¿Te has planteado que podrías invertir el dinero de la RENTA 2020 si te sale a devolver este año?
Durante la campaña de la RENTA del año pasado, el 70% de las declaraciones salieron a devolver, con un importe medio de devolución de 670 euros. Según estimaciones de la Agencia Tributaria, este año, la declaración de IRPF saldrá a devolver para dos de cada tres contribuyentes, que cobrarán una media de 757 euros, casi 100 euros más que el año pasado.
Concretamente, este año se prevé que haya 21,5 millones de declaraciones, un 2,1% más que el año anterior. Y, de ese total, 14,3 millones darían derecho a devolución, según Hacienda. Probablemente, muchos de esos resultados a compensar sean para autónomos, ya que el año pasado la mayoría tuvieron una fuerte caída de ingresos y, sin embargo, mantuvieron buena parte de sus gastos.
Si se da el caso, y el trabajador por cuenta propia recibe este dinero 'extra', podría ser un buen momento para invertir en el futuro. Cabe recordar que aunque los autónomos tienen a su disposición varias coberturas presentes y futuras gracias a la cotización, la mitad siguen estando por la base mínima y en el futuro podrían encontrarse con pensiones que apenas alcanzan para subsistir.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el valor de las prestaciones de jubilación en España en comparación con los ingresos percibidos mientras se trabaja es del 81,2%. Es decir, se estima que la pensión pública equivaldrá a los ingresos en activo menos un 18,8% En este sentido, los productos privados como los planes de pensiones pueden ser un buen complemento para que el autónomo asegure su futura prestación
Ventajas de invertir los 'picos de tesorería' en productos financieros
Por ello, los picos de tesorería, ya vengan a raíz de una devolución de impuestos, o por un aumento inesperado de la actividad, pueden ser una oportunidad para invertir en productos financieros que permiten ir dando valor al esfuerzo de ahorro con el paso del tiempo. Según explican los expertos de VidaCaixa, si lo que necesitamos es obtener un ingreso extraordinario a la pensión pública para la jubilación, lo mejor es pensar en un plan de pensiones. La devolución de la Agencia Tributaria puede servir de excusa para abrir uno y pensar en planificar un ahorro periódico, es decir, en hacer contribuciones de forma constante. Por ejemplo, mes a mes.
Además, teniendo una costumbre de ahorro y contando con el tiempo a favor, el esfuerzo será siempre menor para alcanzar el objetivo. Gracias al interés compuesto, los intereses que se generan sobre el ahorro aportado al plan se reinvierten y generan nuevos intereses, que suman valor al dinero aportado, explican desde VidaCaixa
Tener la posibilidad de hacer crecer el ahorro es una gran ventaja. En este sentido, según los expertos, una inversión a largo plazo puede dar frutos interesantes multiplicando las aportaciones del ahorrador y es la manera de que el dinero no pierda valor con la inflación.
Además, el propio autónomo puede elegir la rentabilidad que obtendrá, ya que ésta depende directamente del riesgo que se asuma. Las inversiones en renta variable suelen tener mayor riesgo y mayores posibilidades de rentabilidades altas. Por el contrario, la renta fija proporciona unos réditos menores a cambio de un riesgo menor. Decidirse por una, por la otra o por un poco de cada, depende de las necesidades de cada uno y también de la edad. Cuanto más nos acerquemos a la jubilación, más conviene aminorar el nivel de riesgo para consolidar lo que se ha conseguido, apuntan desde la entidad aseguradora.
Recomendaciones para ahorrar en tiempos de pandemia
Más allá de los picos puntuales, en general, los expertos aconsejan apartar entre un 10% y un 20% de los ingresos mensuales y guardarlos en la hucha. También es conocida la “regla 50-30-20”, que aconseja dedicar el 50% de los ingresos para lo básico (casa, suministros, alimentación, transporte), el 20% al ahorro a largo plazo y el 30% restante para ocio y aspectos del proyecto de vida de cada uno. La mejor opción es ahorrar cada mes, como si fuese un gasto fijo y, sobre todo, no tocarlo.
Desgravaciones disponibles en planes de pensiones
Pero además, las contribuciones a los planes de pensiones tienen ventajas fiscales, lo que puede ayudar a que, en la campaña siguiente, la renta salga de nuevo a devolver y, además, dar un empujón más al plan de futuro.
Los planes de pensiones tributan en la base imponible general en el IRPF y, cuando se hace una aportación, en la siguiente declaración de la renta se podrá deducir esta cantidad hasta un cierto límite. En otras palabras, Hacienda devuelve al contribuyente parte de lo que ha ahorrado, en función de su tipo impositivo.
Así, los trabajadores por cuenta propia pueden restar directamente el dinero invertido de la base imponible y disfrutar de ventajas fiscales al siguiente año, a la vez que mejoran su jubilación. A día de hoy, todavía pueden hacerlo hasta un importe de 8.000 euros o del 30% de sus rendimientos netos de actividades económicas.
