Más del 80% de los negocios siguen sin saber cómo se paga el Impuesto al Plástico en vigor desde 2023

El 90% de las empresas españolas afirma no comprender el funcionamiento del Impuesto sobre el Plástico no Reutilizable (IPNR) y considera necesaria una reforma legislativa que aclare el objetivo que regula los plásticos afectados por el impuesto, que no está definido de forma clara. Así lo mostró un estudio de la consultora Ayming, más de un año después de la entrada en vigor de este tributo.

Adicionalmente, los autónomos y negocios encuestados consideraron insuficiente el material aclaratorio aportado por la Agencia Tributaria, y más de un 80% ha necesitado asesoría externa, suponiendo un sobrecoste de más de 3.000 euros para el 45% de ellos.

En concreto, el 92% de las empresas manifestó que el mecanismo del Impuesto sobre Envases de Plásticos No Reutilizables es de difícil comprensión, y para un 75%, el mecanismo de respuesta de las consultas vinculantes y el material aclaratorio de la AEAT no arroja soluciones a las dudas planteadas.

En este sentido, Sonia Álvarez, directora del área de Fiscal de Ayming España, afirmó que “la gestión del IPNR ha supuesto un auténtico reto para las empresas. Su difícil comprensión ha complicado la correcta liquidación, lo que ha provocado que muchas empresas hayan tenido que solicitar la ayuda de expertos”.

Obtener información de los proveedores de envases de plástico es la principal dificultad para los negocios

Una gran parte de las empresas sujetas a este impuesto especial importan el material de otros países que no están obligados a declararlo por la regulación europea o nacional, por lo que resulta muy complicado obtener la información necesaria a declarar en España, siendo esta la principal dificultad para la correcta liquidación del impuesto, según la encuesta de Ayming.

De hecho, sólo el 30% de los negocios encuestados afirman haber contado con colaboración por parte de sus proveedores en la facilitación de la información sobre la cantidad de plástico importado. Así, la falta de información ha obligado a muchas empresas a determinar la base imponible a través de estimaciones. Concretamente un 80% afirma haberlo hecho de esta forma.

“Este hallazgo resalta la importancia de promover la colaboración y la transparencia en la cadena de suministro, así como de establecer mecanismos para facilitar el intercambio de información entre proveedores y empresas sujetas al impuesto”, explicaron desde Ayming.

Faysal Assakale, responsable de Impuestos en Ayming España, propuso, en este sentido, que “una solución práctica para otorgar mayor seguridad jurídica a los contribuyentes y reducir la complejidad en la gestión del Impuesto podría ser la aprobación de valores por defecto”.

Hacienda ya elevó las quejas de los negocios a la Dirección General de Tributos

Hace ya un año, a las puertas de la primera declaración del impuesto que debían realizar los autónomos y negocios, la Agencia Tributaria reconoció que las quejas de los negocios estaban existiendo a medida que se acercaba la fecha de realizar la primera autoliquidación, durante el pasado abril. “Es un impuesto totalmente nuevo para todos, también para nosotros”, explicaron.

Sin embargo, las mismas fuentes consultadas reconocieron que, sin un cambio normativo, el poder de acción de la Agencia Tributaria está limitado. “Elevamos todas las quejas que nos están llegando a la Dirección General de Tributos y estamos a disposición de los negocios para reunirnos cuando sea necesario. Más no podemos hacer”, explicaron.

Este cambio de la legislación, tal y como valoraron, debería estar enfocado a la objetivación de criterios a la hora de cuantificar la cantidad de plásticos de un solo uso que contienen determinados envases o embalajes. Por ejemplo, la cantidad de vueltas que se dan a un palé, uno de los casos más comunes en el sector logístico.