Las administraciones públicas tardan de media 71 días en pagar a los autónomos

La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos ATA ha realizado un nuevo informe sobre los plazos de morosidad de las administraciones públicas con los autónomos, que concluye que tanto la estatal como la local incumplen la ley de morosidad. 

La transposición de la Directiva Europea sobre Morosidad a España contempla la posibilidad de realizar la revisión de la factura hasta en los 30 días posteriores a su presentación y otros 30 para realizar el pago. Aun teniendo en cuenta este plazo, las administraciones locales y central incumplen la ley y tardan más de 60 días en efectuar el pago de las facturas a los autónomos.

Los plazos medios de pago en el tercer trimestre  de 2017 son de 71 días, lo que supone sólo un día menos que en diciembre de 2016 (72 días). Las administraciones que pagan en menos tiempo son las autonómicas, 52 días de media. Son las únicas que han reducido los períodos medios de pago en lo que va de año, concretamente en 12 días, frente a los aumentos registrados en las administraciones central y local.

Las administraciones locales -ayuntamientos, diputaciones- pagan de media sus facturas a los autónomos en 91 días (frente a los 80 de diciembre de 2016) y la central en 71 días de media, lo que supone un aumento en el periodo analizado por ATA de 28 días (desde los 43 días de diciembre de 2016 a los 71 de septiembre de 2017). Para la realización de este informe, ATA utiliza una metodología diferente a la del Ministerio de Hacienda y toma como referencia para el cálculo la fecha de emisión de las facturas o entrega de mercadería, hasta su pago efectivo. Hacienda, por su parte, comienza a contar el plazo desde la convalidación de la factura por la administración competente hasta el momento del pago efectivo. Esto da un margen de entre 28 y 32 días, que es lo que se tarda en convalidar las facturas. Además, se ha realizado una medida de los períodos medios de pago de los 9 meses de 2017.

Las comunidades autónomas mejoran sus registros

La media de tiempo de espera para cobrar las facturas de los autónomos que trabajan con las administraciones regionales es de 52 días, prácticamente dos meses. A pesar de esto, han sido las únicas en realizar un esfuerzo en reducir los tiempos de pago a sus proveedores autónomos y han logrado reducir el tiempo de espera en 12 días de media durante 2017.

Murcia y Comunidad Valenciana son las administraciones que más tardan en pagar a los autónomos. Son casi 3 meses de espera en ambas comunidades: Murcia 89 días y Comunidad Valenciana 83 días de media. Les siguen Cantabria (79 días) y Cataluña e Islas Baleares, ambas con 59 días de media.

Por encima de la media pero ya por debajo de los 60 días que marca la ley como plazo máximo está también la Comunidad de Madrid (55 días). En el caso tanto de Madrid como de Baleares destaca la importante disminución de los días de espera respecto al primeros de año. De hecho, Baleares con 25 días menos es la que más días ha reducido los periodos medios de pago. La Comunidad de Madrid y su gobierno regional lo han hecho en 18 días.

País Vasco y Navarra cumplen los plazos establecidos por la ley y pagan a sus proveedores autónomos en 27 y 29 días de media, respectivamente. Destaca también el importante esfuerzo realizado por Andalucía, que ha logrado reducir en 14 días en lo que va de año el periodo medio de pago, desde los 47 días de media en diciembre de 2016 a los 33 de septiembre de 2017. O de Asturias y Galicia que han pasado de 59 días a 39 días de media en lo que va de año.

Sólo Cantabria ha aumentado los periodos medios y paga más tarde ahora que al cierre de 2016, aunque el incremento haya sido de dos días.

La Diputación de Pontevedra, la mejor pagadora

El informe sobre la Morosidad pública de ATA se fija también en los tiempos de demora de las diputaciones provinciales con los autónomos. En 2017, la diputación de Pontevedra (17 días), junto con las de Valladolid y el cabildo insular de La Gomera (20 días), diputación de Palencia y de Cádiz (21 días), son las que menos tiempo hacen esperar a sus proveedores, cumpliendo la Ley de Morosidad con holgura. Y en la mayoría de los casos registrando mejores medias aun que las ya buenas de diciembre de 2016. Así, la diputación de Pontevedra paga dos días antes que en 2016, la de Valladolid 4 días antes, y el cabildo de la Gomera ha reducido sus periodos de pago en 5 días.

Entre las diputaciones, Burgos registra la peor media (68 días), sin embargo han reducido sus periodos medios en lo que va de año en casi una semana (-6 días desde diciembre de 2016). En el segundo puesto de los que más tardan en pagar está el cabildo insular de El Hierro (64 días), que además ha incrementado su registro en 3 días. El cabildo de Tenerife ha incrementado en un día su periodo medio hasta los 63 días de demora. En el mismo registro está la diputación de Ávila (63 días de demora), que ha incrementado 10 días su periodo medio de pago en lo que va de año.

La diputación que más ha reducido sus periodos de pagos es el Consejo Insular de Ibiza (19 días) y la que más lo ha incrementado es la de Cáceres, con 19 días de retraso más pasando de 40 días a 59 días de retraso.

Jaén, el municipio que más tarda en pagar

La administración local es la peor pagadora, ya que tarda de media tres meses (91 días) en pagar a sus proveedores autónomos. Además, es el tipo de administración para la que más trabajan los autónomos. Es decir, está fuera del plazo que marca la Directiva Europea de Lucha contra la Morosidad (30 días).

Para ello se han tomado como referencia los ayuntamientos de los grandes municipios.

Pero frente a esos 91 días de media, hay municipios que registran datos mucho más altos. Es el caso de Jaén y Gandía, que se han convertido en los que más tardan en pagar de España, al pagar en 473 días (Jaén) y 410 (Gandía). Es decir, un autónomo que realiza un trabajo para uno de estos ayuntamientos cobrará, de media, casi 16 meses después de presentar la factura. 385 días de media esperan los proveedores en Algeciras, y casi un año en Parla (344 días) y Telde (326 días).

Por el contrario, hay ayuntamientos que realizan una buena gestión de sus facturas, cumplen la Ley de Morosidad y pagan en menos de tres semanas. Así, la administración local de Fuengirola es la que antes paga, en 11 días de media, seguida del ayuntamiento de Vigo (18 días), Segovia (24 días), Cáceres (25 días) y Dos Hermanas (26 días).

Aquí hay que destacar el esfuerzo hecho este primer semestre por el ayuntamiento del municipio madrileño de Alcorcón, que si bien llevaba años situándose como el peor pagador, ha pasado de pagar a sus proveedores de 449 días, de media, a 251 días, que si bien sigue siendo un registro que no se debería permitir, es de valorar la reducción en más de seis meses del tiempo de espera para cobrar las facturas.

Autónomos y pequeñas empresas, los mejores pagadores

La morosidad entre empresas privadas (B2B), de media, se establece en 71 días. Las empresas afincadas en la comunidad autónoma de Navarra son las que antes pagan a sus proveedores con 63 días de demora (cumpliendo prácticamente con los que establece la Ley de Morosidad para empresas privadas, 60 días). 64 días tardan en pagar las empresas País Vasco y 65 las de Asturias y Cantabria. 

En el otro extremo, las empresas privadas de Extremadura son las que más tiempo medio de pago tienen con otras empresas, retrasando los pagos en una media de 79 días. Seguidas de las empresas ubicadas en Asturias, Canarias y Cataluña, que tardan una media de 76 días en pagar las facturas emitidas por otras empresas.

Tamaño de la empresa

Los autónomos sin trabajadores y aquellas pequeñas empresas (que tienen hasta 9 trabajadores o de 9 a 50 trabajadores) son las que cumplen con un amplio margen con los plazos de pago que establece la Ley de Morosidad. Según aumenta el tamaño de empresa, empeoran los periodos medios de pago, siendo nuevamente las empresas de más de 1.000 trabajadores, esas mismas que presumen en muchos casos de ser socialmente responsables, las que más tardan en pagar las facturas pendientes (114 días de media).

Los autónomos durante 2017 han pagado sus deudas con otros autónomos en una media de 40 días de plazo, cumpliendo ampliamente lo que dictamina la ley. Las empresas de menos de 9 trabajadores pagan sus facturas en 46 días, conscientes del daño que produce la morosidad en el resto de pequeñas empresas y autónomos. Las empresas de entre 9 y 50 trabajadores también pagan en tiempo y forma sus facturas con otras pequeñas empresas o autónomos, de media en 51 días. De 50 a 250 empleados tienen las empresas que de media tardan unos 66 días en pagar las facturas a otras empresas.

Y a partir de ahí, los periodos medios de pago se disparan: las empresas de entre 250 y 1.000 trabajadores y las de más de 1.000, no satisfacen sus deudas con sus proveedores hasta los cuatro meses (110 días de media de espera y 114, respectivamente). Todas han reducido en mayor o menor medida sus plazos de pago en lo que llevamos de año.

“La Morosidad no tiene nada que ver con el tamaño de la administración, ni de la población, es cuestión de gestores, buenos y malos. Y aunque todas las administraciones han ido reduciendo sus periodos medios de pago con sus proveedores, el esfuerzo no ha sido igual en todas las regiones de España y aun muchos autónomos sufren día a día impagos que les dificultan el seguir trabajando. Es llamativo que la administración central esté por encima de los 60 días que marca la Directiva Europea (30+30). La buena senda de reducción de la morosidad que no hace tantos meses celebrábamos, se ha prácticamente parado. Para que los autónomos no sufran más deben recibir el pago a su trabajo en tiempo y forma”, afirma Lorenzo Amor, presidente de ATA. “Quien antes tardaba más que eran las administraciones regionales son los que más esfuerzo han hecho y más han reducido los periodos de pago y sin embargo, las que antes iban mejor, la central y las locales ahora han incrementado su demora y morosidad con los autónomos”.