Convertirse en nómada digital es una oportunidad no exenta de desafíos para los autónomos
Trabajar desde cualquier parte del mundo en remoto es una opción cada vez más escogida por los autónomos. Se trata de una experiencia enriquecedora, pero no está exenta de riesgos. Una de las más importantes es una conectividad segura. Otra es la planificación financiera.
En un entorno globalizado como el actual, cada vez más autónomos tienen la posibilidad de convertirse en nómadas digitales, profesionales que pueden trabajar desde cualquier parte del mundo con una simple conexión a Internet y un equipo informático.
En este contexto, la seguridad digital es especialmente importante para los autónomos nómadas digitales. Proteger la información laboral mientras se trabaja viajando es otro desafío, ya que usar redes wifi públicas puede exponer los datos a riesgos. Por ello, es esencial adoptar medidas de seguridad en línea, como el uso de una VPN para cifrar la conexión y proteger la privacidad. Utilizar una prueba gratuita de VPN ofrece una oportunidad para probar esta herramienta crucial y garantizar una conexión segura y privada a internet.
Sin embargo, si bien esta libertad ofrece cada vez más posibilidades a los autónomos que no requieren de un espacio físico para desarrollar su actividad, convertirse en un nómada digital también presenta una serie de desafíos que requieren de atención. Por ejemplo, las particularidades legales y fiscales de los países a los que se trasladen para trabajar en remoto, pero también la seguridad de sus equipos informáticos y redes.
Los desafíos legales, fiscales y de seguridad a los que se enfrentan los autónomos nómadas digitales
A pesar de que se trata de una salida que presenta numerosas ventajas y atractivos para los autónomos de determinados sectores, convertirse en nómada digital no está exento de algunos desafíos que estos trabajadores deben tener en cuenta. Por ejemplo, la necesidad de contar con una adecuada planificación financiera, ante la falta de un flujo de ingresos estable y la necesidad de gestionar ingresos en diferentes monedas, como el dólar o el euro, pero también las de otros países y regiones del mundo.
Además, los nómadas digitales deben tener en cuenta que, debido a su carácter itinerante, sus condiciones para acceder a las prestaciones de la Seguridad Social o las cotizaciones que realizan para sus futuras pensiones pueden verse limitadas si trabajan en otros países. También los impuestos, un apartado en el que, en ocasiones, estos autónomos tienen que navegar por un laberinto de leyes fiscales internacionales.
Ante estos retos, los expertos recomiendan buscar una asesoría especializada en tributación internacional, así como implementar estrategias de ahorro e inversión y planificar cómo podrán hacer frente a una enfermedad o accidente si éste ocurre mientras se encuentran desarrollando su actividad en un país extranjero.
Los nómadas digitales están en constante formación y aprendizaje de nuevas habilidades
Sin embargo, a pesar de que los autónomos nómadas digitales deben superar diferentes trabas en su camino laboral, este estilo de vida también cuenta con múltiples beneficios. Por ejemplo, la capacidad para seguir formándose y aprendiendo de forma remota, a través de diversas plataformas educativas como Coursera o Udemy, entre muchas otras, que ofrecen una gran variedad de cursos online en diferentes áreas, desde desarrollo web hasta marketing digital, permitiéndoles actualizar sus conocimientos y adquirir nuevas habilidades para destacar en su campo.
Asimismo, el estilo de vida de los nómadas digitales les permite expandir su red profesional, uniéndose a comunidades online como como Nomad List o Freelancer Club, que les permite conectar con otros profesionales remotos de todo el mundo, compartir experiencias, ideas y consejos, así como encontrar oportunidades de colaboración en proyectos internacionales.
A la hora de encontrar nuevas oportunidades de trabajo, también existen plataformas digitales como We Work Remotely o Remote.co, e incluso otras que se centran en Latinoamérica o algún otro mercado más especifico. Desde estas se publican ofertas de trabajo para nómadas digitales y trabajadores remotos, facilitando la búsqueda de proyectos desafiantes y gratificantes que se adapten a sus intereses y habilidades.
También existen otras herramientas que pueden utilizar los autónomos nómadas digitales
Más allá de las plataformas, existen otras herramientas que pueden suponer una oportunidad para estos autónomos. Por ejemplo, los grupos en Facebook o LinkedIn específicos para nómadas digitales donde se pueden encontrar ofertas de trabajo, consejos y apoyo.
También eventos online que sirven para conectar con otros nómadas digitales en personas, establecer relaciones y compartir experiencias; o programas de mentoría, donde profesionales experimentados pueden ayudar a los autónomos a iniciarse en el trabajo en remoto.
En definitiva, ser nómada digital no es sólo una forma de trabajar, sino un estilo de vida que ofrece oportunidades para el crecimiento personal y profesional. Si bien existen ciertos desafíos que deben ser considerados, existen herramientas al servicio de estos autónomos que les permiten acercarse al éxito en sus negocios.