a los datos recabados en agosto-, los periodos medios de pago que tienen las administraciones regionales con los trabajadores autónomos. Según señaló el documento, en Murcia, los autónomos tuvieron que esperar 76 días para cobrar sus facturas. Además, esta Comunidad es también la que más incrementó sus plazos medios de pago, ya que en los primeros seis meses del año tardaba 40 días (10 días por encima del periodo que marca la Ley).
Cantabria es otra de las comunidades que vuelve a tener "serios problemas a la hora de pagar a sus proveedores. Si, a cierre de semestre, la administración regional había logrado reducir sus periodos de pago a los autónomos pasando de una media de 90 días hasta los 56 actuales, la tendencia no ha durado demasiado. El informe muestra cómo la administración regional de Cantabria ha vuelto a incrementar sus plazos hasta los 71 de media en agosto de 2019. Este aumento del 26,8% en los plazos medios, representa el cuarto mayor incremento en el periodo analizado de las administraciones regionales.
La de Castilla- La Mancha es la tercera administración que más tarda en pagar a sus proveedores, con 57 días de media. A ésta, le sigue la Comunidad Valencia que -aún por encima de la media autonómica- paga sus facturas en 53 días (dos días más tarde que la media del semestre). En quinto lugar, incumpliendo también los plazos que marca la Ley, se sitúan las Islas Baleares con 48 días de demora.
También por encima de los plazos legales -30 días- y superando la media regional se encuentran La Rioja y Madrid, que tardan en pagar, 45 y 43 días respectivamente.
En el otro extremo de la lista se encuentran Castilla y León, Asturias y Andalucía que ni han incrementado sus periodos medios de plazo, ni incumplen la Ley. Estas Comunidades pagan en 26, 25 y 20 días respectivamente.
También destacan por pronto pago Galicia y Canarias, comunidades cuyas administraciones autonómicas pagan de media a sus proveedores en 19 días. Por último, está Cuenca que es la que antes abona las facturas a los autónomos: tarda sólo cuatro días.
El análisis de ATA sobre la morosidad hacia los pequeños negocios no sólo se queda en las Comunidades, también analiza los tiempos de demora de las diputaciones provinciales (cabildos insulares en el caso de Canarias y consejos insulares en el de Islas Baleares) con los autónomos.
En este sentido, a cierre agosto de 2019, la diputación de Cuenca resaltó, una vez más, por su celeridad a la hora de pagar los trabajos realizados por los autónomos: lo hizo en una media de 4 días. Por debajo de los 10 días pagan también las diputaciones de Zamora ( tarda 6 días, lo que supone la mitad de tiempo registrado en el primer semestre del año), y Castellón, Girona, Burgos y Zaragoza que lo hacen de media en una semana. ATA incide en su informe en que "estas provincias ya cumplían la Ley en el primer semestre y han mejorado su media, incluso reduciéndola a la mitad".
A pesar de las buenas medias de Castellón (7 días) y de Alicante (15 días), la diputación de Valencia es la que más tarda en pagar de toda España, abonando sus facturas en una media de 51 días, sólo dos días antes que en el primer semestre de 2019. Le siguen en tardanza, el Consejo Insular de Ibiza (49 días), el de Lanzarote (48 días) y la Diputación de Granada (47 días).
A pesar de que el informe pone de manifiesto que, como norma general, las diputaciones - de las que dependen muchos autónomos– suelen ser buenas pagadoras, hay varias que incumplen los 30 días de pago que establece la Ley de Morosidad, como son: el cabildo insular de Tenerife y el de El Hierro, que tardan 38 días en pagar las facturas presentadas por sus proveedores; las diputaciones provinciales de Jaén y Ávila, que pagan ambas sus facturas en una media de 35 días; la diputación de Málaga con 32 días de media; y Ciudad Real que incumple por sólo un día el periodo medio legal de pago.
El resto de las diputaciones pagan por debajo de los 30 días. ATA señala en el informe el caso de Gipuzkoa, que ha reducido en un 18% su periodo medio de pago, pasando de 32 a 28, por lo que cumple con la Ley.
La morosidad de la administración local, la más dañina
Según el informe de ATA, las administraciones locales son las que más incumplen los plazos de pago, dado que llegan a tardar de media más de dos meses (78 días) en abonar las facturas a sus proveedores autónomos. A pesar de ello, los profesionales por cuenta propia suelen trabajar frecuentemente con ellas.
En cuanto al resto de municipios, la federación afirmó que los periodos medios que registran son superiores a los 78 días de media. Como el Ayuntamiento de Jaén que sigue siendo, una vez más, el consistorio que más tarda en pagar de España, abonando las facturas con un retraso de 582 días, cifra que es 542 días superior a la registrada en el primer semestre del año. Es decir, que un autónomo que realiza un trabajo para este Ayuntamiento cobrará, de media, 19 meses después de presentar la factura.
Una situación similar viven los autónomos que trabajan para Jerez de la Frontera, que tarda 414 días en pagar. También los que operen para Parla y Granada, 267 y 243 días respectivamente. Le siguen en este ranking de 'malos pagadores', los consistorios de Las Palmas de Gran Canarias (173 días), Badalona (151 días), Vélez-Málaga (137 días), El Puerto de Santa María (121 días), Santiago de Compostela (102 días) y Telde (94 días).
El informe subraya el esfuerzo de algunos ayuntamientos como el de Algeciras, cuyo periodo medio de pago a proveedores era, en agosto de 2019, de 39 días. Hace un año, este consistorio era de los peores pagadores y tardaba 300 días en abonar las facturas a sus proveedores, principalmente autónomos y pymes.
En el lado contrario están los ayuntamientos que realizan una buena gestión de sus facturas, cumplen con la Ley de Morosidad y pagan en menos de dos semanas. Así, la Administración local de Zamora y San Fernando son los consistorios que antes pagan a sus proveedores, al hacerlo en 7 días de media. Seguidas del Ayuntamiento de Salamanca (8 días), Coslada con 9 días de media, Arona con 10, Alicante y Santa Coloma de Gramanet en 11 días de media, Reus y Cornellà con 13 días y L´Hospitalet en justo 14 días de media.
Autónomos y pequeñas empresas, los mejores pagadores
La morosidad entre empresas privadas (B2B), de media, se establece en 73 días; cinco días más de los 68 registrados en el primer semestre del año, y 13 días más de los 60 que establece la Ley de Morosidad.
Según el informe, si se tiene el cuenta el tamaño de la compañía "se puede afirmar que son los autónomos sin trabajadores y los pequeños negocios -aquellos que tienen hasta 9 trabajadores o entre 9 y 50 empleados- los que antes pagan a sus proveedores". Y, conforme va aumentado el tamaño de empresa, se van empeorando los periodos medios de pago, siendo nuevamente las empresas de más de 1.000 trabajadores las que más tardan en pagar las facturas pendientes (115 días de media).
Por el contrario, entre trabajadores autónomos, la deudas se pagaron en agosto en una medida de 42 días. Los negocios de menos 9 trabajadores pagaron sus facturas en una media de 50 días. Por su parte, las empresas de entre 9 y 50 trabajadores pagan de media en 58 días, y las de 50 a 250 empleados tardan una media de 65 días.
A partir de los 250 trabajadores, los periodos medios de pago se disparan: las empresas de entre 250 y 1.000 trabajadores y las de más de 1.000, no satisfacen sus deudas con sus proveedores hasta los más de tres meses (107 días de media de espera y 115, respectivamente).
“Tanto en la Administración pública como en las grandes empresas privadas se siguen incumpliendo los periodos medios de pago con los autónomos. Y si los pequeños empresarios han incrementado unos días sus plazos medios es por lo mal que ellos cobran por parte de las administraciones" explicó Lorenzo Amor, presidente de la Federación. Amor comentó que "la morosidad es uno de los principales problemas que sufren los autónomos y que frena en seco su continuidad y consolidación. No nos vamos a cansar de pedir un régimen sancionador para aquellos que incumplan los plazos de pago estipulados por ley. La morosidad no tiene nada que ver con el tamaño de la administración, ni de la población, es cuestión de gestores, buenos y malos. Y parece que sólo cuando hay castigo estos malos gestores reducen la práctica de financiarse a través de la deuda contraída con pequeños proveedores”.
“Es increíble que, precisamente, la Administración que es más cercana a ti sea la que más te castiga. Muchos autónomos se ven abocados a cerrar por no poder soportar los impagos de aquellos para los que realizan trabajos, adelantando recursos, materiales y esfuerzo. Para que los autónomos no sufran más deben recibir el pago de su trabajo en tiempo y forma. Se nota la inestabilidad política, la inseguridad y que no hemos tenido un gobierno estable en mucho tiempo. La falta de responsabilidad de nuestros políticos deriva en una falta de liquidez para los autónomos” concluyó el presidente de ATA.