Opinión

Compatibilidad o incompatibilidad trabajo y familia

Lo primero es reconocer que quieres un futuro de vida familiar de calidad, que quieres compartir tiempo de calidad con tu pareja y con tus hijos a partir de ahí reconocer que si trabajas por cuenta ajena no va a ser factible, entonces tienes que dar un paso de adelante, tienes que ser tu propio patrón, tienes que convertirte en profesional independiente o autónomo.

Compatibilidad o incompatibilidad trabajo y familia

Durante años he sido asesor de la Asociación para la racionalización de horarios a la que me invitó mi buen amigo Ignacio Buqueras, a quien admiro por sus esfuerzos y su tesón por intentar compatibilizar o conciliar el trabajo con la familia, de tal forma que ésta no se desestructure o más bien que se vuelva a estructurar y las nuevas generaciones no tengan una infancia de soledad e inseguridad, sometidos a cualquier influencia indeseable.

Viendo la vida que llevan muchas familias te das cuenta que no existe tal familia, los padres trabajan largas horas, con cierta presión, con lo que cuando llegan a casa en el supuesto que los hijos estén despiertos, no tienen ninguna gana de dedicarles tiempo de calidad e intentan compensar con todo tipo de regalos materiales, el último smart pone, la última tablet, la última maquinita, etec.

¿Cómo solucionar el problema que este tipo de vida genera? Como dije al principio, mi buen amigo Buqueras no paraba de luchar intentando conseguir la conciliación entre trabajo y familia, lo que solucionaría el problema, pero es algo que, en mi opinión, es una quimera. En el momento que alguien ocupa un cierto nivel en una empresa, diría desde mandos intermedios de cierto nivel para arriba, la conciliación se convierte en imposible. Y más aún cuando trabajas en un puesto en una empresa multinacional en la que tienes que mantener relaciones con personas ubicadas en otros países, si la diferencia horaria, es importante, tipo Europa, con USA o LATAM, olvídate, etc.

Si tu puesto es de bajo nivel y por lo tanto el nivel de ingresos no es suficiente como para cubrir las necesidades artificiales que se han creado en las nuevas generaciones, pues tendrás que realizar horas extra o acudir al pluriempleo con lo que el dinero extra causa la disminución de horas en casa para dedicárselo a tus hijos y el tiempo en casa, al llegar cansados de tantas horas de trabajo, es un tiempo de baja calidad.

Aquí habría varias soluciones, algunas tienen que venir del cambio de cultura, siendo fundamental el cambio de horarios, como cenar a las 18.00 en vez de a las 22.00 que el prime time de TV no sea a las horas actuales, sino que se adelante un par o tres horas, e incluso que las compañías de seguros que cobre un plus a las empresas por realización de trabajo a partir de ciertas horas pues se incrementa el riesgo de accidente o que las autoridades acaben prohibiendo que se realice activa laboral después de ciertas horas.

Las soluciones globales de las que hemos hablado, no se nos escapa que son en su mayoría, inviables y desde luego en cualquier caso, de largo o larguísimo plazo. Entonces no debemos esperar soluciones que nos aporten otros, porque no lo van a hacer, ni sentarse en una esquina a lamentarse porque no hay solución.

Hay que adoptar una posición positiva y proactiva y lamentablemente individual.

Lo primero es reconocer que quieres un futuro de vida familiar de calidad, que quieres compartir tiempo de calidad con tu pareja y con tus hijos a partir de ahí reconocer que si trabajas por cuenta ajena no va a ser factible, entonces tienes que dar un paso de adelante, tienes que ser tu propio patrón, tienes que convertirte en profesional independiente o autónomo.

Alguien dirá inmediatamente, que precisamente los autónomos son los que no tienen vida propia, no pueden ponerse malos, no pueden tomarse vacaciones, etc. y eso es cierto siempre que seas uno del montón, uno de los muchos prestan servicios con un nivel de calidad mediocre que busca ganar el último euro de forma dudosa, no haciéndose responsable de los errores o desperfectos causados por una mala actuación.

De lo que se trata es de ser autónomo o profesional liberal de los buenos, no del montón, esos están condenados a estar liados con el trabajo muchas horas, con lo que la conciliación se hace imposible e incluso se puede llegar a vivir peor que como asalariado, de lo que se trata es hacer lo que sea muy bien.

Si eres un albañil, haz las cosas bien, toma cada encargo como si fuera una obra de arte y no como un castigo divino, hazlo bien y con limpieza y los propios clientes se encargarán de buscarte nuevos clientes, te recomendarán a terceros y tú al contar con trabajo de sobra podrás mantener el nivel de ocupación que desees. Lo mismo si eres un fontanero o un pintor.

Si eres un taxista, mantén el coche impecable, sé educado y respetuoso con los clientes, viste adecuadamente y ve siempre bien aseado, mantén una temperatura adecuada a los deseos de cada cliente en el vehículo, pregunta por la radio, si lo desean o no y pregunta y adáptate a sus preferencias, ofrece tus servicios a personas y empresas de tal forma que tengas una clientela regular, de tal forma que si tienes actividad continua, es posible que no tengas que trabajar más horas de la cuenta y puedas conciliar, al no tener tiempos muertos.

Si eres un profesional liberal, prepárate y mantente actualizado en tu especialidad, toma cada trabajo como si fuera para tu propia empresa, sé generoso en tu actuación, utiliza las TIC para poder realizar muchos trabajos desde donde quieras y pide a tus clientes que te ayuden a conseguir más clientes, si mantienes una buena base de clientes, podrás seleccionar los trabajos y ajustar los tiempos que te permitan conciliar.

En definitiva da igual cuál es tu profesión, si quieres conciliar, se puede, pero tienes que convertirte en autónomo, no tengas miedo, si eres muy bueno tendrás trabajo de sobra y podrás seleccionar y ajustar los tiempos.