Opinión

Un paso más hacia la plena protección social de los autónomos

Los autónomos estamos de enhorabuena. Ha costado, ha sido largo, pero por fin tenemos en la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo, una serie de medidas que comenzamos a negociar en 2016 con los principales grupos parlamentarios y que, tras diez meses de trabajos, han visto la luz tras su aprobación por unanimidad en el Congreso y su paso por el Senado.

Un paso más hacia la plena protección social de los autónomos

Y estamos de enhorabuena porque poco a poco los autónomos vamos solucionando problemas que nos preocupan como poder desgravarnos gastos -- entre otros la dieta alimenticia--, o que las autónomas puedan reincorporarse a su actividad después de ser madres con una cuota reducida o que no coticen cuando están en periodo de baja por maternidad, o que se extienda la tarifa plana de 50 euros que a tantos autónomos jóvenes está ayudando a emprender, o que por fin estén bonificados los contratos que realizamos a nuestros familiares, o que sean menores los recargos que aplica la Seguridad Social cuando nos retrasamos en pagar nuestras cuotas, o que podamos cobrar el 100% de la pensión mientras continuamos trabajando en nuestro negocio o, lo que fue una reivindicación histórica, que cobremos la prestación cuando nos accidentamos in itínere, igual que los asalariados.

Pero si de algo estoy orgulloso es porque esta ley mejora la posibilidad de adecuar nuestras cotizaciones a nuestros ingresos reales. Ya podíamos hacerlo antes porque la Seguridad Social nos permitía cambiar de base dos veces al año pero, desde  enero del 2018, podremos hacerlo cuatro veces, subiendo o bajando nuestra cuota en función de los que ingresemos o preveamos ingresar. Ello debería animar a muchos autónomos a cotizar más cuando sus ingresos se lo permitan porque no están atados a una base. La medida, con el tiempo y cuando los autónomos se acostumbren a ajustar sus cuotas en función de sus ingresos, redundará  también en beneficio de la recaudación de la Seguridad Social ya que muchos se animarán a elevar sus cuotas en momentos de bonanza sin miedo a bajarlas en tiempos de penuria.

Muchos autónomos tradicionalmente han considerado las cotizaciones como un impuesto más, aunque no sea así. El motivo es la dificultad que tenemos muchas veces para hacer frente cada mes al pago de la cuota. Sí es verdad que a muchos autónomos les va bien en sus negocios y deberían protegerse más frente a las contingencias presentes y futuras. Pero a otros no les va tan bien y para más de 500.000 que ingresan menos de 800 euros al mes, el pago de la cuota se convierte en un imposible. Muchas cosas quedan aún por resolver. Y esta es una. ATA va a proponer al Parlamento un sistema para que estos autónomos que apenas tienen ingresos disfruten de una cuota superreducida. Y pensamos que esta medida puede animar a entrar en el sistema a muchos trabajadores por cuenta propia, con bajos ingresos, que ahora no cotizan. No porque no quieran sino porque no pueden.

No quisiera olvidarme de mostrar mi agradecimiento a los grupos que integran la Comisión de Empleo del Parlamento por haber sabido acercarse a los problemas de la economía real y aprobar esta ley. Principalmente a Ciudadanos por presentarla, al PP por mejorarla, sin dejar de lado al PSOE y a Carles Campuzano, del Partido Demócrata Catalán, que han mostrado su buen sentido al apoyarla para que saliera adelante. Las gracias las extiendo al Gobierno porque estas medidas suponen 1.000 millones de euros en ayudas a los autónomos y sabemos apreciar ese esfuerzo presupuestario.

Como he dicho, quedan muchas cosas por hacer y muchas cosas por mejorar. Y en ATA ya estamos trabajando para encontrar soluciones. Desde la aprobación del Estatuto del Trabajo autónomo en el 2007 no hemos hecho otra cosa que dar pasos adelante, unas veces más rápido y otras más despacio. Pero, como dijo aquel, no hay que llorar porque no vemos aún el sol o las lágrimas nos impedirán ver las estrellas. Hoy hemos dado otra zancada importante en la protección de los autónomos y podemos celebrarlo.