La temporalidad en la administración alcanza el 30,4%

Hay más contratos temporales en el sector público, sobre todo de mujeres, que entre autónomos y empresas

La temporalidad en el sector público alcanzó en el primer trimestre de 2021 un 30,4%, frente al 22% del ámbito privado, es decir en autónomos y empresas. Es un problema que se centra especialmente en la administración.

Hay más contratos temporales en el sector público, sobre todo de mujeres, que entre autónomos y empresas

La temporalidad del empleo en España siempre ha sido uno de los grandes y recurrentes problemas del mercado laboral. Un lastre que, aunque a priori no lo parezca, está más instaurado en el sector público, que en el ámbito privado. De hecho, los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2021 muestran cómo la temporalidad alcanza en el sector público al 30,4% de todos sus trabajadores, especialmente las mujeres cuya tasa es del 35,8%, frente al 22% de los empleados del ámbito privado.

Se trata de casi ocho puntos de diferencia entre el ámbito público, la Administración, y el privado donde se encuentra autónomos y empresas, que sorprende a los expertos consultados. “Es una diferencia muy exagerada. Máxime cuando debería haber más temporalidad en el sector privado con los ciclos de la actividad económica, que en la Administración pública, que no sufre estos ciclos y es más constante. Sin embargo, es algo que está ocurriendo” y que constata los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) dijo presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas (CGE), Antonio Pedraza.

Siempre se ha tendido a asociar la realización de contratos temporales a las actividades económicas privadas por las campañas de trabajo. “La temporalidad en el sector privado está muy unido a la temporalidad de la actividad económica. El mayor ejemplo de ello es la agricultura, con sus campañas de recogida de frutas y hortaliza. Pero también está la hostelería, con el buen clima y la llegada de turistas” apuntó Pedraza.

Que si bien reconoce y justifica la temporalidad el sector privado, no entiende la alta tasa que hay en el sector público, que llegó al 30,4% en e primer trimestre de 2021 y que aumentó hasta el 35,8% en el caso de las trabajadoras mujeres. “En la Administración pública la temporalidad viene determinada, en muchos casos, porque la mayoría de las personas no están contratadas correctamente. Se está produciendo un abuso de los contratos temporales” aseguró el economista. Y puso el ejemplo de los estudiantes de medicina, que una vez que acaban su época de residentes como MIR (Médico Interno Residente), “encadenan un contrato temporal, tras otro”. Es una situación que se afecta a otras profesiones como enfermeros, médicos, administrativos, profesores, secretarios de juzgados...

El abuso del contrato temporal en el sector público

El secretario general de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (FECCOO), Francisco García, coincidió con Pedraza y confirmó el abuso que se hacía del contrato temporal en en el sector público. “Las administraciones públicas han dejado a un lado su responsabilidad y no han convocado plazas de empleo público. Por lo que se ha ido acumulando la temporalidad” dijo García.

De tal manera, que en estos momentos uno de cada tres empleados que trabaja para la Administración tienen un contrato temporal. Según explicó García, que el Estado no convoque nuevos puestos de trabajo público, “no quiere decir que no sea necesario contratar más médicos, maestros, policías o secretarios de juzgados para atender correctamente a la ciudadanía en los servicios públicos. De hecho, todo lo contrario. Por eso, la Administración recurre a los contratos temporales para cubrir esa demanda. Se contrata personal obviando las ofertas de empleo público y cogiendo a profesionales interinos, eventuales o temporales”.

En este sentido, la información recopila por la CEOE, señala que en base a terminología de la EPA, la Administración tiene un 11,7% de asalariados temporales que cubren la ausencia total o parcial de otro trabajador -los llamados interinos-; que en el caso de mujeres llega al 14,8%. Mientras que en el sector privado esta tasa se sitúa en el 1,4% (un 0,8% en caso de hombres y 2% en el de mujeres%).

“En la Administración pública, salvo para aquellos puestos a los que se accede a través de una oposición, se está recurriendo a personal interino para cubrir puestos que desde hace tiempo deberían haber sido fijos” puntualizó el economista, Antonio Pedraza.

Se han perdido 117.000 empleos públicos

Esta forma de proceder de la Administración en cuanto al uso del contrato temporal - como denunciaron los diferentes expertos – no es nuevo. Es una circunstancia que se viene arrastrando desde hace muchos años. “Entre 2010 y 2019 se han podido perder en torno a 117.000 empleos públicos”, se lamentó el secretario general de FECCOO, Francisco García.

Uno de los aspectos que más ha incentivado la contratación temporal durante los últimos años ha sido la baja tasa de reposición. Es decir, la sustitución de una persona por otra cuando se jubila.

“En los últimos años, la tasa de reposición ha variado entre el 0%, 10%, 30% o 50%. Esto significa que, en algunas ramas de las administración pública, de cada 100 empleados públicos que se jubilaban, no se reponía ninguno. O sólo se reponía 10%, el 30% o el 50%” detalló García. Que incidió en que no sólo se habían perdido puestos de trabajo, sino que también sabía perdido calidad del empleo público. 

Sine embargo, el Gobierno carga sobre la temporalidad del sector privado

El Gobierno quiere atajar al máximo el exceso de temporalidad que afecta a nuestro mercado laboral y que en estos momento, según los expertos, más de un 25% de los nuevos contratos que se firman en España son temporales. El dedo siempre ha señalado al sector privado, a autónomos, pymes y empresas como causantes de esta alta tasa de temporalidad. Es un objetivo que “resulta cuanto menos extraño. Es raro que el Ejecutivo esté sacando a relucir este tema, cuando es el primero que está recurriendo al personal interino para cubrir puestos de trabajo, que desde hace tiempo deberían haber sido fijos” comentó Antonio Pedraza.

El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha planteado a los agentes sociales una reforma de la contratación con el fin de limitar los contratos temporales en empresas y autónomos que ha sido rechazado por la CEOE. 

Pedraza defendió la utilidad del contrato temporal especialmente en el sector privado, “no se puede obligar a los negocios a asumir la contratación de una persona durante un año, cuando sólo la va a utilizar durante meses. Especialmente a los trabajadores autónomos, que funcionan a golpes de trabajo”.

En este sentido, secretario general de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (FECCOO), Francisco García, aseguró que hay “problema muy serio en el empleo público. Y el Gobierno debe aplicarse para reducir la tasa de la temporalidad y poner en marcha fórmulas eficaces para convertir ese empleo temporal en fijo, con fórmulas que permitan reconocer la experiencia de ese personal”.