Tras los ICO, hay que prestar atención al endeudamiento, y asegurarnos que sea un “endeudamiento cómodo” para que seamos capaces de devolverlo sin tener tensiones de Tesorería
Lo que nos espera en la cuarta ola es más cierres de empresas y negocios y sus consecuencias en el empleo, que se traduce en la perdida de puestos de trabajo.
Los autónomos se sienten como un funambulista que está atravesando un precipicio con los ojos vendados y sabe que al fondo del barranco, hay un río repleto de pirañas hambrientas esperándole. Ante esta situación desesperada, el Gobierno debe mover ficha. ¿Bastará con los 11.000 millones anunciados a bombo y platillo, o se demostrará que es un brindis al sol?
Si todo va bien, existe acuerdo y consenso entre los principales partidos políticos y se tramita con celeridad, a finales de este año o principios del 2021 podríamos tener la ley sobre el régimen sancionador lista.