Informe de la Federación ATA

El número de falsos autónomos no supera las 100.000 personas

La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos descarta que el número de falsos autónomos haya crecido con la tarifa plana de 50 euros y asegura que, por sectores, la mayor bolsa de este fraude laboral se concentra en la prensa, reparto de comida, industria cárnica y profesionales liberales.

Teóricamente​ los falsos autónomos se esconden bajo la figura de aquellos supuestos trabajadores por cuenta propia que trabajan para una sola empresa. Pues bien, el número de trabajadores autónomos que trabajan predominantemente para una única empresa se ha mantenido estable en los últimos años. Así lo refleja un informe elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA con datos facilitados por la sección EPA del Instituto Nacional de Estadística y por la Seguridad Social.                

En 2009, de los 3.157.046 de autónomos afiliados a la Seguridad Social, el 4,8% (151.700) trabajaban predominantemente para una única empresa (el INE los llama trabajadores independientes). En marzo de 2013, mes en el que entró en vigor la tarifa plana para nuevos autónomos, el porcentaje era del 5,6% del total de autónomos y a 31 de diciembre de 2017, los últimos datos que tenemos nos muestran que el porcentaje de autónomos que trabaja predominantemente para una empresa es el 5,8% del total del colectivo (187.000 autónomos de los 3.200.314). 

El informe elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) muestra cómo en los cuatro años anteriores a la puesta en marcha de la tarifa plana, entre 2009 y marzo de 2013, los autónomos que trabajan predominantemente para una única empresa (el INE los llama trabajadores independientes) crecieron en 16.700 y, de marzo de 2013 (cuando se pone en marcha la tarifa plana) a cierre de 2017, el incremento fue de 18.600. Es decir, dos mil autónomos más, pero en una progresión similar a la del incremento de autónomos en los mismos periodos de 4 años.

Y aunque el falso autónomo suele encajar en este perfil, ATA quiere dejar claro que los que trabajan para una sola empresa no tienen porque ser necesariamente falsos autónomos, ya que en esta cifra se incluye, por ejemplo a los transportistas con vehículo propio y tarjeta de transporte que están obligados por el Estatuto de los Trabajadores a estar de alta como autónomos aunque trabajen para una única empresa. Lo mismo sucede con los agentes comerciales y de seguros que tienen su propio contrato de agencia.

ATA estima que, descontando estos autónomos transportistas y los agentes (que son autónomos económicamente dependientes) el número de falsos autónomos (con una relación encubierta de trabajo asalariado) se podría cifrar entre 90.000 y 100.000 personas.

Lo que desde ATA sí perciben es que el grueso de los falsos autónomos ha cambiado de sector: si en 2008, el 80% se englobaban en el sector de la construcción, actualmente, analizando los datos por sectores, se comprueba que, en torno al 25%, están en el sector de la comunicación. Ello es evidente porque en 2008 había 30.000 periodistas autónomos y ahora hay 65.000, duplicando en sólo diez años su registro. También se encuentra una gran bolsa de falsos autónomos en sectores como el reparto de comida (sin vehículo propio, ya que una bici no se considera vehículo), industria cárnica, y profesionales liberales (arquitectura, peritos y abogacía). En la construcción los falsos autónomos ya son una minoría, aunque ATA alerta de que puede que se vuelva a producir un nuevo repunte si el sector mantiene el ritmo de recuperación actual.

“Con estos datos, podemos concluir que la incidencia de la tarifa plana a la hora de fomentar los falsos autónomos es prácticamente nula, ya que su ritmo de crecimiento es progresivo con los autónomos en general”, señaló Lorenzo Amor, presidente de ATA.

ATA no niega que haya falsos autónomos, pero sostiene que la cifra se mantiene similar a años anteriores a la entrada en vigor de la tarifa plana. Además, según los datos publicados por el Ministerio de Empleo sobre autónomos persona física, desde 2007 el crecimiento de autónomos ha estado protagonizado por autónomos con trabajadores a su cargo y, especialmente, por los societarios, colectivos que no encajan con la figura del falso autónomo.

“El que haya falsos autónomos es sin duda un problema de fraude de ley y hay que combatirlo”, señaló Lorenzo Amor, presidente de ATA.  Desde ATA siempre hemos pedido mayor control dado que esta forma encubierta de trabajo asalariado hacen mucho daño a aquellas empresas, muchas de ellas regentadas por autónomos que contratan a sus trabajadores como establece la Ley".

ATA ha reclamado la creación de un registro de Trabajadores Autónomos Económicamente Dependientes (TRADE) – que hay que recordar que no son falsos autónomos – y que sea el propio TRADE el que tenga la obligación de comunicar y registrar personalmente su condición como tal a través del Sistema RED, indicando en cada caso los datos de la empresa o grupo de empresas que suponga al menos el 75% de su facturación. “Esto facilitaría a los servicios de inspección un mayor control de las empresas que utilizan esta figura. No es lógico que sean únicamente 9.991 autónomos los que están dados de alta como TRADE y el INE tenga registrados 187.000 autónomos que trabajan predominantemente para una empresa en las mismas fechas (diciembre de 2017)”, apuntó Lorenzo Amor.