Opinión

Pregunta a tú móvil ¿cómo sacarle provecho profesionalmente?

Pregunta a tú móvil ¿cómo sacarle provecho profesionalmente?

Nuestros móviles y tabletas disponen de tal cantidad de información nuestra: datos personales, información bancaria, fotos, localizaciones, qué nos gusta… que es muy importante conocer cómo proteger nuestros datos personales. No obstante, también hemos de pensar en estos dispositivos como herramientas muy útiles que nos pueden facilitar nuestra vida profesional.

El rápido desarrollo tecnológico ha provocado un cambio en nuestros hábitos y, casi sin darnos cuenta, hemos pasado a depender de un buen número de dispositivos, a través de los cuales realizamos infinitas tareas cotidianas que antes era impensable realizarlas. Los utilizamos para comprar y pagar, buscar información en internet, custodiar y gestionar nuestros contactos, llevar la agenda, compartir nuestras actividades en redes sociales, utilizar sus servicios de mensaje y correo electrónico, escuchar música, guardar fotos propias y de amigos y familiares, leer la prensa, acceder a la banca online, comprar entradas del cine y, para utilizar servicios que incluso nos avisan al tener acceso a nuestras agendas. En definitiva, saben muchas cosas de nosotros, más que nosotros mismos, porque los dispositivos tienen memoria y capacidad para ello. Nosotros no, ya que ni nos interesa y ni tenemos capacidad para interrelacionar los datos como ellos.

Por eso es muy importante ser consciente de ello y tener la precaución cuando nos bajamos una APP de leer a qué le damos acceso para decidir si vale la pena descargársela. También es aconsejable, de vez en cuando, borrar datos, historiales, cookies y eliminar aplicaciones pre-cargadas en el móvil que no utilizamos. De esta manera, limitaremos el riesgo de su utilización masiva y anónima por parte de las empresas dedicadas al Big Data. Pero sobretodo limitaremos el verdadero peligro: que caigan en manos de delincuentes, si nos piratean el móvil o lo perdemos y, acceden a toda esta información o pasan a controlar el dispositivo incluyendo la cámara.

La Agencia de protección de Datos dispone de un decálogo con consejos respecto cómo proteger nuestra privacidad cuando utilicemos estos dispositivos tecnológicos, que recomiendo leer.

De todas maneras, no hemos de ver a estos dispositivos como armas letales, sino que, con cautela, se convierten en herramientas que nos facilitan la vida y profesionalmente son muy útiles y nos pueden ayudar a optimizar nuestro tiempo y dinero.

El móvil y las tablets se han convertido en nuestra oficina, sobre todo para los autónomos, y nos permite gestionar nuestra agenda y el correo electrónico, utilizarlo como nuestra centralita de llamadas, consultar mapas, utilizar nuestros programas de gestión, pero también nos permiten ahorrar en trámites y papeleo, ya que facilitan la gestión con el cliente mediante la aceptación de presupuestos, albaranes o contratos en el dispositivo, e incluso que nos pague a través del móvil.

Todo esto nos permite organizar nuestra actividad de manera mucho más eficiente, además de ahorrar costes. Sin embargo, hay que recordar que cuando interactuamos con el cliente por medio de estos dispositivos, también hemos de ser conscientes de cumplir con la Ley de Protección de Datos Personales. Si en los albaranes en papel incluíamos la cláusula de información, si ahora utilizamos nuestro móvil o tableta para que acepte presupuestos o firme albaranes o contrato, el cliente deberá ser igualmente informado y tener la oportunidad de leer y aceptar la cláusula de protección de datos. Por ello es importante saber trasladar los trámites realizados en papel para cumplir con la LOPD, a formato digital.

Como siempre, recordaros que en la página web de la Agencia Española de Protección de Datos, tenéis información con herramientas y consejos para cumplir con la Ley, o también podéis acudir a profesionales especializados en tratar con nuestro colectivo de autónomos, que conocen perfectamente sus necesidades y ofrecen servicios sencillos y acorde a las posibilidades económicas de nuestro colectivo.