Las mutuas ofrecerán más ayudas a los autónomos que sufran un accidente

Los autónomos están, desde el pasado 13 de diciembre, un poco más protegidos. Ese día, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó una resolución que permitía a los trabajadores autónomos que hubieran sufrido un accidente laboral, acceder a una serie de ayudas para -por ejemplo- afrontar los gastos que supone eliminar las barreras arquitectónicas del local donde desarrolle su negocio o actividad, a fin de adaptarlo a sus nuevas necesidades físicas, el servicio de un fisioterapeuta o cubrir el coste de una prótesis.

La resolución viene de la Dirección General de Ordenación de la Seguridad, que es el organismo dependiente de Seguridad Social que regula las ayudas que deben prestar las Mutuas de Accidente Laboral y Enfermedad Profesional, entidades que funcionan bajo la tutela del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social y que, en el caso de los autónomos, se encargan de la gestión de sus contingencias profesionales, incluida la prestación sanitaria, y del subsidio por Incapacidad Temporal derivado de la enfermedad común.

Ahora se amplia el catálogo de ayudas a las que podrán acceder los trabajadores por cuenta propia que hayan sufrido un accidente. Algunas de ellas son: para a la rehabilitación y tratamiento en centros especiales del trabajador, para la adaptación de su vivienda o vehículo, para gastos de desplazamiento suyos y de familiares, para prótesis avanzadas, para ayuda domiciliaria o para cursos para la inserción laboral.

Son sólo algunas de las ayudas que recoge esta norma y que podrán ser solicitadas por los trabajadores por cuenta propia a través de las comisiones de prestaciones especiales de las mutuas de accidentes de trabajo, siempre que se justifique el estado de necesidad originado por el accidente o enfermedad profesional.

La ampliación de las ayudas a los autónomos que hayan sufrido un accidente, si bien protege aún más a los trabajadores por cuenta propia, no es nueva. La iniciativa fue impulsada hace dos años por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) en la Comisión de Prestaciones especiales de Mutua Universal, de la que la Federación forma parte. De hecho, la entidad aceptó la propuesta de ATA y los trabajadores por cuenta propia que trabajan con esta mutua podían acceder a estas ayudas tras haber sufrido un accidente laboral. 

Lo que ha ocurrido ahora, es que la Seguridad Social ha hecho suya la prestación y la ha incluido en el catálogo de ayudas que deberán asumir todas las mutuas. Asimismo, también ha eliminado otra serie de ventajas que constituían el catálogo de prestaciones para autónomos. Entre ellas, se encontraba la concesión de una ayuda económica para la contratación de un empleado ,durante un año como máximo, que sustituyera al autónomo accidentado durante su recuperación. De hecho, según detalló la Federación en un comunicado, este iniciativa le hizo ganar el Premio Autónomo del año 2018 en la categoría de mejor iniciativa institucional. 

Para José Luis Perea, secretario general de ATA, “aunque la concesión de estas ayudas es potestad de las mutuas, es cierto que viene a completar la protección del trabajador autónomo frente a los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, situándolo -en este sentido- al mismo nivel  que el asalariado. Desde ATA, celebramos que nuestras iniciativas, poco a poco, se vayan adaptando y ampliando a todo el colectivo. Llevamos 25 años al servicio de los autónomos con un objetivo claro: hacerles la vida más fácil”.