Opinión

La cuarta ola; el futuro para pymes y autónomos, entre la cautela y la incertidumbre.

Lo que nos espera en la cuarta ola es más cierres de empresas y negocios y sus consecuencias en el empleo, que se traduce en la perdida de puestos de trabajo.
La cuarta ola; el futuro para pymes y autónomos, entre la cautela y la incertidumbre.

Mucho se está hablando de la cuarta ola, ¿Qué significa para pymes y autónomos? Antes repasemos lo que han significado las tres anteriores y los previsibles efectos que tendrá la cuarta ola.

La primera ola supuso una crisis de liquidez y de crédito, para solventarla se decidió inyectar al sistema, ayudas (no directas) y abrir el grifo de la financiación con los prestamos ICO, avalados por el gobierno.

Las entidades financieras, empezaron a ofrecer prestamos ICO, y muchas empresas y negocios ante la desesperación de la falta de liquidez, y sin analizar si les hacía falta y sobre todo que importe, decidieron acudir indiscriminadamente al endeudamiento de los ICO. Esto ha provocado para muchas empresas y autónomos un endeudamiento masivo, la segunda ola.

Este endeudamiento masivo, para obtener la rentabilidad esperada, unido a que la demanda en muchos sectores no se ha reactivado, esta provocando no poder atender a las obligaciones contraídas, lo que dará lugar a las insolvencias y los impagos, la tercera ola.

De momento y para tratar de evitar esta situación, se diseñaron las moratorias concursales, el aumento de carencia de y la posibilidad de ampliar los ICO. Con esta situación muchas empresas están sobreviviendo como empresas Zombies. Así mismo las entidades financieras ya están por un lado diseñando planes para refinanciar deudas, pero solo a empresas solventes, y por otro dotando como provisiones la morosidad que se les avecina.

Por su parte, el Gobierno y la Unión Europea, ya lleva semanas con el anuncio del fondo de 11.000 millones de euros de ayudas para autónomos y empresas, para tratar de revertir esta situación.

Ahora veremos cuando llegan y la cuantía de las ayudas. Ya se empieza a hablar que se retrasa a verano (tienen que aprobar el correspondiente Real Decreto Ley) y desgraciadamente no para todos los sectores y autónomos afectados. Los requisitos del CNAE y la no declaración de perdidas en el 2019 dejan fuera a 2 millones de empresas y más de 200.000 autónomos.

Con todos estos antecedentes, lo que nos espera en la cuarta ola es más cierres de empresas y negocios y sus consecuencias en el empleo, que se traduce en la perdida de puestos de trabajo.

Pasados los peores momentos de la pandemia o eso dicen, toca mirar al futuro con cautela e incertidumbre.

Cautela, debido al previsible aumento de morosidad, impagos y cierres de negocios que se espera en los próximos meses, como consecuencia del deterioro económico.

La incertidumbre se centra, en si la mayoría de los sectores lograran recuperar la demanda y sobre todo cuando llegará esa ansiada recuperación. El Gobierno y las Instituciones Europeas, deben de ser capaces definitivamente de ayudar a los autónomos y pymes de una manera rápida, directa y con trámites sencillos, sin que los autónomos y pequeñas empresas muramos en el intento.

Quizás en el próximo artículo tengamos algo más de luz al final del túnel