El impacto de la tercera ola del virus deja uno de los peores febreros de la historia en cuanto a paro y afiliación
Febrero suele ser un mes bueno para el empleo, pero se ha convertido en uno de los peores de la historia por el impacto de la tercera ola del virus. Principalmente para la hostelería.
El impacto de la tercera ola del coronavirus en el mercado laboral ha dejado como secuela uno de los peores febreros de la historia con más de 44.400 desempleados lo que hace que España supere los 4 millones de desempleados. En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, los datos aportados ayer por el ministerio no son más halagüeños. En febrero hubo 31.211 cotizantes menos y en este año de pandemia se han perdido 404.943.
Esta caída caída de afiliación se ha debido a las pérdidas producidas principalmente en el sector de la hostelería que tiene 289.055 afiliados menos que hace un año. Le siguen las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento con 48.216 afiliados menos. Precisamente las que han sufrido los peores efectos de las restricciones y los confinamientos.
Incluso entre los afiliados al RETA apenas si se ha experimentado una leve subida poco más de una décima (5.516 autónomos más). Para la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) este pequeño incremento en la afiliación de trabajadores por cuenta propia es "consecuencia" de la mejora del cese de actividad. Según explican en un comunicado "hay más de medio millón de autónomos que están en cese de actividad y, por lo tanto, cotizan a la Seguridad Social"
Las diferencias de afiliación entre comunidades
Pese a que el dato nacional de afiliación de autónomos es positivo, hay comunidades donde se perdieron trabajadores autónomos como es el caso de Asturias, Castilla y León y Extremadura. Estas no lograron mantener sus trabajadores por cuenta propia y registraron pérdidas en el segundo mes del año. Concretamente Asturias perdió seis autónomos, Castilla y León 92 y Extremadura 17.
Por el contrario, en términos absolutos es Cataluña la que más autónomos ganó (tiene 1.723 trabajadores por cuenta propia), seguida de Andalucía (1.163 autónomos más) y la Comunidad de Madrid (1.073).
De los 5.516 nuevos cotizantes al RETA, 3.457 son autónomos varones y 2.59 mujeres. En cuanto al sector de actividad, destaca que la hostelería vuelve a ser el más castigado con una pérdida de 1.188 autónomos del sector que tuvieron que echar el cierre.
"Seis millones de personas en el limbo laboral"
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, catalogó los datos de afiliación y paro como "malísimos" y "horribles". El incremento del paro en más de 44.436 personas en el mes de febrero, hasta alcanzar los 4.008.789 es "sin duda una muy mala noticia. Y más teniendo en cuenta que estos datos se han amortiguado con el más de medio millón de autónomos que están percibiendo la prestación por cese de actividad y por los 900.00 trabajadores en ERTE".
Amor calcula que si a los 4 millones de parados, se le suman los trabajadores con empleo suspendido en ERTE, los autónomos beneficiarios de alguna de las modalidades del cese de actividad, los parados que están en formación y no contabilizan como parados: "estaríamos hablando de 6 millones de personas que están en estos momentos en un limbo laboral”.
Se trata de una consecuencia directa de la "delicada situación" por la que atraviesa el tejido productivo. Según el comunicado de ATA, en estos momentos los pequeños negocios se enfrentan a una serie de casuísticas que les impide casi sacar su actividad adelante y mantener el empelo. Algunos de los problemas que sufren son falta de liquidez, problemas de solvencias, restricciones que les provocan una fuerte caída de la actividad, en definitiva, una situación donde el tejido productivo se está quedando sin gasolina.
En este reconoció que si bien es cierto que los ERTE y la prestación por cese de actividad - vigentes hasta el 31 de mayo- están haciendo su función y sujetando las cifras de paro y de afiliación a la Seguridad Social, es necesario la implementación de ayudas directas. Y advirtió que "si no llegan esas ayudas directas, la mitad de los trabajadores en ERTE y la mitad de los autónomos que están en estos momentos en cese de actividad engrosarán las cifras de paro y causarán baja en la afiliación a la Seguridad Social”.
Asimismo insistió en que éstas deben convertirse en " transferencias directas a los autónomos, a las pequeñas empresas, que en estos momentos tienen serias dificultades económicas para sostener su actividad, para sostener empleos. No podemos hacer experimentos. España tienen que hacer lo que han hecho otros países".